La Medición del Tiempo en la Historia
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El Tiempo Cronológico
El tiempo cronológico es previo y soporte necesario para cualquier construcción del tiempo social y humano. Ignorarlo es condenarse a confundirlo todo y no comprender nada.
Para entender la historia es necesario tener un pensamiento cronológico. No basta con descubrir el pasado, también hay que saber estructurarlo y darle un sentido.
Este tiempo nace del tiempo histórico. Ayuda a los historiadores e historiadoras a entender los distintos tiempos propios de la historia.
Nos permite ordenar hechos históricos en el tiempo.
Origen y Evolución de los Calendarios
La necesidad de medir el tiempo surgió ya en la prehistoria. El hombre primitivo se regía por los movimientos de la luna. Los antiguos babilonios siguieron con el calendario lunar.
Los egipcios descubrieron que había un calendario solar. Esto se debe a que el cauce del río Nilo era su estilo de vida. Tenían tres estaciones: inundación, crecimiento y recolección. Bastaron pocos años para darse cuenta de que el calendario lunar no era exacto. Es por ello que crearon un calendario solar de 12 meses, de 30 días cada uno. Este calendario se cumplía siempre y cuando se añadieran 5 días más. Este calendario fue muy útil, Julio César lo empleaba y aguantó toda la Edad Media.
Los sumerios y sus sucesores estaban muy arraigados a la luna. Por ello decidieron crear un calendario donde se unieran el lunar y el solar. Esto conllevó muchos cálculos durante muchos años. De estos cálculos surgió el sistema sexagesimal actual y algunas nociones de álgebra.
Evolución hacia el Calendario Actual
Las primeras medidas que afectaron por primera vez a Occidente provienen de la Antigüedad Clásica, y concretamente de los movimientos de la luna y el sol. No fue hasta 1582 con la reforma del Papa Gregorio XIII que los calendarios lunar y solar cuadraban. Es por ello que nuestro sistema cronológico actual proviene de dos calendarios diferentes. Tenemos fiestas fijas (Navidad, 25 de diciembre) que son solares y fiestas variables (Semana Santa, que varía cada año) que son lunares. La idea de mes nace de la observación de los movimientos de la luna (29 días y medio). Los hebreos y griegos utilizaban un calendario lunar formado por 12 meses y 29 y 30 días alternos, que sumaban 354 días). No fue hasta la reforma gregoriana de 1582 que los calendarios lunar y solar cuadraran. La idea de semana se debe a muchas cosas. Una de ellas es que para los hebreos el número siete era sagrado y para los cristianos Dios creó el mundo en seis días y el séptimo descansó. Estas son algunas de las causas por las que la semana es así. La hora, minutos y segundos son una invención más moderna. Provienen de Egipto. Para ellos, el reloj más exacto era el Nilo.
Eras y Periodización Histórica
La fijación de los hechos históricos en un punto cero hace que los pueblos y civilizaciones tengan que adaptar su tiempo según los cómputos cronológicos. Estos cómputos se llaman eras, y son momentos importantes para las diferentes civilizaciones. Las más importantes son:
Era judía: 3760 a.C. Era de las Olimpiadas: 776 a.C. Era de Roma: 753 a.C. Era Hispánica: 38 a.C. Era Cristiana: 1 d.C. Era Islámica: 622 d.C.La periodización histórica se encarga de dividir el tiempo y ayuda a entender mejor la historia. Encontramos unos periodos de la historia que son:
Prehistoria Edad Antigua Edad Media Edad Moderna Edad Contemporánea