Prácticas Funerarias en la Antigüedad: Enterramientos Infantiles y Ofrendas Fundacionales

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Enterramientos Infantiles y Ofrendas Fundacionales

Los Enterramientos Infantiles

Restos humanos hallados en el interior de recintos de habitación: santuarios gentilicios, cráneos clavados e inhumaciones infantiles. Se distinguen dos tipos de inhumación: primaria, sin modificación de la estructura corporal, y secundaria, con modificación de la estructura corporal. Las inhumaciones primarias suelen presentar una posición fetal. ¿Es esto una referencia al ciclo de vida? ¿Implica un conocimiento de la estructura de gestación? ¿O tal vez una protección simbólica?

En las inhumaciones secundarias se observa un proceso de descarnación previo, posiblemente debido a agentes climáticos o animales. ¿Existían pudrideros? Se aprecia una selección ritual del cráneo. Concepto de los enterramientos:

  • Fetos a término: Individuos que han completado el período de gestación.
  • Perinatales: Individuos nacidos muertos o fallecidos poco después o a consecuencia del parto.
  • Neonatos: Individuos que han sobrevivido pocas semanas o meses al alumbramiento.

La elevada mortandad infantil se debía a una higiene y alimentación deficientes. La cuarta parte de los nacidos fallecía antes de cumplir un año, y otra cuarta parte antes de alcanzar los seis años, final de la etapa infantil I. Los estudios paleodemográficos revelan una selección de los individuos inhumados bajo pavimento. ¿Se debía a su estatus? ¿O a una combinación de estatus y primogenitura? ¿Eran individuos no admitidos en el seno del grupo social?

Los Rituales de Iniciación

El concepto del ajuar funerario sugiere un retraso en el reconocimiento de un neonato como miembro de un grupo social hasta que superara los riesgos de la mortandad infantil, como el problema de la dentición. Se han propuesto diversas explicaciones para este ritual:

  • Ritual de muerte y resurrección, como una ejemplificación del ciclo agrario.
  • El individuo perinatal como semilla de la futura fertilidad del grupo social.
  • Un ritual relacionado con el control demográfico.
  • Un ritual de purificación o refundación de las viviendas.

F. Gusi propone la tesis de sacrificios periódicos relacionados con la fertilidad de cosechas y ganado, así como con los problemas de la transmisión hereditaria del poder y el mantenimiento de la población.

Otra tesis es la fenicio-púnica, que relaciona estos enterramientos con el problema del tophet y el sacrificio de los primogénitos. Se plantea la asociación a las ofrendas fundacionales como una práctica sustitutoria. ¿Se trata de un ritual autóctono?

La teoría del origen indoeuropeo se basa en las comunidades del valle del Ebro y la Meseta, como el caso de Cortes de Navarra. Se menciona la teoría del sacrificio infantil y el Mlk de origen semita, más allá de los relatos de las fuentes clásicas.

La teoría del origen griego introduce el ritual de la Anfidromía, el concepto del oikos y el fuego doméstico como símbolo de la vida colectiva. Se destaca el culto a Hestia y la preservación de la unidad familiar. ¿Es una práctica de koiné mediterránea? Conocida en Grecia desde el Heládico Medio, está documentada en las colonias euboicas de Pithecusa (siglo VIII a.C.), en la cultura Lacial y en Roma (siglo VI a.C.).

El ritual de la Anfidromía consistía en el reconocimiento del neonato por parte del padre entre 5 y 7 días después del parto. Esto implicaba la integración del neonato en el grupo, la protección de la colectividad y la pérdida del derecho del padre a deshacerse del niño. El niño recibía su nombre y los primeros elementos de su ajuar personal.

En caso de falta de reconocimiento, se practicaba el ritual del Enchytrismos, que consistía en el abandono del recién nacido en el interior de un recipiente cerámico que le servía de futura mortaja junto a un camino. La exposición era permanente hasta que el niño era recogido o moría.

Ofrendas Fundacionales

Las ofrendas fundacionales eran una práctica propiciatoria de la riqueza de la estructura familiar o clánica que ocupaba una casa. Este ritual se aplicaba al conjunto de la estructura social de un oppidum. La ritualidad derivaba de la estructura ideológica de los sistemas sociales ibéricos, basada en una concepción ideológica de origen agrario. Representaba el ritual de muerte y resurrección.

La práctica se realizaba en el interior de recintos constructivos: bajo pavimento, junto a la base de los muros o bajo los cimientos. También era representativa de la estructura social, con ofrendas junto a las puertas del oppidum, en zonas de paso o acceso. El tipo de animal sacrificado podía representar la clase social o el grupo. Esto refuerza los conceptos de élite social y control de los ritos de cohesión social como forma de mantener el poder.

Se seleccionaban las partes óseas inhumadas: cabeza y extremidades. La deposición ritual de los huesos consistía en colocar el cráneo sobre las patas. Se sacrificaban individuos jóvenes. ¿Era un sacrificio conclusivo? ¿Se realizaba un reparto del resto del cuerpo de la víctima propiciatoria entre los oferentes y la divinidad? ¿Se consumía la víctima por el fuego? Se mencionan ejemplos del Antiguo Testamento.

Un ejemplo de la distribución de las ofrendas propiciatorias es la “Tarifa de Marsella” (siglo III a.C.).

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