Fases y Estrategias Clave de la Guerra de Independencia Española (1808-1813)
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Primera Fase: Junio - Noviembre de 1808
Tras el fracaso del levantamiento de Madrid, los franceses se emplearon en sofocar los alzamientos urbanos que se habían extendido por las ciudades más importantes del país. En junio tuvo lugar el primer sitio de Zaragoza, cuya posesión era fundamental para controlar la vía de comunicación del valle del Ebro. La ciudad aragonesa resistió bajo el mando del general Palafox. El hecho más importante de esta fase es la Batalla de Bailén, donde el ejército francés del general Dupont fue derrotado por un ejército español improvisado comandado por el general Castaños. La derrota tuvo una doble repercusión: propagandística y estratégica. Por primera vez, era derrotado un ejército napoleónico en campo abierto.
Segunda Fase: Noviembre de 1808 - Primavera de 1812
Esta fase se caracteriza por la reacción francesa ante la derrota de Bailén. El emperador francés había subestimado la capacidad de resistencia española. Napoleón cambió sus ideas al respecto y concertó una entrevista con el Zar de Rusia, al igual que antes con el Tratado de Fontainebleau, para garantizarse la seguridad en Centroeuropa y poder concentrar sus esfuerzos en la recuperación de la Península Ibérica. El emperador organizó la Grande Armée, dirigida por él mismo. El 10 de noviembre cayó Burgos, sometida a un fuerte saqueo, seguido de la derrota del ejército de Blake en Espinosa de los Monteros y del de Castaños en Tudela. El hecho de armas más importante fue la toma de Madrid. Zaragoza sufrió el segundo sitio, cayendo en poder de los franceses. Solo Cádiz quedó libre de la ocupación, y de ahí se derivó la elaboración de la primera Constitución española (1812). Lo más decisivo de este periodo fueron las innovaciones estratégicas introducidas por los españoles: la guerra de guerrillas, que se convirtió en una pesadilla para el ejército francés.
Tercera Fase: Primavera de 1812 - Diciembre de 1813
Se inició en la primavera de 1812. Napoleón se vio obligado a retirar de España una parte importante de sus tropas para aumentar la Grande Armée que se preparaba para la invasión de Rusia. Los ejércitos anglo-españoles, bajo el mando de Wellington, intensificaron su ofensiva, que culminó con la decisiva victoria de los Arapiles (Salamanca) en julio de 1812. Esto marcó el principio del fin del poderío francés en la Península. El desastre de la Grande Armée en Rusia decidió la suerte de Napoleón en la Península Ibérica. Las tropas francesas iniciaron el repliegue hacia el norte, precedido por Soult al levantar el cerco de Cádiz. Llegaron a Vitoria, donde sufrieron otra importante derrota en junio de 1813. Con las batallas de Irún y San Marcial (agosto de 1813) se completó el acoso y la derrota del ejército invasor, iniciándose su persecución más allá de los Pirineos, llegando las tropas aliadas hasta Bayona. La Guerra Peninsular había terminado.
La Guerra de Guerrillas
Las guerrillas representaron un elemento novedoso en las guerras contemporáneas, especialmente como forma de resistencia frente a las naciones más poderosas. A partir de la Revolución Francesa, los protagonistas de los enfrentamientos bélicos eran los grandes ejércitos nacionales. La guerra total, que alcanzaría su máxima expresión en la Segunda Guerra Mundial, ya manifestaba en el siglo XIX características que la harían inhumana y devastadora. La guerra de guerrillas era la manera de oponer alguna acción con garantías de éxito a estos grandes ejércitos nacionales, siendo un procedimiento barato y eficaz si no se utilizaban contra ella las tácticas convencionales. El principio de acción-represión-acción contribuyó a la expansión del movimiento guerrillero y al incremento de sus efectivos. Sin embargo, la guerra de guerrillas presentaba inconvenientes para ambas partes, ya que ninguna podía derrotar completamente a la otra, excepto si la guerrilla contaba con el apoyo de un ejército convencional que rompiera el impasse estratégico, como fue el caso del ejército británico liderado por Wellington en la Península.