Poetas del 27: Biografías, Obras y Estilos Literarios
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Poetas del 27: Un Recorrido por su Legado Literario
Jorge Guillén (1893-1984)
Nace en Valladolid. Estudia Filosofía y Letras en Madrid, donde contacta con otros poetas del 27. La marcha política de España lo lleva a la cárcel y, después, al exilio en EE. UU. De vuelta en nuestro país, se instala en Málaga y se le concede el Premio Cervantes en 1977.
Para Guillén, la poesía tiene un poder creador que no debe limitarse a la imitación de la realidad. Su poesía es entusiasta y vital, canta a lo cotidiano y lo estiliza: trata de lo real siendo irrealista, se sumerge en un mundo perfecto y ordenado, sobre todo con Cántico, su mejor obra. Persigue una obra orgánica y unitaria. Su poesía se recopila en Aire nuestro, un ciclo que abarca sus 5 mejores títulos.
Etapas de Jorge Guillén
- Cántico: Expresa entusiasmo ante la vida y un mundo bien hecho, es un canto a la vida y un sí al mundo. Se exalta el deseo de descubrir más cosas de la vida. Su concepción del amor no es de dolor por el sentimiento amoroso.
- Clamor: Su poesía da un importante giro temático y plasma el horrible mundo que él ve en su poesía, ve un mundo mal hecho. El tema de España, el exilio, la guerra, la dictadura, es bastante presente en todos sus poemas, pero él mantiene su fe en la vida y el hombre. Se queja de lo negativo, su poesía, dice el autor, que dejará de ser pura.
- Últimos libros: No aportan nada nuevo a su trayectoria. Homenaje trata experiencias y retratos de personajes de la historia a los que el autor les debe algo, como Fray Luis de León.
Guillén alienta a la poesía de nuestra época con el lema de Cántico a pesar de Clamor. Su estilo es de una exquisita depuración que se queda con la esencia. Su estilo depurado procede siempre a una selección léxica que prima el concepto sobre la forma y su difícil lectura.
Vicente Aleixandre (1898-1984)
Nace en Sevilla. Pasa su infancia en Málaga y se va a Madrid para estudiar, donde también va a la Residencia de Estudiantes. En 1925, contrae tuberculosis, que marcará su vida poética y visión del mundo. Su vivienda se transforma en un lugar de reunión. Premio Nacional de Literatura en 1933 y Premio Nobel en 1977.
Su poesía es una búsqueda constante de la naturaleza con la que entra a formar plena armonía.
Etapas de Vicente Aleixandre
- Primeras obras: Responden al surrealismo. Pasión de la tierra, Espadas como labios y La destrucción o el amor son las mejores obras del surrealismo español, en las que ya se deja ver el tema orgánico de la totalidad de su obra, la solidaridad amorosa del hombre con todo lo creado. Su poesía es un canto y un intento de integrar al hombre en el universo a la vez que el universo se tiene que integrar también en el hombre.
- Historia: Constituye a la naturaleza y se transformará en sus versos. Sombra del paraíso: el poeta participa en la poesía desgarrada de la primera posguerra española.
- Poesía de meditación: Se califica así la producción de Aleixandre en esta última etapa. El poeta está ya en la vejez e intenta explicarse a sí mismo volviendo a imágenes y símbolos de su primera etapa en libros como Consumación y Diálogos del conocimiento.
Federico García Lorca (1898-1936)
En Madrid, en la Residencia de Estudiantes, se instala y conoce a importantes figuras como Dalí y Prados. Comienza con teatro y poesía, y colabora en proyectos como los de la revista Gallo. Importante reorientación de su obra poética cuando viaja a EE. UU. Crea La Barraca, compone grandes obras dramáticas. Es detenido en Granada por Franco y asesinado en Víznar.
Su poesía y teatro se caracterizan por una dualidad que es síntoma del enfrentamiento entre la realidad que Lorca vive con cierta sensación de opresión y sus aspiraciones de realización personal.
Etapas de Federico García Lorca
- Influencia de la lírica tradicional: Libro de poemas, Canciones. En estos se ven temas como el amor, la naturaleza, la muerte, un Lorca más divulgado y nacional. Acercamiento de Lorca a la realidad andaluza, interpretada en clave lírica a través del cante jondo y del gitano como sus símbolos. Modifica su estilo hacia un tipo de poesía más próxima a los poetas puros como Guillén y Salinas.
- Surrealismo: Marca la producción poética lorquiana posterior a 1929, Poeta en Nueva York. El surrealismo proporciona una estética, pero también un enfrentamiento con el mundo. Estos libros responden a una crisis personal en la que confluyen razones artísticas y sentimentales, expresadas en casos con mucho intimismo. Destaca Llanto por la muerte de Ignacio Sánchez Mejías, gran obra de madurez expresiva. También escribe con la idea de la muerte Sonetos del amor oscuro, sobresaliente por la angustia y el desasosiego con que trata el tema del deseo homosexual.
Rafael Alberti (1902-1999)
Nace en el Puerto de Santa María. Se va a Madrid, donde se dedica a la pintura y luego a la poesía. Premio Nacional de Literatura con Marinero en tierra. Se afilia al Partido Comunista, se exilia en diversos países tras la derrota en la guerra. En 1983, recibe el Premio Cervantes.
Su poesía es variada temática y estilísticamente, sigue cinco referencias: neopopularismo, barroquismo gongorino, vanguardismo surrealista, compromiso político y tendencia nostálgica.
Etapas de Rafael Alberti
- Lírica popular y canciones tradicionales: Posición vanguardista de los cancioneros conciliando elementos cultos con populares. Marinero en tierra otorga al mar una categoría mítica que da sentido a la vida. En El alba del alhelí se observan ya rasgos barrocos.
- Barroquista y vanguardista: Se inicia con Cal y canto. Apunta al futuro y rinde homenaje a Góngora. También se presencia el surrealismo que se superpondrá al barroquismo de estos años, así se ve en Sobre los ángeles. Sermones y moradas sigue la línea surrealista.
- Poesía civil: Con El poeta en la calle, De un momento a otro y Entre el clavel y la espada se ve un giro en la poética de Alberti, es la llamada de la poesía civil, fruto de posiciones marxistas revolucionarias adoptadas por el poeta que se había afiliado al Partido Comunista. Siente la necesidad revolucionaria de enjuiciar su entorno.
- Exilio: Con la obra compuesta durante el exilio, Alberti retoma viejos motivos y vuelve al tradicionalismo, aunque sigue en su tónica de poesía social. Mucho dolor por estar lejos de su tierra. Vida lejana, entre otras, son las mejores composiciones de su destierro y las mejores de su producción.
Luis Cernuda (1902-1963)
Nace en Sevilla. Conoce a Aleixandre y otros poetas del 27 en Madrid, donde se ubica. Durante la guerra escribe a favor de la República. En 1952 es exiliado y se instala finalmente en México, donde muere. Poeta romántico, su ideal poético era unir poesía y vida dejando al desnudo su alma y cantando con profundidad y belleza su deseo amoroso homosexual. Su lírica carece de estridencias, ofrece serenas formas clasicistas heredadas de románticos alemanes.
Etapas de Luis Cernuda
- Ideal clásico: Se presenta con tonos románticos y un fondo de pureza poética aprendida de Juan Ramón y Guillén. Un río, un amor se ve una voz más personal y profunda. Primer paso hacia la poesía surrealista que fue medio de expresión y análisis de su yo conflictivo. La mejor muestra en Los placeres prohibidos, obra que expresa el deseo y la oposición entre realidad y deseo.
- Crisis personal: Su crisis personal lo lanza a la denuncia de los convencionalismos y la hipocresía burguesa, sentimiento de rebeldía. Donde habite el olvido e Invocaciones a las gracias del mundo son dos de sus mejores libros, con una sincera personalidad romántica que se expresa en temas del amor, la muerte como olvido y la búsqueda de refugio en la mitología.
- Exilio: En el exilio, Cernuda se deja ganar por el pesimismo que inunda su poesía con acento de desengaño vital y cierto humanitarismo. La muerte, la nostalgia de España, la pérdida de su juventud son los temas presentes en libros como Las nubes y Con las horas contadas.
Otros Autores de la Generación del 27
- Gerardo Diego: Poeta, crítico y teórico, experimenta casi todo. Sus mejores composiciones surgen del creacionismo, también cultivó la lírica tradicional influenciada por el Siglo de Oro.
- Emilio Prados: Malagueño, destaca por su brillantez y musicalidad. Los temas son la soledad, el amor y la muerte. A partir de los años 30, se une al surrealismo y a sus ideales revolucionarios. Su mejor obra es Jardín cerrado, un libro hermético de tonos místicos donde intenta hallar el poeta un punto de equilibrio frente a su desgarramiento.
- Manuel Altolaguirre: El más joven de la generación. Su nombre se asocia al de Prados, con quien fundó y publicó Litoral, la mejor y más influyente obra. Representa la tendencia al neorromanticismo, aunque con dosis de autenticidad.
- Juan Larrea: Obras en francés y, junto con Gerardo Diego, representa la vertiente más vanguardista de la generación. Sus poemas rompen con la puntuación y la tipografía.
El Teatro de Lorca
El deseo de Lorca de buscar desde los años 30 una literatura sincera encarnada en sus propios conflictos y problemas del hombre en general, encuentra respuesta idónea en el género dramático. En este teatro existen dos planos enfrentados: uno íntimo y subjetivo, libre y lírico, y otro exterior, represivo en su convencionalidad. Lorca plantea que la transgresión de las formas represivas es la única forma de liberación de una realidad convencional, la solución del conflicto es la ruptura de esas normas que implican muerte, soledad o frustración. Lorca da a luz una serie de piezas que, en algunos casos, adelantan las posibilidades futuras de sus grandes obras.
- Primer éxito dramático: Mariana Pineda presenta semejanzas evidentes con el teatro poético: verso, tratamiento romántico, tema histórico... Más logradas con La zapatera prodigiosa, donde hay un conflicto nacido de la oposición entre deseo y realidad.
- Obras surrealistas: En los años 30, Lorca compone sus obras surrealistas El público, cuyos símbolos e imágenes resultan extraños por la intimidad de la que surgieron. Así que pasen cinco años desarrolla el tema del paso del tiempo y de su desaprovechamiento por el ser humano.
- Trilogía dramática de la tierra española: Las mejores obras dramáticas constituyen lo que se podría llamar la trilogía dramática de la tierra española, donde desarrolla el tema de la oposición y el enfrentamiento entre deseo y libertad y fuerzas represivas. Bodas de sangre, más vitalista, es un vivido drama de instintos y deseos elementales, es la historia de un amor que acaba en tragedia a causa de su imposible realización en la Andalucía gitana. Yerma es una tragedia de amor frustrado, drama de la mujer infecunda. Su desarrollo casi monológico hace que casi todo el peso recaiga sobre la protagonista, los demás personajes actúan como un coro trágico. La casa de Bernarda Alba representa una forma casi social muy cercana a la producción con la sociedad real de la época. Esta obra presenta la historia de Bernarda que queda viuda por segunda vez y se enclaustra con sus cinco hijas para guardar un riguroso luto. Todo el libro se desarrolla en esa casa, un universo cerrado dominado por el silencio y el ocultamiento. El mundo exterior actúa como enlace a través de Poncia, la sirvienta de Bernarda.