filosofia

Enviado por Chuletator online y clasificado en Religión

Escrito el en español con un tamaño de 4,29 KB

Agustín de Hipona: Durante la Edad Media se comenzaron a establecer los principios básicos del pensamiento y de la cultura de la Europa occidental. En este periodo se produjo el encuentro entre el pensamiento pagano y el cristianismo, que era la religión dominante. Los primeros teólogos cristianos, conocidos como Padres de la Iglesia, defendieron sus creencias desde un punto de vista legal frente a los gobernantes del Imperio romano, para que fuera reconocida su religión, y también desde el aspecto teológico contra las nuevas interpretaciones que surgieron en su seno, consideradas heréticas. Aunque en un principio hubo algunos Padres de la Iglesia católica que rechazaron y expusieron su hostilidad hacia las doctrinas paganas, posteriormente percibieron que podía ser una herramienta útil tanto para los debates y polémicas con otras corrientes filosóficas como para aclarar el dogma cristiano. La filosofía platónica fue una influencia clave del agustinismo. A través de la reinterpretación de Platón, san
Agustín contribuyó al descubrimiento de la interioridad, concepto que será fundamental en la filosofía moderna.
A partir del Siglo XIII se impuso el recién descubierto Aristóteles, comentado y transmitido a través de filósofos árabes y judíos. El aristotelismo ofrecíó una nueva cosmovisión que sirvió a santo Tomás para cimentar la argumentación filosófico-teológica sobre la existencia de Dios. En el Siglo XIV, Guillermo de Ockham se cuestiónó la naturaleza de los conceptos o las ideas abstractas originando una polémica que se mantuvo hasta los albores de la modernidad. Agustín de Hipona fue el principal representante de la patrística y cristianizó la filosofía de Platón. Nacíó en Tagaste, en el norte de África. Su padre era pagano y su madre, Santa Mónica, una ferviente cristiana. Tras ser bautizado por el obispo Ambrosio, regresó a Tagaste y fundó una comunidad monástica. Sucedíó al obispo de Hipona y se consagró totalmente a la Iglesia. Murió durante el asedio de los vándalos a la ciudad. Sus escritos tratan de teología, exégesis bíblica, polémicas contra cristianos y paganos apologías del cristianismo. Destacan Contra académicos, La ciudad de Dios y las Confesiones.  Agustín de Hipona vivíó una época de rápidos y dramáticos cambios en la que fue testigo de la decadencia del Imperio romano. Era inevitable el diálogo y la polémica entre la fe bíblica cristiana, con sus múltiples interpretaciones, y la tradición filosófica, especialmente el pensamiento platónico. Supo armonizar el pensamiento griego y el cristianismo, iniciando la filosofía cristiana medieval que tanta influencia tuvo en la fundación de la mentalidad predominante en el pensamiento europeo. San Agustín se plantea cómo puede el ser humano alcanzar las verdades más elevadas y profundas. Por un lado, por medio de la gracia divina, poseemos la fe para creer en Dios, pero también la razón nos permite el acceso a las verdades ultimas. Agustín comienza la búsqueda de la verdad en la filosofía platónica. Para san Agustín hay una verdad común que se encuentra en Cristo que es, simultáneamente, verdad y felicidad. Hay que entender para creer y creer para entender. Se da, por lo tanto, una mutua dependencia entre la razón y la fe. Las dos se necesitan mutuamente. La razón tiene que aclarar la fe, pero, al mismo tiempo, la fe debe guiar a la razón e iluminar su capacidad para conocer. La razón por sí sola no puede conducirnos a la sabiduría. La fe no sustituye a la inteligencia ni la elimina, sino que la estimula. La inteligencia no elimina la fe, sino que la refuerza y la aclara, por eso la razón y la fe son complementarias.

Entradas relacionadas: