Reinado de Isabel II: Década Moderada, Bienio Progresista y Crisis Final (1844-1868)

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Isabel II (2ª Parte). La Década Moderada (1844 - 1854)

Isabel II fue proclamada mayor de edad con solo trece años. Los diez primeros años de reinado, bajo el poder del General Narváez, se caracterizaron por una política de estabilidad. La Constitución de 1845 introdujo tres novedades principales:

  • Sustitución de la soberanía nacional por la conjunta entre el Rey y las Cortes.
  • Sistema bicameral, aunque los Senadores eran designados por el Rey.
  • Los Diputados debían serlo por un mínimo de cinco años y disfrutar de una renta o pagar contribuciones según la ley.

Política de Narváez

  1. Centralización y unificación del aparato administrativo estatal.
  2. Nuevo código penal (1848).
  3. Recorte de los poderes de los ayuntamientos para nombrar alcaldes en pueblos y ciudades mayores de 2.000 habitantes.
  4. Implantación del sistema decimal en monedas, pesos y medidas.
  5. Plan de estudios unificados de los bachilleratos, privando a las universidades de su tradicional independencia.
  6. Reforma de la Hacienda.
  7. Creación de la Guardia Civil para garantizar la ley y el orden.
  8. Obras públicas, sentando las bases de los futuros planes generales de carreteras, ferrocarriles y puertos.

En resumen, una reorganización y estabilización con mano dura desde el Gobierno. En el interior, los moderados tuvieron que hacer frente a nuevas insurrecciones carlistas a partir de 1846, con un nuevo pretendiente, Carlos Luis de Borbón y Braganza. La lucha se centró en Cataluña y tuvo un carácter más social que político. En el exterior, el impacto de la revolución de 1848 se redujo en España a una asonada el 26 de marzo en Madrid a cargo de militares subalternos o retirados, jóvenes intelectuales, artesanos y parados, sin la participación de las clases urbanas más bajas como ocurrió en París. También hubo una sublevación del regimiento de España en Madrid (7 de mayo) con ramificaciones en Sevilla, Barcelona y Valencia. La revolución del 48 fracasó en España por la falta de apoyo progresista, la falta de implicación popular y la represión de Narváez.

La Revolución de 1854: El Bienio Progresista (1854 - 1856)

Los moderados, desgastados en el poder, y los progresistas, con el apoyo de los moderados descontentos, tuvieron éxito en la revolución de 1854. Se inició con La Vicalvarada, con un nuevo general, O'Donnell, y reapareció Espartero, dando inicio al llamado bienio progresista. Se llevó a cabo una nueva desamortización civil y eclesiástica (Madoz), que enrareció las relaciones con Roma. Nuevos levantamientos carlistas, motines populares urbanos y conflictos proletarios dificultaron la labor del gobierno de Espartero, que pronto dejó paso al nuevo general: O’Donell.

La Unión Liberal

Entre los moderados de Narváez y los progresistas de Espartero creció un nuevo partido, La Unión Liberal, que aspiraba a llevar a cabo las reformas prometidas por los últimos. O'Donnell, llamado por Isabel II, se mantuvo en el poder cinco años (1858 - 1863). Los factores de esta estabilidad fueron:

  • Un clima de prosperidad general que favoreció la movilización de capitales.
  • Un nuevo talante político, tolerante y pragmático, que supo contentar a la oligarquía.

Se llevó a cabo una política de derecho de intervención exterior, que se centró en la Guerra de África y México.

La Guerra de África (1859 - 1860)

Provocada por las agresiones marroquíes a Ceuta y Melilla, España amplió el territorio de ambas zonas, obtuvo el reconocimiento de Ifni y la ocupación de Tetuán.

La Intervención en México

Se realizó de acuerdo con Francia y Gran Bretaña para salvaguardar los intereses amenazados por la revolución. El escaso éxito de la política exterior, unido al desgaste interior, llevó a O'Donnell a presentar la dimisión el 27 de febrero de 1863.

La Industrialización de España

Cuando Fernando VII llegó a España, la situación económica era lamentable. Esto se agravó con la pérdida de las colonias americanas, que cortó la llegada de metal acuñable y la interrupción del comercio ultramarino. La Guerra de la Independencia terminó por completar el desastre, dejando al país esquilmado, la industria destruida, las comunicaciones impracticables y la agricultura dañada. Durante el reinado de Isabel II se intentó salir de esta situación económica.

Medidas de carácter proteccionista

  • Estimular la producción nacional y frenar la competencia extranjera.
  • Reforma arancelaria de 1841 con Espartero, reduciendo los derechos que tenían que pagar los productos de importación.
  • Política librecambista que llevó al traste con el gobierno progresista.

Durante la Década Moderada

  • Intento de despegue industrial en la siderurgia andaluza, con el primer alto horno en Marbella en 1832, y la industria textil catalana con la implantación de maquinaria a vapor a partir de 1844.
  • Introducción del ferrocarril: 1848 Barcelona – Mataró (28 km), 1851 Madrid - Aranjuez.
  • En 1868 la red era de 4.899 km.

Los últimos años del reinado

Se alcanzó un cierto grado de estabilidad económica y política. Se produjo un relevo generacional con nuevos políticos como Mateo Sagasta y relevos en los militares, como Prim por Espartero, avalado por sus éxitos en la Guerra de África y México. En septiembre de 1868 estalló la revolución (La Gloriosa) e Isabel II abandonó España. Los ideales europeos del 48 triunfaban 20 años después.

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