Guerra Civil Española: Política, Internacionalización y Consecuencias

La Guerra Civil Española: Dimensiones Políticas

Evolución Política en la España Republicana

1.1 Desarticulación del Estado y Revolución Social (Julio-Septiembre 1936)
La sublevación militar evidenció las tensiones en el Frente Popular. El gobierno de Casares Quiroga se negó a armar a la población, pero José Giral sí lo hizo. Esto provocó el desplome del Estado republicano y el caos, con colectivizaciones agrarias e industriales por parte de la UGT y la CNT, y la represión de simpatizantes de la rebelión.

1.2 El Gobierno de Largo Caballero (Septiembre 1936 - Mayo 1937)
El objetivo fue restablecer la autoridad del Estado, disolviendo consejos y comités. Se aprobó el Estatuto de Autonomía del País Vasco. Los sucesos de Barcelona en mayo de 1937, enfrentamientos entre comunistas y anarquistas, forzaron la dimisión de Largo Caballero.

1.3 El Gobierno de Negrín (Mayo 1937 - Marzo 1939)
Negrín buscó acabar con el caos revolucionario. En 1938, el aislamiento internacional y el agotamiento económico generaron dos posturas: la resistencia a ultranza de Negrín y la negociación de la paz por parte de anarquistas, socialistas y republicanos. La caída de Barcelona en 1939 llevó al exilio y al fin de la guerra.

Evolución Política en la España Nacional

1.1 La Junta de Defensa Nacional (Julio-Septiembre 1936)
Establecida en Burgos, su misión era gobernar los territorios sublevados. Se prohibieron sindicatos y partidos, se censuró la prensa y se reprimió brutalmente. Franco fue nombrado Generalísimo y jefe del gobierno en 1936.

1.2 El Primer Gobierno de Burgos y el Nuevo Estado Totalitario (1938)
El régimen se definió como nacionalsindicalista, de inspiración fascista y católica. Se anuló la legislación republicana y se reprimió sistemáticamente a los simpatizantes de la República.

Internacionalización del Conflicto

Francia y Gran Bretaña crearon el Comité de No Intervención, que fracasó. Alemania, Italia y Portugal apoyaron a los sublevados. La Unión Soviética y México apoyaron a la República. El Papa Pío XI reconoció el régimen de Franco en 1937.

Consecuencias de la Guerra

El país quedó devastado, con infraestructuras destruidas. Hubo hambre, miseria y racionamiento durante más de una década. Se estima que hubo más de 300,000 muertos y muchos exiliados.