Los Reyes Católicos y el Auge del Imperio Español: Un Recorrido por la Historia

Enviado por Chuletator online y clasificado en Historia

Escrito el en español con un tamaño de 11,84 KB

Los Reyes Católicos: Unión Dinástica e Instituciones de Gobierno

Tras el Tratado de los Toros de Guisando, Enrique IV nombró heredera a su hermana Isabel, con la condición de que se casara con el rey de Portugal, Alfonso V. Sin embargo, Isabel se casó en secreto con Fernando, príncipe de Aragón, en 1469. Al enterarse, Enrique IV la desheredó y nombró reina a su hija Juana, quien se casó con Alfonso V. A la muerte de Enrique IV, estalló una guerra civil entre los partidarios de Isabel y Juana. Finalmente, Isabel fue reconocida como reina con la firma del Tratado de Alcaçovas en 1478. En 1479, murió el rey de Aragón y las dos coronas se unieron. La Concordia de Segovia estableció una unión personal, pero no territorial. Para reforzar su autoridad, Isabel creó la Santa Hermandad y Fernando la Sentencia Arbitral de Guadalupe, reduciendo el poder de la nobleza. El rey se convirtió en Gran Maestre de las Órdenes Militares. Crearon un ejército propio, el Tribunal de la Santa Inquisición y mantuvieron el Consejo Real. Se establecieron las instituciones de la Corona de Castilla con dos Chancillerías y dos Audiencias, en Aragón una para cada reino y en Navarra la Corte Mayor. Finalmente, introdujeron la figura del corregidor.

El Significado del 1492: La Guerra de Granada y el Descubrimiento de América

El año 1492 fue crucial para España. El primer hecho destacado es la conquista del Reino Nazarí de Granada, que tuvo lugar entre 1482 y 1492. Fue una guerra de asedio con acuerdos generalmente respetuosos, excepto en el caso de Málaga. La técnica del asedio se empleó en Granada durante casi un año. Boabdil negoció en secreto acuerdos que le otorgaban el señorío de las Alpujarras, donde permaneció un año antes de partir a Marruecos. En enero de 1493, los Reyes Católicos tomaron posesión de la Alhambra. El 31 de marzo, decretaron la expulsión de los judíos que no se convirtieran al cristianismo. Por último, destaca el descubrimiento de América. Cristóbal Colón propuso a los Reyes Católicos viajar a las Indias, y estos aceptaron en 1492. Firmaron las Capitulaciones de Santa Fe, por las que Colón obtendría títulos de almirante, virrey y gobernador, además de un porcentaje de las riquezas y territorios descubiertos. Partió de Palos el 3 de agosto y llegó el 12 de octubre a la isla de Guanahani. En tres viajes más, descubrió Cuba y La Española. Colón murió en 1506, y comenzaron los problemas con Portugal. El Papa Alejandro VI estableció el Tratado de la "Bula Inter Caetera". Portugal no estuvo de acuerdo con recibir solo 100 millas al oeste de Cabo Verde, y en 1494 se firmó el Tratado de Tordesillas, que le otorgó 370 leguas.

El Imperio de los Austrias: España bajo Carlos I. Política Interior y Conflictos Europeos

En 1516, Carlos I heredó un vasto imperio gracias a la política matrimonial de sus abuelos, los Reyes Católicos. Heredó la Corona de Castilla y sus posesiones, así como la Corona de Aragón. De su abuela paterna, recibió Flandes y el Franco Condado, y de su abuelo paterno, el derecho a la Corona del Sacro Imperio Romano Germánico y Austria en 1519. Surgieron dos conflictos internos: uno político, la Guerra de las Comunidades (1520-1521), debido a que Carlos I no hablaba español y parecía más interesado en ser emperador. Las ciudades castellanas se rebelaron, exigiendo su regreso de Aquisgrán y atención a Castilla. Tras ganar la batalla de Villalar, Carlos I cambió su actitud. El segundo conflicto fue social, la Guerra de las Germanías (1520-1522), originada por un conflicto entre la burguesía y la nobleza tras un brote de peste. Los nobles abandonaron la ciudad y los campesinos aprovecharon para proponer la reducción de sus privilegios. Los agermanados tomaron el poder, hubo una matanza de moriscos y el conflicto finalizó en 1522 con la victoria de los nobles y las tropas castellanas. Los conflictos exteriores fueron con Francia, Turquía y el Imperio. Con Francia, Carlos I y Francisco I lucharon por la corona imperial en cuatro guerras entre 1521 y 1544. El conflicto con Turquía se extendió hasta Viena. Carlos I conquistó Túnez en 1533, pero no resolvió el problema. En el Imperio, el protestantismo se expandió, rompiendo la unidad de la Iglesia Católica. Los príncipes alemanes formaron la Liga de Esmalcalda y se aliaron con el rey francés. Carlos I firmó la Paz de Augsburgo en 1555, reconociendo la libertad religiosa a los príncipes alemanes. En 1556, Carlos I abdicó.

La Monarquía Hispánica de Felipe II: Gobierno, Administración, Problemas Internos y Guerras en Europa

En su abdicación en 1556, Carlos I dejó a Felipe II todos sus territorios excepto el Imperio Germánico. En política interior, surgieron dos problemas: la Rebelión de las Alpujarras (1568-1570), provocada por la prohibición de las costumbres musulmanas, que llevó a la dispersión de los moriscos en la península; y las Alteraciones de Aragón (1590-1592), donde Antonio Pérez, tras ser encarcelado, buscó protección en Aragón. Felipe II envió a la Inquisición y luego a un ejército para ejecutar la justicia. Pérez huyó a Francia. En política exterior, España se enfrentó a Francia, ganando en San Quintín (1557) y firmando la Paz de Cateau-Cambrésis. En el norte, el calvinismo ganó seguidores y Felipe II los persiguió, provocando una rebelión. Las siete provincias del norte se independizaron, seguidas por las del sur en 1648. Se creó la Liga Santa para derrotar a los turcos, que fueron vencidos en la batalla de Lepanto en 1571. En 1558, comenzó la rivalidad con Inglaterra, que culminó en 1588 con el desastre de la Armada Invencible. El Consejo de Estado se encargaba de la política exterior. Los Consejos Territoriales estaban divididos, siendo el más importante el Consejo de Castilla. Los Consejos Técnicos incluían la Inquisición, las Órdenes Militares y Hacienda. América se administraba desde España a través del Consejo de Indias para las leyes y la Casa de Contratación de Sevilla para el comercio.

Exploración y Colonización de América: Consecuencias de los Descubrimientos en España, Europa y América

En 1519, Magallanes partió de Sevilla y llegó a Filipinas. Juan Sebastián Elcano logró regresar a Sevilla tres años después. Hernán Cortés conquistó el Imperio Azteca (1519-1521) con la ayuda de sus enemigos. Mendoza exploró el noroeste de Norteamérica (California) y Cabeza de Vaca el sur (Florida). Francisco Pizarro y Diego Almagro conquistaron el Imperio Inca (1531-1533). Legazpi incorporó Filipinas en 1571. Para los indígenas, la llegada de los españoles supuso un gran descenso demográfico y la destrucción de su forma de vida, extendiendo el pesimismo, causando suicidios y provocando una caída de la natalidad.

La Guerra de los Treinta Años y la Pérdida de la Hegemonía Española en Europa

La Guerra de los Treinta Años coincidió con el reinado de Felipe IV. Fue un conflicto entre protestantes y católicos. Los habitantes de Bohemia se rebelaron contra Fernando II, quien quería imponer la fe católica. Los Habsburgo apoyaron al rey de Francia, mientras que Inglaterra apoyó a Bohemia. En 1621, España entró en el conflicto tras finalizar la Tregua de los Doce Años. La única victoria española fue la de Breda en 1624. En 1648, se firmó la Paz de Westfalia, reconociendo la independencia de las Provincias Unidas y marcando la pérdida de la hegemonía española en Europa a favor de Francia. La guerra con Francia continuó hasta 1659, cuando se firmó la Paz de los Pirineos, cediendo Rosellón, Cerdaña, plazas en Flandes (Artois) y Luxemburgo. Luis XIV se casó con una hija de Felipe IV. En 1668, España reconoció la independencia de Portugal. Entre 1667 y 1669, Luis XIV declaró la guerra a España y adquirió territorios como el Franco Condado o Dunquerque, consolidando la hegemonía francesa en Europa.

Los Austrias del Siglo XVII: El Gobierno de Validos y la Crisis de 1640

Los validos eran nobles amigos del rey a quienes este delegaba las labores de gobierno. Algunos ejemplos son el Duque de Lerma, el Duque de Uceda (Felipe III), el Conde-Duque de Olivares (Felipe IV), el Padre Nithard durante la regencia de Mariana de Austria, Juan José de Austria y el Duque de Medinaceli (Carlos II). Durante el reinado de Felipe III, el Duque de Lerma llevó a cabo una política de corrupción para enriquecerse. Durante su valido se produjo la expulsión de los moriscos. En política exterior, fue un período de paz, con la firma de la Paz de Londres y la Tregua de los Doce Años. La crisis de 1640 se sitúa dentro de la Guerra de los Treinta Años y surge por el descontento político y social con la actuación del Conde-Duque de Olivares, quien pretendía centralizar el gobierno a través de la Unión de Armas. En Cataluña, el día del Corpus Christi, el ejército que iba a Francia arrasó Barcelona, provocando un levantamiento campesino y rebeliones independentistas. Mataron al virrey y apoyaron a Luis XIII, nombrándole Conde de Barcelona. Un brote de peste y una crisis económica llevaron a la rendición catalana en 1652, a condición de respetar sus fueros. Portugal se declaró independiente en 1640 ante la política centralista del valido de Felipe IV. La nobleza nombró al Duque de Braganza rey como Juan IV. Felipe IV optó por solucionar la rebelión de Cataluña, mientras que Francia e Inglaterra apoyaron a Portugal, reconociendo su independencia en 1668.

Principales Factores de la Crisis Demográfica y Económica del Siglo XVII y sus Consecuencias

El siglo XVII se caracterizó por una profunda crisis con graves consecuencias. En el ámbito demográfico, hubo un gran descenso poblacional debido a epidemias, la expulsión de los moriscos durante el reinado de Felipe III, el aumento de la mortalidad por las guerras y las dificultades económicas, que incrementaron la emigración y disminuyeron la natalidad. También hubo una depresión económica, causada por el creciente endeudamiento y la disminución de los metales preciosos. Se produjeron tres bancarrotas en el siglo XVI y seis en el XVII, alterando el valor de la moneda. Se impusieron nuevos impuestos, se hicieron donativos a la nobleza y se vendieron cargos públicos y títulos nobiliarios. Hubo una caída de la producción, una disminución de la ganadería bovina, una crisis en la industria textil castellana y un acaparamiento del comercio con América por parte de extranjeros. A partir de 1680, se produjo un cambio de tendencia demográfica y comercial, que ayudó a la devaluación de la moneda de vellón, frenando la inflación y estabilizando el sistema monetario.

Crisis y Decadencia de la Monarquía Hispánica: El Reinado de Carlos II y el Problema Sucesorio

El reinado de Carlos II comenzó en 1665, cuando tenía solo 4 años. Su madre, Mariana de Austria, fue regente hasta 1675, apoyada por un Consejo de Regencia y el Padre Nithard. Carlos II contó con la ayuda de los validos Valenzuela, Don Juan José de Austria, el Duque de Medinaceli y el Conde de Oropesa. En política interior, destacaron las revueltas sociales de las Segundas Germanías en 1693 y el Motín de los Gatos en 1699 por el alza del precio del pan. En política exterior, se siguieron perdiendo territorios europeos, como el Franco Condado, que pasó a manos de Francia. El problema sucesorio fue el más importante. Carlos II se casó dos veces, pero no tuvo descendencia. Luis XIV de Francia y Leopoldo I de Austria se repartieron España pensando que Carlos II moriría pronto, eligiendo a José Fernando de Baviera como candidato, quien murió en 1699. María Antonia renunció al trono y propuso a su marido, Maximiliano de Baviera. Luis XIV propuso a su nieto Felipe de Anjou, y Leopoldo I a su hijo, el Archiduque Carlos. Finalmente, antes de morir, Carlos II nombró heredero a Felipe de Anjou, dando lugar a la Guerra de Sucesión Española.

Entradas relacionadas: