El teatro comercial y renovador en el siglo XX

El teatro comercial PRIM

A) Introducción: el teatro de las primeras décadas del siglo XX estuvo condicionado por:

• Condiciones comerciales por el predominio absoluto de locales privados.
• Condiciones ideológicas debido a la presencia dominante de un público burgués que aceptaba un teatro crítico.
• Condiciones estéticas debido a la fuerte resistencia ante las experiencias innovadoras que triunfan en los escenarios de Europa.

B) Teatro comercial que estrenaba pero no innovaba, seguía los gustos del público que se decantaba por 3 tendencias:

• Comedia burguesa: modalidad escénica que critica de forma suave los conflictos morales de la burguesía. Presenta ambientes lujosos con un lenguaje cuidado. Su máximo representante fue Jacinto Benavente, quien intentó renovar el teatro modernizándolo y eliminando los excesos posrománticos, pero se halló en un dilema: crear obras de calidad o buscar el éxito comercial. Su producción dramática es muy abundante y su temática principal son los conflictos de la vida matrimonial y las aspiraciones de la clase media. En su técnica dramática prevalecen los diálogos sobre la acción. Algunas de sus obras destacadas son 'Los intereses creados' y 'La malquerida'.
• Teatro cómico: modalidad escénica preferida por las clases populares. Se agrupan espectáculos muy diversos (zarzuela, sainete) que representan costumbres y abordan temas superficiales con un trama fácil que se resuelve con finales felices. Carlos Arniches es el autor más popular del género chico, quien también escribió sainetes. Los tipos y ambientes castizos fueron la materia de sus obras, logrando reflejar el habla popular de Madrid hasta el punto de crear un tipo de expresión castiza que fue imitado por muchos. Algunas de sus obras destacadas son 'El puñao de rosas' y 'La señá de Trevélez'. Pedro Muñoz Seca también destacó en este género, centrando sus obras en las costumbres andaluzas, con un tono gracioso y espontáneo, como en 'El patio'.
• Teatro poético: mezcla el drama histórico-romántico con un lenguaje modernista, superficial y sensorial. Es un teatro muy tradicional en cuanto a ideas y concepción escénica, recuperando leyendas y personajes nobles del pasado histórico nacional. Algunos autores destacados son Eduardo Marquina, con obras como 'Las hijas del Cid', 'El pobrecito carpintero' y 'Cuando florezcan los rosales'; Villaespesa, con 'Doña María de Padilla'; y los hermanos Machado, con 'La Lola se va a los puertos'.

El teatro renovador

El teatro innovador surge de una serie de autores que intentan renovar la escena española. Al principio son intentos aislados, a veces muy valiosos, que solo consiguen interesar a un público muy reducido y selecto. En los años 20 se desarrollaron distintos intentos de renovación dramática al margen de las estructuras del teatro comercial mediante agrupaciones. Lorca es el mejor representante de la fusión entre tradición y vanguardia. En su obra teatral, el tema esencial es el enfrentamiento entre la sociedad con su poder represivo y el deseo de libertad y realización individual. Para representar este conflicto, elige como protagonista a la mujer víctima de la estricta moral de la época, al igual que en su poesía había elegido al gitano o al negro. Los rasgos que definen al teatro de Lorca son: búsqueda del espectáculo total, acercamiento a un receptor popular, ambientes opresivos que condicionan la libertad de los personajes principales y lenguaje sencillo pero dotado de un incomparable aliento poético. La producción teatral de Lorca se puede agrupar en tres núcleos fundamentales: farsas y poemas dramáticos, ciclo hermético influido por el surrealismo y ciclo trágico que tienen en común el protagonismo femenino y la insatisfacción amorosa. Otros dramaturgos destacados son Alejandro Casona, Jacinto Grau, Unamuno, Azorín, Rafa Alberti, Miguel Hernández, Max Aub y Ramón Gómez de la Serna.

Trayectoria dramática de Valle-Inclán

Se considera a Valle-Inclán como el dramaturgo más importante del siglo XX y uno de los grandes renovadores del teatro contemporáneo por su insaciable voluntad de renovación técnica, formal y temática. Su teatro fue tan nuevo para su momento que en España no encontró eco y permaneció oculto al gran público y alejado de los escenarios hasta más de 40 años después de haberse escrito. Con su teatro, Valle-Inclán inventa una nueva dramaturgia, una nueva concepción de lo dramático y una nueva utilización del espacio escénico. Su gran aportación fue una nueva forma de reflejar la realidad denominada esperpento. Su obra teatral se puede dividir en 4 ciclos: ciclo modernista ambientadas en la España medieval, ciclo mítico en época de transición, ciclo esperpéntico que consiste en adoptar una estética deformadora que resalta lo grotesco y evidencia la degradación social del país, y ciclo final de tragedias protagonizadas por personajes cotidianos o marginados. Algunas de sus obras más destacadas son 'Luces de bohemia', 'Divinas palabras' y 'La rosa de papel'.