Morfologías, acción geológica de los ríos, acción geológica del mar, acción del viento y desiertos

MORFOLOGÍAS:

G. Rocosos:

Son acumulaciones de derrubios con un núcleo de hielo. Muestran arcos y lóbulos en la superficie.

Suelos ordenados:

Acumulaciones de materiales segregados que generan figuras geométricas.

Canchales:

Grandes acumulaciones de cantos rotos por crioclastia y caídos por gravedad desde escarpes rocosos.

Lóbulos:

Morfologías relacionadas con procesos de gelisolifluxion. Se trata del flujo de la parte superior del suelo impulsado por ciclos de hielo/deshielo del agua que ocupa sus poros.

Morrenas de nevero:

Son cordones de sedimentos depositados a los pies de neveros permanentes. Los gelifractos resbalan por el nevero y se acumulan al final.

ACCIÓN GEOLÓGICA DE LOS RÍOS:

Los ríos son cauces estables con un flujo perenne de agua. El caudal no tiene por qué ser constante. Las crecidas son episodios temporales de caudales elevados, y los estiajes, periodos anormalmente bajos.

Cuenca de drenaje:

Superficie de territorio que aporta agua al caudal de un río, separada de las cuencas vecinas por divisorias.

Perfil longitudinal:

Es el corte transversal desde su nacimiento hasta su desembocadura, que a lo largo de su trayecto, va perdiendo pendiente y aumentando el caudal progresivamente.

Nivel base:

Es la cota más baja a la que su cauce puede llegar; nivel absoluto, el mar.

ACCIÓN GEOLÓGICA DEL MAR:

En la franja costera es donde estos procesos afectan a los sedimentos que llegan y a los generados por erosión en la propia cuenca.

Oleaje:

Origen debido al viento, aunque también las hay de origen tectónico (Tsunami). Tiene lugar cuando el fondo del mar está a una profundidad menor que la longitud de onda de las olas, este interfiere en su avance y lo frena desde la base.

Mareas:

Son oscilaciones periódicas del nivel del mar que se deben a la interacción gravitatoria entre el sol, la luna y la tierra. El ascenso (Pleamar) y descenso (bajamar). Las mareas impulsan el oleaje, acrecentando su labor morfogenética. Estos movimientos definen la franja intermareal.

Corrientes litorales:

Las mareas y el oleaje generan corrientes sobre la costa: DE DERIVA: Resultan de la llegada ligeramente oblicua del oleaje y regreso del agua perpendicular a la costa. DE RESACA: Otra forma de regreso del agua, como un flujo concentrado interfiriendo con las olas que llegan a la orilla.

ACCIÓN DEL VIENTO:

El viento está causado por las diferencias de presión atmosférica y se encuentra en cualquier punto de la superficie terrestre, aunque está limitado a ambientes muy concretos. Esta acción será más eficaz sobre materiales de granulometría fina, poco cohesionados y en ausencia de vegetación y humedad.

Deflación:

Consiste en el arranque de partículas de una superficie rocosa.

Corrasión:

Es el efecto de pulido que producen los granos de arena transportados por el viento al impactar contra superficies de roca. Las morfologías más características son los ventifactos (cantos con sus caras pulidas), alvéolos y rocas fungiformes.

DESIERTOS:

Son zonas semi e hiperáridas, donde el paisaje se condiciona por los procesos eólicos y tiene condiciones de aridez extremas debido a:

La circulación general atmosférica:

La mayoría se sitúan en los cinturones tropicales y subtropicales, donde predominan las presiones elevadas (Sahara).

Las corrientes oceánicas frías:

Estas corrientes inhiben la evaporación y hacen que la costa que baña sea muy seca (Corriente de Humboldt).

La continentalidad:

La lejanía a la costa hace complicado que lleguen frentes húmedos (Gobi).

Las sombras pluviométricas:

Tienen lugar cuando una cordillera ejerce de barrera a las precipitaciones. Por la vertiente opuesta desciende aire cálido y seco (Atacama).

TIPOS: Hamadas:

Desiertos rocosos en los que la deflación modela el relieve (Plateau de Ksar).

Reg:

Desiertos pedregosos formados por cantos de diferentes tamaños donde predominan los gruesos (Desiertos entre Siria y Jordania).

Erg:

Desiertos de arena con extensas acumulaciones dunares (Sáhara).

Desiertos de montaña:

Relieves escarpados sin vegetación ni suelos (Hoggar).