Transición del romanticismo al realismo
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Transición del Romanticismo al Realismo:Se mantiene aún un fondo pintoresco y costumbrista en la narración y una visión idealizada de la realidad.Fernán Caballero: La gaviota. La humilde protagonista de la novela se casa con un médico alemán, triunfa como cantante, ama a un torero y ha de regresar, ya fracasada, a su pueblo.Pedro Antonio de Alarcón: El sombrero de tres picos. Destacan su chispeante argumento, su aguda captación de tipos y ambientes y su viveza de estilo.
Consolidación del Realismo español:Se produce a partir de 1868 y alcanza sus máximos frutos en los años 80 y 90. Se aprecian distintas actitudes según la ideología de los autores: 1- Postura tradicional: rechaza la ideología liberal y presenta una realidad idealizada. José María de Pereda: Sotileza, y Peñas arriba, novelas en las que idealiza el mundo rural de su montaña santanderina, presentada como cobijo de las viejas virtudes, frente a la corrupción de la vida moderna de la ciudad. 2- Postura esteticista es la que presenta Juan Valera. Liberal en sus ideas, en sus novelas evita presentar la realidad en su fealdad y miseria y la idealiza, la embellece. Su realismo se centra en el análisis sicológico de los personajes.Una de sus novelas más representativas es Pepita Jiménez (1874) 3- Realismo crítico: se mantiene con fidelidad a los supuestos del Realismo de descripción exacta de la vida cotidiana, sin evitar sus aspectos conflictivos. Autores representativos: Galdós y Clarín, ambos de ideas claramente progresistas.Leopoldo Alas, Clarín: La Regenta. Obra cumbre del realismo español.
Consolidación del Realismo español:Se produce a partir de 1868 y alcanza sus máximos frutos en los años 80 y 90. Se aprecian distintas actitudes según la ideología de los autores: 1- Postura tradicional: rechaza la ideología liberal y presenta una realidad idealizada. José María de Pereda: Sotileza, y Peñas arriba, novelas en las que idealiza el mundo rural de su montaña santanderina, presentada como cobijo de las viejas virtudes, frente a la corrupción de la vida moderna de la ciudad. 2- Postura esteticista es la que presenta Juan Valera. Liberal en sus ideas, en sus novelas evita presentar la realidad en su fealdad y miseria y la idealiza, la embellece. Su realismo se centra en el análisis sicológico de los personajes.Una de sus novelas más representativas es Pepita Jiménez (1874) 3- Realismo crítico: se mantiene con fidelidad a los supuestos del Realismo de descripción exacta de la vida cotidiana, sin evitar sus aspectos conflictivos. Autores representativos: Galdós y Clarín, ambos de ideas claramente progresistas.Leopoldo Alas, Clarín: La Regenta. Obra cumbre del realismo español.