El Retorno de los Borbones: Alfonso XII, Cánovas y las Desamortizaciones

El Reinado de Alfonso XII: La Restauración Borbónica

Cánovas del Castillo preparó el regreso de los Borbones a España. Convenció a Isabel II para que abdicara en favor de su hijo, Alfonso XII, quien posteriormente recibió instrucción en la academia militar de Sandhurst, Inglaterra. En el verano de 1874, se redactó el Manifiesto de Sandhurst, firmado por el príncipe Alfonso XII, en el que prometía instaurar una monarquía democrática, liberal y constitucional, que permitiría la coexistencia de todos los sistemas políticos en España.

En diciembre de 1874, el general Martínez Campos lideró un pronunciamiento militar en Sagunto, proclamando rey a Alfonso XII. Cánovas asumió la jefatura del gobierno y organizó la llegada del nuevo rey, quien arribó a España en enero de 1875. Alfonso XII reinó desde 1875 hasta 1885. Tras su muerte, su esposa, María Cristina de Habsburgo, asumió la regencia hasta 1902, cuando el hijo de Alfonso XII alcanzó la mayoría de edad y pudo reinar. El retorno de los reyes a España se conoce como la Restauración.

Cánovas ideó un sistema político novedoso para España, inspirado en el modelo inglés.

El Sistema Canovista

El sistema canovista se basaba en tres pilares fundamentales:

• Bipartidismo: La alternancia en el poder entre el Partido Conservador, liderado por Cánovas, y el Partido Liberal, encabezado por Sagasta.
• El Rey: Monarca con un papel activo en la política. Cánovas promovió la imagen del "rey soldado", como jefe del ejército.
• La Constitución: Cánovas diseñó un sistema basado en el turno pacífico de dos partidos en el poder.

Las Desamortizaciones del Siglo XIX

Durante el siglo XIX, se llevaron a cabo dos importantes procesos de desamortización en España:

Desamortización de Mendizábal (1836-1837)

Consistió en la incautación estatal de bienes eclesiásticos y civiles. Afectó principalmente a monasterios, conventos y, en general, al clero regular, que poseía grandes extensiones de tierra, muchas de ellas mal cultivadas. El territorio reconquistado se había repartido entre las ciudades, la nobleza y el clero.

Causas

• Reducir o suprimir el déficit público.
• Aumentar la productividad de las tierras.
• Desmantelar la gran propiedad.

Proceso

El Estado analizó y clasificó las tierras por calidad y tipo. Se subastaron en lotes por provincias, con la restricción de que una persona solo podía comprar un lote en la misma provincia. El 20% del precio se pagaba al contado, y el resto se podía abonar a plazos, en dinero o en deuda pública.

Consecuencias

• Los compradores fueron principalmente nobles y burgueses no agrarios, surgiendo la figura del rentista.
• Aumentó la recaudación de impuestos.
• Se incrementó la producción de cereales y vid.
• Se fomentó la pequeña y mediana propiedad.

Desamortización de Madoz (1855-1856)

Esta desamortización afectó a las tierras de la Iglesia, así como a los bienes propios y baldíos. Se subastaron numerosas fincas, pero a precios bajos debido a la pobreza de las tierras. Se modificó la forma de pago: el 10% debía abonarse al contado, y el resto no se podía pagar con deuda, sino únicamente en dinero. Los ayuntamientos se beneficiaron de los ingresos obtenidos, lo que les permitió construir nuevos edificios.