El Sistema Político de la Restauración Española y sus Desafíos (1876-1931)
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El Sistema Político de la Restauración Española (1876-1931)
Pilares del Sistema Político
El sistema político de la Restauración se basó en dos pilares fundamentales:
- La Constitución de 1876
- El turnismo en el poder de los dos principales partidos políticos:
- El Partido Conservador, dirigido por Antonio Cánovas del Castillo y heredero de los moderados.
- El Partido Liberal, encabezado por Práxedes Mateo Sagasta y heredero de los progresistas.
La Constitución de 1876
La Constitución de 1876 era de corte moderado, pero lo suficientemente flexible como para permitir que los diferentes partidos pudieran gobernar sin necesidad de cambiarla. Entre sus características principales se encontraban:
- Una amplia declaración de derechos, con la posibilidad de ser restringidos en mayor o menor medida en función del partido gobernante.
- La soberanía compartida entre el Rey y las Cortes.
- Un sufragio a determinar por el partido gobernante.
El Turnismo
El turnismo se basaba en la alternancia pacífica de los dos partidos principales en el poder. Cuando el gobierno se desgastaba, el Rey encargaba la formación de un nuevo gobierno al jefe de la oposición. Este convocaba elecciones y las manipulaba para asegurar su victoria, utilizando trampas electorales como el pucherazo, y valiéndose de la presión ejercida sobre los electores por los caciques, individuos de gran poder económico y social a nivel comarcal o local.
Los Desafíos de la Restauración
El sistema de la Restauración tuvo que enfrentarse a numerosos problemas a lo largo de su vigencia:
La Oposición al Turnismo
Los partidos excluidos del turnismo, como los carlistas, los demócratas y los republicanos, representaron una constante oposición al sistema.
El Auge del Regionalismo
Frente a la política centralista del gobierno, surgieron movimientos regionalistas que reivindicaban mayor autonomía:
- Cataluña: Los catalanes reivindicaron el catalán como lengua oficial, la existencia de partidos y tribunales catalanes, y la autonomía de Cataluña (Bases de Manresa, 1892).
- País Vasco: Los vascos se centraron en la defensa de sus fueros y tradiciones.
- Andalucía y Galicia: En estas regiones, las reivindicaciones se centraron en la solución de los problemas económicos y sociales.
El Crecimiento del Movimiento Obrero
El movimiento obrero experimentó un notable auge, reflejado en la difusión del socialismo, tras la fundación del PSOE (1879) y de la UGT (1888), y del anarquismo, que fundó la FTRE (1881).
El Desastre de 1898
El desastre de 1898 consistió en la pérdida de las últimas colonias españolas: Cuba, Filipinas y Puerto Rico. Este hecho marcó profundamente la política y la sociedad española.
Mantenimiento del Turno de Partidos (1902-1917)
El sistema del turno de partidos se mantuvo entre 1902 y 1917 bajo el liderazgo de Antonio Maura (Partido Conservador) y José Canalejas (Partido Liberal). Ambos llevaron a cabo una política regeneracionista que intentó, sin éxito, acabar con el caciquismo e implantar ciertas mejoras sociales.
La Semana Trágica de Barcelona (1909)
La Semana Trágica de Barcelona (1909) fue el problema interno más destacado del periodo. Estuvo motivada por la movilización de reservistas para acudir a la guerra contra Marruecos, causada por el intento de España de crear un protectorado en esa zona. La movilización de estos reservistas, en su mayoría padres de familia, desencadenó una fuerte protesta popular. La represión del gobierno conservador provocó la ruptura del pacto de turno con los liberales y la dimisión del presidente Maura.
La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)
Primera Fase (1923-1925): Directorio Militar
En la primera fase de la dictadura, el gobierno estuvo en manos de un directorio militar. Este directorio:
- Suspendió la Constitución de 1876.
- Disolvió las Cortes.
- Prohibió los partidos políticos.
- Reprimió el movimiento obrero y el nacionalismo.
- Derrotó a los marroquíes tras el desembarco de Alhucemas (1925).
Segunda Fase (1925-1930): Directorio Civil
En la segunda fase, Primo de Rivera formó un directorio civil. Durante esta época:
- Se fomentó la agricultura de regadío y la industria.
- Se impulsó la construcción de carreteras y la mejora de los ferrocarriles.
Sin embargo, ante la repercusión de la crisis económica de 1929, el aumento del paro, el resurgimiento del movimiento obrero y de los nacionalismos, y la oposición de los intelectuales, Primo de Rivera dimitió en 1930. Se intentó entonces volver al sistema parlamentario, pero el desprestigio de la monarquía por su apoyo a la dictadura hizo que en 1931 ganaran los republicanos, lo que llevó a Alfonso XIII a abandonar el país.