Litiiasis renal: formación de cálculos en el riñón y sus causas

La litiiasis renal, también conocida como nefrolitiasis o urolitiasis, se refiere a la formación de cálculos en el riñón. Estos cálculos se forman debido a una sobre saturación de minerales en la orina, que pueden provenir del agua o de los alimentos en conserva.

Los cálculos viajan a través de la arteria eferente y llegan al glomérulo, donde se filtran los residuos metabólicos y los nutrientes de pequeño tamaño. Sin embargo, debido a la sobre saturación, estos minerales se presentan en grandes cantidades y comienzan a cristalizarse, formando los cálculos.

Proceso de formación de los cálculos:

1. Nucleación: formación de núcleos de cristales homogéneos y heterogéneos debido a la sobresaturación.
2. Crecimiento: los cristales crecen.
3. Agregación: más moléculas se agregan al cristal.

Los cálculos pueden formarse tanto en los túbulos como en el glomérulo. Una vez formados, viajan y se eliminan en el túbulo colector, terminando en la papila renal donde hay una mayor concentración de cristales.

Existen diferentes tipos de cálculos renales, como los de calcio, ácido úrico y cistina. Su formación se debe a la sobresaturación de minerales y a una disminución de los inhibidores de formación de cálculos, siendo el citrato uno de los más importantes.

Parkinson: una alteración cerebral que afecta los movimientos

El Parkinson es una enfermedad que afecta a los ganglios basales, específicamente a la sustancia negra que contiene neuronas dopaminérgicas. Estas neuronas secretan dopamina, que permite controlar los movimientos a través de la vía piramidal.

En el Parkinson, las neuronas dopaminérgicas están afectadas, lo que provoca la falta de control en los movimientos. Los signos característicos incluyen temblor en reposo, alteración postural, base de sustentación reducida, falta de control en la velocidad de la marcha, rigidez en los músculos faciales y extremidades, bradicinesia y disminución de dopamina.

Alzheimer: una enfermedad degenerativa que afecta la memoria

El Alzheimer es una enfermedad degenerativa progresiva que afecta a las neuronas y se caracteriza por el deterioro del ánimo y la conducta. Se ve afectado el lóbulo frontal, lo que provoca desorientación y pérdida de memoria, tanto anterógrada como retrograda.

Las principales causas del Alzheimer incluyen haber sufrido un accidente cerebrovascular, cuerpos de Lewis, consumo de drogas, placa amiloide y ovillos neurofibrilares. Estos últimos son proteínas tau que se acumulan dentro de las neuronas, provocando una disminución de los niveles de acetilcolina y la pérdida de la sinapsis entre las neuronas.

Esclerosis múltiple: una enfermedad autoinmune que afecta la mielina

La esclerosis múltiple es una enfermedad autoinmune que afecta la vaina de mielina. Comienza en los linfocitos T CD4, TH1 y TH17, que reaccionan contra los antígenos de la propia mielina, provocando una autoinflamación y generando brotes.

Estos brotes causan una desmielinización debido a la activación de leucocitos y su producto lesivo. El diagnóstico se realiza aproximadamente dos años después de los primeros síntomas, que pueden incluir diarrea y cambios en el hábito intestinal.

Diarrea: tipos y clasificación

La diarrea puede ser aguda o crónica, dependiendo de su duración. La diarrea aguda dura menos de dos semanas y suele ser causada por infecciones, mientras que la diarrea crónica dura más de cuatro semanas y puede tener diversas causas.

Diarrea osmótica:

Este tipo de diarrea se caracteriza por deposiciones acuosas con un volumen menor a 1 litro. Se produce debido a la presencia de sustancias osmóticas no absorbidas en el intestino grueso, lo que altera la gradiente y provoca la salida de agua al lumen intestinal. Esto diluye los electrolitos, como el sodio y el potasio, y provoca una diarrea acuosa y ácida.

Diarrea secretora:

En la diarrea secretora, las heces son abundantes y tienen un volumen mayor a 1 litro. No ceden con el ayuno y se deben a un aumento en la secreción de electrolitos por parte del enterocito, que regula los canales de cloro y provoca una secreción de agua hacia el lumen intestinal. Esto inhibe la absorción y provoca una diarrea acuosa y abundante.

Diarrea inflamatoria:

La diarrea inflamatoria se caracteriza por la presencia de pus, moco o sangre en las deposiciones. Se produce debido a un daño en el enterocito por factores infecciosos, lo que provoca una inflamación y la secreción de citoquinas. Esto genera un exudado rico en proteínas, sangre, moco y pus, que se liberan en el lumen intestinal y provoca una diarrea con estas características.