Regencia de María Cristina estatuto real

Enviado por Chuletator online y clasificado en Historia

Escrito el en español con un tamaño de 6,08 KB

1-EL CARLISMO COMO ÚLTIMO BASTIÓN ABSOLUTISTA: IDEARIO Y APOYOS SOCIALES; LAS DOS PRIMERAS GUERRAS CARLISTAS. 
En 1833, los partidarios del hermano de Fernando VII, Carlos María Isidro, se levantan en armas contra el gobierno de la Regencia. 
El lema de los carlistas era Dios, Patria y Rey y su ideología se vertebra en las siguientes ideas: 
- Defensa del Absolutismo y antiliberalismo. - La Iglesia Católica vertebra la sociedad española. Defienden la confesionalidad del Estado. - Se oponen a la centralización política y defienden el mantenimiento de los antiguos fueros. El carlismo es importante en País Vasco, Navarra, parte de Cataluña, Aragón y Valencia. Los sectores sociales que engrosan las filas carlistas son el clero, la nobleza agraria y los sectores empobrecidos del medio rural (campesinos, pequeños propietarios empobrecidos, artesanos arruinados, arrendatarios, etc...).Durante la 1a Guerra Carlista, don Carlos se instala en Navarra donde crea un Estado con su gobierno, administración, universidad, moneda propia, etc... Su jefe militar más importante es Zumalacárregui. En Levante, el carlismo se hizo fuerte en la comarca castellonense del Maestrazgo, donde destaca la figura de Ramón Cabrera. 
Esta primera guerra acaba con el Convenio o Abrazo de Vergara (1839) entre el carlista general
Maroto y el liberal general Espartero. Este convenio establecía el respeto de los fueros vasco y navarro y el reingreso de la oficialidad carlista en el ejército real. 
Este acuerdo no fue aceptado por el sector intransigente del carlismo, que continuó la lucha, como el general Cabrera, derrotado en 1840, o se exilió. El número de víctimas de esta primera guerra se calcula próximo a 200.000. 
La 2a Guerra Carlista, fue un conflicto bélico que tuvo lugar fundamentalmente en Cataluña entre 1846 y 1849 debido, al menos teóricamente, al fracaso de los intentos de casar a Isabel II con el pretendiente carlista, Carlos Luis de Borbón, que había sido pretendido por distintos sectores moderados de Isabel, singularmente Jaime Balmes y Juan Donoso Cortés, y del carlismo. Sin embargo, Isabel II terminó casándose con su primo Francisco de Asís de Borbón. El conflicto, cuestionado por muchos historiadores como tal guerra, fue fundamentalmente un levantamiento popular en distintos puntos de Cataluña. Este segundo episodio no tuvo ni de lejos la importancia del primero y acabó con la huída a Francia de los principales líderes carlistas.
2.1.- La Regencia de Espartero (1840-1843).
Tras el motín de La Granja y la reforma de la Constitución de 1812 que dio lugar a la nueva Constitución de 1837, la regente María Cristina pretendíó devolver el poder a los moderados pero la presión de los progresistas, alineados en torno a la figura del general Espartero, que debía su popularidad a sus victorias contra los carlistas, consigue que María Cristina nombre jefe del gobierno a Espartero. Los continuos enfrentamientos entre Espartero y la regente conducen a ésta a renunciar a la regencia, exiliarse en París y dejar el poder en manos del propio Espartero en 1840. La regencia de Espartero estará marcada por la oposición violenta de los numerosos militares moderados, (que ya no cuentan en principio con el enemigo carlista desde la firma del Convenio de Vergara), y la falta de aptitudes políticas del propio Espartero, incapaz de mantener la unidad entre los propios miembros de su gobierno. 
Los problemas decisivos que acaban con Espartero comienzan cuando pretende establecer una política económica radicalmente librecambista. El librecambismo perjudicaba a la industria textil catalana, amenazando con la ruina a la burguésía y con el paro a los obreros, ante la falta de competitividad (peor calidad y precios más altos), de la misma. La reacción de la burguésía y los obreros de Barcelona, que hasta ese momento había sido uno de los focos del progresismo español, fue un levantamiento al que Espartero, dando muestras de su falta de mano izquierda, contestó bombardeando Barcelona. Finalmente, Espartero tuvo que huir a Inglaterra ante el triunfo de un pronunciamiento moderado dirigido por el general Narváez. Para evitar el nombramiento de un tercer regente, se adelanta a 1843 la mayoría de edad de Isabel II, que comienza su reinado efectivo en este momento. 
Una vez Narváez y los moderados en el poder, proceden a una reforma de la Constitución de 1837, de la que surge la Constitución de 1845. 

Entradas relacionadas: