Procedimiento paralelistico cantigas amigo

Las manifestaciones escritas de estos cantos líricos abarcan un periodo de tiempo bastante dilatado: las jarchas desde mediados del Siglo XI hasta la primera mitad del Siglo XIV; las cantigas de amigo desde finales del siglo XII hasta finales del Siglo XIV; y los villancicos, desde mediados del Siglo XV hasta finales del Siglo XVII.

Estas composiciones expresan, generalmente, la queja amorosa femenina por la ausencia del amado. Las confidentes habituales de la muchacha enamorada son la madre, las hermanas y las amigas, además, en el caso de las cantigas de amigo, la naturaleza (olas, árboles, pájaros..)Las jarchas y los villancicos se caracterizan por la irregularidad e imprecisión métricas: constan de dos, tres o cuatro versos de medida y rima variables. Las cantigas de amigo se caracterizan por la regularidad y precisión. Las cantigas de amigo están formadas por una serie de estrofas que adoptan una estructura paralelística. La forma originaria de jarchas y villancicos es muy sencilla. Los escritores cultos añaden varias estrofas que reciben el nombre de glosa.Las jarchas están escritas en mozárabe. La lengua de las cantigas de amigo es el galaico-portugués y la de los villancicos el castellano del Siglo XV.Por lo que se refiere al estilo, las jarchas muestran una extremada sencillez tanto formal como conceptual. En las cantigas en procedimiento paralelísticoproduceunefectodeinmovilidad intensamente lírica. Los villancicos destacan por la condensación expresiva, que elimina la sobriedad afectiva y la espontaneidad en la expresión de los sentimientos. 

Se conoce con el nombre de Lírica culta castellana a la poesía elaborada en las cortes de los reyes medievales por parte de los caballeros que vivían en ellas (reyes, políticos, magnates...) y que nos ha llegado a través de trovadores, diversas recopilaciones de poesía lírica (antologías) que van siendo reunidas desde comienzos del Siglo XV. Debido a ese contexto de creación, se trata de una poesía esencialmente social, y no tan subjetiva, íntima, como la tradicional. Esta función social se ejemplifica en los diversos temas tratados: la política, la moral, la filosofía, la teología, el amor cortés, etc.