El nihilismo y la transmutacion de los valores

El Nihilismo

El Nihilismo es el síntoma de esta decadencia. Se puede decir que es la toma de conciencia de que los valores europeos ya no se sostengan por sí mismos. La cultura occidental ya no puede sostenerse porque el hombre europeo se ha dado cuenta de que su civilización se apoyaba en valores vacíos. Este nihilismo tiene un lado positivo y para superar esta situación se debe tomar conciencia de la misma. La muerte de Dios expresa el máximo momento del nihilismo. Con Dios nada tiene sentido por sí mismo porque es él quien da sentido al universo.Dios es la explicación de Verdad, belleza y el Bien.

Superhombre

Para abandonar el nihilismo, el hombre debe llevar a cabo una transmutación de los valores; volver a considerar que la vida es el valor supremo. Así, la ontología de Nietzsche sustituye al inmovilismo del mundo de las Ideas por un devenir que sitúa el azar como causa de todas las cosas. Ahora el hombre fuerte, valiente es el generador de los valores. Quienes consigan estos conceptos formarán parte de una nueva clase de hombres: los superhombres.

Eterno Retorno

Tras estas críticas,Nietzsche nos conduce a una nueva metafísica, el eterno retorno que plantea una ley cosmológica y una ley moral. Todo lo que hay expresa una determinada voluntad de estar, de querer, de triunfar. La voluntad de poder se vincula con la aceptación de lo vital y lo material como lo único que existe.

En cuanto ley moral, el eterno retorno es la máxima expresión de una moral vitalista. Así la voluntad de poder y el eterno retorno se complementan: la primera es el motor que mueve el universo y la segunda expresa la radicalidad de esa fuerza, lo que es, quiere ser infinitas veces.