El Pensamiento de Tomás de Aquino: Contexto, Metafísica, Teología, Antropología y Ética
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Filosofía y ética
Escrito el en español con un tamaño de 5,26 KB
Contexto Histórico-Cultural de Santo Tomás
La labor intelectual de Tomás de Aquino se desarrolla en el siglo XIII, durante la Baja Edad Media, un período caracterizado por la Orden Feudal y una sociedad estamental. Este contexto se ve marcado por:
- El auge de las ciudades gracias al desarrollo económico impulsado por avances tecnológicos como el molino de viento y agua.
- El surgimiento de una nueva clase social, la burguesía, que gradualmente adquiere mayor importancia.
- La independencia de la Iglesia del poder político del Sacro Imperio Romano-Germánico, consolidándose como un poder autónomo.
- La construcción de catedrales, símbolos del arte urbano y gótico, reflejando la importancia de la ciudad y la burguesía.
- La aparición de la perspectiva en la escultura y la pintura.
- La universidad como centro cultural de la sociedad, donde se desarrolla la filosofía Escolástica, cuyo máximo representante es Santo Tomás.
La Escolástica busca armonizar la razón y la fe a través del análisis de textos religiosos y filosóficos, adoptando la interpretación aristotélica transmitida por Averroes. Esta corriente domina el panorama intelectual de la Baja Edad Media hasta su crisis con la llegada del Nominalismo de Ockham y la filosofía moderna.
Metafísica Tomista
Santo Tomás adopta de Aristóteles varias teorías sobre la concepción de la realidad, pero afirma que Dios es el creador universal y un ser necesario, en contraste con los seres creados, que son contingentes. En estos últimos, existe una distinción entre esencia y existencia, ya que su esencia no implica su existencia en Dios. La esencia es potencia de ser, y la existencia es acto de ser. Además, establece una organización jerárquica de los seres, según su grado de perfección, siendo los más perfectos aquellos que más se asemejan a Dios.
Demostración de la Existencia de Dios
Una de las tareas fundamentales de la razón es demostrar la existencia de Dios. Tomás de Aquino critica el Argumento Ontológico de San Anselmo, argumentando que la existencia de Dios no es evidente para nosotros debido a las limitaciones de nuestra razón y a la incognoscibilidad de la esencia divina. Distingue dos tipos de demostración:
- A priori: conociendo la causa, se infiere el efecto.
- A posteriori: dado el efecto, se demuestra la causa.
Tomás afirma que solo se puede demostrar la existencia de Dios a posteriori, partiendo del efecto (la creación) para llegar a su causa (Dios).
Las Cinco Vías
Tomás propone cinco vías para demostrar la existencia de Dios:
- Primera vía: El movimiento de los seres implica la existencia de un Primer Motor Inmóvil, que es Dios.
- Segunda vía: La existencia de causas causadas lleva a la existencia de una Causa Incausada, que es Dios.
- Tercera vía: La existencia de seres contingentes implica la existencia de un Ser Necesario, que es Dios.
- Cuarta vía: Los grados de perfección en los seres apuntan a un Ser Perfectísimo, que es Dios.
- Quinta vía: El comportamiento ordenado de los seres sugiere la existencia de una Inteligencia Ordenadora, que es Dios.
Esta ordenación se realiza mediante la imposición de la ley eterna, que regula tanto a los seres irracionales a través de la ley física como a los hombres a través de la ley natural, una ley moral que posibilita su libertad.
Fe y Razón
Santo Tomás distingue dos fuentes de conocimiento: fe y razón. La razón humana conoce de forma imperfecta la esencia de Dios y tiene límites que solo pueden ser ampliados por la fe. Fe y razón poseen contenidos propios y específicos, pero también comparten algunos; son autónomas e independientes, y no se contradicen. El entendimiento agente abstrae las características comunes, generando el concepto universal, mientras que el entendimiento posible aplica estos conceptos a lo concreto para formular juicios.
Antropología Tomista
En cuanto a la antropología, Santo Tomás afirma que el entendimiento es la facultad principal del alma humana. El hombre es una unión sustancial de cuerpo y alma, esta última con tres facultades: vegetativa, sensitiva y racional.
Ética y Ley Natural
Tomás defiende una visión teleológica de la vida humana, donde la felicidad se alcanza mediante el desarrollo perfecto del alma. Afirma la existencia de la ley natural, que se basa en un precepto fundamental: el deber de desarrollar la esencia humana, realizando el bien y evitando el mal. De este principio se derivan tres preceptos primarios:
- Deber de conservar la vida.
- Deber de procrear y educar a los hijos.
- Deber de respetar la justicia y buscar la verdad.
El contenido de la ley natural es evidente, universal e inmutable.
El Hombre como Ser Social y la Ley Positiva
Para Tomás, el hombre es un ser social por naturaleza. Los preceptos de la ley natural deben ser concretados a través de la ley positiva. Las mejores formas de gobierno son la monarquía, la aristocracia y la democracia.