Pautas educativas y estilos de crianza

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Pautas educativas

Difieren de unas familias a otras, con puntos comunes: el grado de control ejercido sobre el comportamiento de los hijos.

Firmeza y razonamiento

Se establece como la mejor combinación para que el niño alcance el autocontrol. Es necesario establecer normas claras, explícitas y límites. Que la disciplina esté basada en explicaciones, aprobación y desaprobación.

Control con comunicación

Mostrar interés por el mundo de los hijos y compartir el suyo. En éste se acepta las fases de incomunicación y hostilidad durante el desarrollo de los niños.

Control con afecto

Manifestando afecto y cariño que se va adaptando a lo largo del desarrollo.

Estilos educativos: en base a la maduración, comunicación y afecto

  • Autoritarios: ejercen gran control sobre la conducta de los niños. Alta exigencia de madurez, poca comunicación y ausencia de afecto y emociones. Fomenta la baja autoestima, dependencia, tristeza e infelicidad.
  • Permisivos: Ejercen poco control, poca exigencia de madurez en un ambiente comunicativo, con elevadas manifestaciones de cariño. Fomenta la baja autoestima, poco autocontrol tristeza e inmadurez.
  • Democráticos: Será el más beneficioso para el desarrollo del niño. Elevado control, exigencia de madurez en un ambiente comunicativo y afectuoso. Fomenta la autoestima y autorregulación responsable.
  • Establecer relaciones afectivas y vinculantes con los hijos, ponerles retos, establecer normas estables y flexibles desarrollan y fomentan la ZDP del niño y ayudan a recorrerla.
  • El estilo democrático fomenta el bienestar en el niño al crear un equilibrio entre el control y la autonomía. A través de los intercambios comunicativos, se promueve el desarrollo intelectual, con calidez y afecto, que facilita la socialización.
  • Recordad: la relación entre familia y escuela: ambos contextos comparten funciones educativas y deben enfatizar los puntos en común, no delegando la responsabilidad a uno de los contextos. Para ello, es necesario conocimiento mutuo y respeto entre familia y escuela, así como la acción educativa debe ser compartida.

La televisión como medio

El lenguaje y contenido de la TV presentan riesgos potenciales, por lo que hay que facilitar las herramientas a los alumnos para hacer un buen uso de los contenidos audiovisuales.

La televisión permite desarrollar capacidades intelectuales diferentes y complementarias a la lectura y escritura.

Peculiaridades de la televisión que tienen efectos educativos:

Aportaciones negativas del uso de la TV en el aula: el carácter unidireccional, la hegemonía de la imagen, la sumisión de la producción a los criterios de la audiencia o de los medios, la credibilidad y confusión entre realidad y ficción. Es necesario entender el código. Puede perpetuar estereotipos, prejuicios y discriminación. Por su inmediatez, puede impedir la reflexión.

Aportaciones positivas del uso de la TV en el aula: Para que haya un uso positivo hay que facilitar las herramientas para que se pueda hacer un uso crítico de la televisión. Una de las mayores ventajas es que la TV forma parte de su vida. A nivel cognitivo implica un procesamiento visual más que verbal, lo que requiere menos esfuerzo intelectual. Pueden aprender el funcionamiento y conocimiento social. Se reflejan también las emociones, pudiendo aprender cuándo, cómo y por qué se emocionan las personas. Quedan también reflejados hábitos de alimentación, ocio, salud… Fomenta la concreción frente a a la abstracción, es más inmediato.

De aquí surge la necesidad de ser usuarios activos de la televisión, seleccionar, procesar y valorar lo que se emite. Los contenidos de la televisión, recordad, no son un reflejo de la realidad, sino una interpretación de la misma.

  • Por eso existen diferencias entre cadenas y programas.
  • Existen restricciones y normativas de restricción para la infancia.
  • La TV tiene un trasfondo económico.
  • Hay una tendencia a reproducir de forma sobredimensionada estereotipos, roles sexuales, sexismo, racismo, fomenta el consumismo…

Los niños y jóvenes aprendices se benefician de la televisión si un tercero con más experiencia les guía, les ayuda con sus comentarios y experiencia a distinguir e interpretar los que ven, a realizar juicios.

  • Es necesario formar telespectadores críticos y activos.
  • Es necesario el acompañamiento de los adultos para ayudarles a comprender y valorar lo que ven.
  • Los padres deben ayudar a los hijos a seleccionar los programas.
  • Establecer horarios y valores.
  • Ayudarles a distinguir realidad/ficción, persuasión/información.
  • Ayudarles a valorar lo que se emite y elegir una programación coherente con principios y valores adecuados.
  • Dar alternativas a la televisión: leer, caminar, jugar.

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