La Revolución Industrial y sus consecuencias

La Revolución Industrial tiene dos significados:

En sentido estricto

Es una revolución tecnológica y organizativa en el campo de la producción. Aparecen nuevas máquinas y las fábricas cambian. El resultado es un nuevo tipo de crecimiento económico, el crecimiento auto sostenido en el tiempo.

En sentido amplio

Es una revolución en el campo de las estructuras de las economías. Tradicionalmente se han distinguido en la economía tres sectores: primario, secundario y terciario. Mientras que en las economías preindustriales el principal sector era el primario, a partir de la Revolución Industrial la mayor parte de la población comenzó a emplearse y depender del sector secundario.

El proceso de industrialización significó un aumento del producto industrial proporcionalmente mayor que del resto de los componentes del producto interior bruto.

La revolución industrial surgió a partir de estas dos realidades:

• Aparición de nuevas máquinas que se utilizan especialmente en la industria textil y en la siderúrgica junto con la aparición de nuevas fuentes de energía. Se logra un eficaz aprovechamiento del vapor y se emplea un nuevo tipo de combustible: el carbón mineral.
• Cambios organizativos en las empresas. Se logra aumentar la productividad organizando de manera más eficiente la producción.

Los condicionantes previos que hubieron para que surja la revolución son los siguientes:

1. Economía de mercado
2. Revolución agrícola que permite aumentar la productividad del campo
3. Revolución en el transporte y las comunicaciones: aparición del ferrocarril
4. Revolución financiera que permite disponer de los capitales necesarios para que los accionistas puedan hacer transacciones mercantiles
5. Revolución institucional que permite un contexto jurídico y político favorable a las iniciativas empresariales.

La consecuencia de ello fue un crecimiento económico intenso.

Revolución industrial en Inglaterra

Gran Bretaña fue el primer país en comenzar su industrialización, era una nación rica con una sólida burguesía y un mercado apreciable. Con grandes reservas de carbón y hierro. Hubo grandes cambios políticos donde Inglaterra se colocó como sistema institucional parlamentario.

En Inglaterra se produjeron importantes cambios intelectuales que hicieron a la población más permeable al influjo de los avances científicos y tecnológicos. La revolución agraria, hubo un gran aumento en la productividad debido a las nuevas formas de organización de la propiedad y a la incorporación de nuevas tecnologías. Esto hizo aumentar la población rural que emigraba a las ciudades a trabajar en las fábricas. Protoindustrial viene dado porque eran los comerciantes y no los dueños de las fábricas quienes controlaban una gran cantidad de talleres dispersos, constituyendo importantes organizaciones empresariales. Las ventajas del sistema protoindustrial (flexibilidad, poca inversión en capital fijo, etc.) se fueron convirtiendo en limitaciones a medida que las empresas protoindustriales iban aumentando de tamaño ya que los costes de control y logística se multiplicaban. Gracias a los nuevos avances tecnológicos surgió el nuevo sistema de producción llamado “fabril”. El tema de producir era muy lento hasta que surgió la primera fábrica algodonera, cuando a partir de este suceso, ya se empezaron a crear muchas más. Así fue como comenzó la revolución industrial (atrajo la mano de obra). Propagaron una mejora en la revolución: La industria textil, la siderurgia y la aparición de la máquina de vapor con sus aplicaciones a la producción y a los transportes. La innovación más famosa fue la máquina de vapor de James Watt.

Consecuencias de la revolución industrial Inglaterra: El paso de una economía agraria a una industrial supuso un cambio tanto en lo económico como en la distribución geográfica y condiciones de vida.

La población mejoró al completo ya que IPC aumento y las desigualdades se equilibraron con el tiempo. Población rural se trasladó a las ciudades. Allí las condiciones de vida eran muy difíciles, los barrios obreros padecían una fuerte contaminación y se carecía de servicios básicos. El trabajo en las fábricas era muy duro, sin apenas derechos para los trabajadores y largas jornadas en condiciones precarias. El desempleo cundió entre los trabajadores quienes, descontentos, intentaron oponerse incluso violentamente contra las máquinas dando lugar al llamado movimiento ludita. Con el paso del tiempo la situación fue mejorando y por medio de leyes, se protegió a los trabajadores actuando en defensa suya.

La industrialización francesa

El éxito de la Revolución Industrial inglesa abrió el camino para que otros países la siguieran. Los historiadores lo han interpretado desde 3 perspectivas:

1. Haciendo de la industrialización británica el modelo que siguieron los países.
2. Señalando que los países que siguieron a G.Bretaña no copiaron su modelo sino que se pusieron a su altura.
3. Aunque hubo diferencias entre G.Bretaña y el continente no fueron tantas.

Los avances franceses fueron más modestos dando una imagen de Francia de incapacidad (fracaso), pero a finales del S.XVIII Francia estaba en casi mismos niveles en todos los ámbitos. La industrialización no empezó antes en Francia por las guerras napoleónicas, pero una vez finalizadas comenzó la industrialización. Francia no copió el modelo tal cual al de G. Bretaña sino que estableció una estructura dual donde el sector moderno y tradicional fue un éxito. Esto explica que la industrialización francesa fue obra de pequeños empresarios que trabajaban en base a sus intereses. El precio del mantenimiento de la estructura dual fue el ritmo del crecimiento del PIB fue lento pero en términos Per Cápita fue alto. Generando un bienestar social.

La Revolución Industrial fuera de Europa: Estados Unidos

Las condiciones que favorecieron la industrialización fueron:

• Abundancia de tierras y riqueza de recursos naturales.
• Escasez de la mano de obra pese al crecimiento de la población.
• Lejanía de los centros productores.

Revolución Industrial fuera de Europa: Japón

A principios del S.XIX Japón era un país feudal y atrasado. El territorio japonés se distribuía entre los grandes señores feudales (Daimios) a su servicio estaban los samurais y la base de la pirámide social estaba ocupada por los campesinos. Una flota americana obligó a abrir los mercados. Los que estaban en contra de esto, reclamaban el restauramiento de los emperadores, provocando una revolución política (Meijí) en 1868 pero además pretendían modernizar el país. Fue un triunfo esa revolución y se puso en marcha el proceso modernizador. Así a finales del S.XIX Japón estaba industrializado.

EL CASO ESPAÑOL: SIMILITUDES Y DIFERENCIAS CON OTRAS NACIONES

El modelo español

España en el S.XIX se encontraba en una situación difícil con la guerra de la independencia, la civil, falta de capitales etc. Las bases del crecimiento español fueron lentas y le fue muy difícil acercarse a la de los países más avanzados, pero a partir de 1960 la tasa de crecimiento fue más rápida que en el resto de países. En cuanto a las causas de porque el proceso no fue más intenso no hay acuerdo entre los historiadores, unos dicen que fue por la debilidad de la demanda y otros destacan los factores de la oferta como la falta de innovación tecnológica.

Etapas de la industrialización española en el S.XIX

1. 1800-1830: no hay industrialización sólo un estancamiento económico.
2. 1830-1865: comienza la industrialización, el sector que la lidera es el textil y es una etapa de acumulación de capitales y de desarrollo de ferrocarriles.
3. 1865-1913: aquí se da el despegue de la industria siderúrgica.