Influencia del Arte Tribal en la Escultura Moderna
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Introducción
El arte tribal, a través de museos etnográficos y antropológicos, se presenta como una nueva influencia en el arte moderno. Artistas como Gauguin, Matisse, Picasso, Derain y Kirchner, entre otros, encontraron en la estética tribal una fuente de inspiración, transformando la escultura y la pintura con una nueva sensibilidad.
André Derain
Hombre en cuclillas (1907)
Escultura en arenisca de 33 cm de altura. Inspirada en la meditación precolombina, presenta una composición cúbica y compacta, casi un cubo en relieve. La cabeza, completa y compacta, contrasta con la ausencia de pies, creando una sensación de cerrazón y hermetismo. Derain, influenciado por el dios azteca Xochipilli-Coaticue (1906, British Museum), presenta una escultura en su estado elemental: un cubo en relieve, esquemático y básico.
Pablo Picasso
Figura femenina (1907)
Escultura en madera de pino policromada de 81 cm de altura. Con reminiscencias de tótems africanos, la figura presenta un tronco alargado, muslos abultados y una cabeza alargada. La obra, inacabada, estaba destinada a sostener una copa. El tratamiento tosco y áspero de la gubia reproduce la estética primitiva. Esta escultura de proceso revela la metodología empleada en su desarrollo, mostrando un absoluto respeto por los materiales. El concepto totémico y la desproporción de las partes evidencian la transformación de Picasso en un artista tribal. Esta obra, perteneciente a su etapa negra, se considera una escultura piloto, con una función sustentante que recuerda a las cariátides.
Ernst Ludwig Kirchner
Mujer bailando (1908)
Escultura policromada en amarillo y negro brillante de 12,87 cm de altura. Inspirada en la danza hindú, la obra incorpora elementos de otras culturas, mostrando la sensibilidad prehistórica por la fecundidad, con senos abultados. Kirchner muestra su gusto por lo oriental y exótico, la filosofía Zen y taoísta, representando una ancestral liturgia de la fecundidad. El tratamiento rígido de la composición y el devastado de la madera son característicos de su estilo. Al igual que Picasso y Derain, Kirchner se ve influenciado por la estética y producción escultórica de Gauguin. Esta escultura de tamaño académico, con carácter oriental, refleja el gusto burgués por lo ornamental y decorativo, hibridando las distintas influencias que llegaban a Europa, con París como epicentro de la creación escultórica.
Karl Schmidt-Rottluf
Cabeza azul y roja (1917)
Dentro del expresionismo alemán, Schmidt-Rottluf reproduce la estética tribal. La policromía, característica del expresionismo alemán, carga la obra de elementos comunicativos y expresivos. Con reminiscencias de máscaras africanas, la obra estiliza la fisonomía del rostro, con boca circular y mejillas alargadas, mostrando las marcas de la gubia. Esta talla, en etapa de esbozo pero acabada, resulta efectista. El expresionismo, considerado por los nazis como arte degenerado, desapareció durante ese período. La influencia de lo primitivo es evidente en esta obra.
Jacob Epstein
Rock Drill (1913)
Escultura en bronce de 70,5 cm de altura. Con proporciones académicas, la obra hibrida la Revolución Industrial inglesa con el lenguaje de la escultura primitiva tribal. Epstein se sensibiliza con la revolución industrial, utilizando el bronce, material propio de la tradición escultórica inglesa del siglo XIX.
Henri Gaudier-Brzeska
Retrato de Ezra Pound (1914)
Escultura en mármol de 91 x 61 cm, por dos metros de altura. El mármol, sin pulir, conserva su poro. Brzeska interpreta el gusto británico por los moáis de la Isla de Pascua, combinándolo con el gusto por lo primitivo y arcaico. Influenciado por la estética cubista, Brzeska ofrece una visión ecléctica, envejeciendo el mármol para darle un aspecto arcaico.