Historiografía Romana: Autores y Características de Tito Livio

HISTORIOGRAFÍA:

La historiografía romana nace en el último tercio del siglo III a. C. Pero las obras anteriores a la obra “La Guerra de las Galias” de César (100 – 44 a. C.) han desaparecido. Sin embargo, se dice que Cicerón, teniéndola a mano, consideraba que esta parte que desapareció no merecía la menor estima.

Autores

• ÉPOCA REPUBLICANA:

-Analistas: Autores que redactaban los acontecimientos históricos año por año.

-Historiadores:

ØJulio César

ØSalustio

ØCornelio Nepote

ØTito Livio

• ÉPOCA IMPERIAL:

-Historiadores:

ØVeleyo Patérculo

ØValerio Máximo

ØPublio Cornelio Tácito

ØSuetonio

ØAmiano Marcelino

TITO LIVIO: (59 a. C. – 17 d. C.)

Nació y murió en Padua. Era de familia acomodada y burguesa, amante de las tradiciones y de la paz. Marchó a Roma para dedicarse a escribir la inmensa historia de Roma que había concebido. Rehuyó los cargos públicos por su vocación de historiador, a la que entregó 50 años de su vida.

Su historia de Roma, tal como la dejó el autor al morir, constaba de 142 libros divididos en décadas (grupos de 10) y abarcaba desde los orígenes de Roma (de ahí su título “Ab urbe condita libri”) hasta la muerte de Druso (9 a. C.). Sólo se han conservado los libros 1-10 y 21-45, con algunas lagunas; es decir, las décadas 1ª, 3ª, 4ª y mitad de la 5ª.

De los libros no conservados tenemos noticia en los “Periochae”, resúmenes esquemáticos de cada uno. Dada la enorme extensión de la obra, pronto comenzaron a hacerse, para uso escolar y de divulgación, compendios y epítomes que sustituyeron a la obra original, difícil de adquirir y de manejar y, por ello, destinada a perderse en la Edad Media.

Livio se encontró con una serie de dificultades para componer su obra:

-La falta de información, especialmente en lo referente a la época primitiva (hasta la instauración de la República se cree que la historia de Roma pertenece más a la leyenda que a la realidad).

-La imposibilidad de acceder a los archivos públicos y privados.

-La falta de formación política de tipo práctico (nunca había desempeñado cargos públicos).

Tito Livio presenta una característica propia: la exaltación de Roma por encima de todo. Las virtudes que quiere que su obra infunda en sus conciudadanos son el amor a la patria, el respeto al “mos maiorum”, la concordia civil y la religiosidad profunda; todo lo cual coincide con el programa de Augusto, que Tito Livio comparte con entusiasmo.

T. livio ha trazado laa imagen del romani ideal: heroico, trabajador, constante, amante de la tradición, respetuoso con sus dioses. El “fatum”, el destino, cuyos hilos parecen mover los dioses, se utiliza a veces para explicar determinados acontecimientos. La historia de Livio es nacionalista; el protagonista es el pueblo romano que ha salidoflote de una y mil miserias, que acab de poner en pie un imperio.

Admirador de los oradores Demóstenes y Cicerón, los postulados teóricos de la retórica salpican su estilo literario, que no es homogéneo, algo comprensible en una obra tan extensa. En sus comienzos resulta claro, directo y atractivo; es el Livio de los cinco primeros libros. En un segundo momento (hasta la década 4ª) Livio resulta ciceroniano: períodos simétricos, exquisitez sintáctica… A partir de la 4ª década, Livio deriva hacia los excesos del asianismo; se hace árido y barroco. Es ordenado y resulta genial a la hora de elaborar retratos, intercalar discursos y describir escenas colectivas y movimientos y espectáculos de masas.

T. Livio utiliza como fuente a los “analistas” y para la Segunda Guerra Púnica y años posteriores también a Polibio. Pero no somete a crítica los datos y fuentes consultados, por lo que su fiabilidad es a menudo escasa.

En Livio se encuentran semejanzas con el historiador griego Heródoto. Para ambos los dioses están siempre presentes en la evolución histórica. Livio permanece fiel a la religión romana tradicionalfrente a la ola en ascenso de las religiones greco-orientales.

Cree, como Cicerón, que la historia es “magistra vitae”, que de ella se pueden sacar enseñanzas de la máxima utilidad.