Explorando el Romancero: Orígenes, Tipos y Estilo Literario

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El Romancero: Un Legado Poético

Un romance es un poema narrativo formado por un número indeterminado de versos, generalmente octosílabos, con rima asonante en versos pares. Originalmente, fueron de creación anónima y se transmitieron mediante el canto y la interpretación. Los primeros romances aparecieron a mediados del siglo XIV, fruto de la fragmentación de los cantares de gesta. La repetición a lo largo del tiempo de estos extensos poemas narrativos llevó a que el público se cansara de ellos, y los juglares comenzaron a seleccionar los pasajes más emotivos o dramáticos. A imitación de estos, fueron surgiendo a partir del siglo XIV otros textos con personajes e historias distintas.

Clasificación del Romancero

El repertorio que conocemos con el nombre de romancero se clasifica, en primer lugar, atendiendo a la forma de transmisión y autoría, en dos grandes grupos:

  • Romance Viejo: Formado por los romances anónimos de la tradición oral, que fueron recogidos por escrito en cancioneros, romanceros, pliegos de cordel, etc., desde el siglo XV hasta mediados del siglo XVI.
  • Romancero Nuevo: Romances compuestos por autores cultos a imitación de los antiguos, desde la segunda mitad del siglo XVI. Poetas como Lope de Vega o Luis de Góngora incorporaron muchos romances. Además, se incorporaron en las obras teatrales dramáticas o sirvieron para escribir obras de teatro.

Tipos de Romances

Se clasifican en:

  • Romances Históricos: Aquellos que toman como argumento un suceso real. A su vez, se clasifican en:
    • Romances Épicos: Los que proceden de los cantares de gesta.
    • Romances Noticieros: Los que relatan hechos destacados de la historia del siglo XV.
    • Romances Fronterizos: Los que narran sucesos relacionados con la Reconquista.
  • Romance Novelesco: Narran historias de ficción, procedentes en muchos casos de cuentos de transmisión oral.
  • Romance Lírico: Son los romances en los que no hay propiamente una historia.

Estilo Literario del Romancero

Características principales:

  1. Comienzo in media res (carece de presentación) y final repentino y enigmático.
  2. Irregularidad métrica y vacilación en el uso de las formas verbales, a veces con el fin de ajustarse al verso o mantener la rima.
  3. Empleo de arcaísmos.
  4. Empleo de expresiones de carácter apelativo, dirigidas expresamente al público, que asiste a la interpretación.
  5. Empleo de fórmulas fraseológicas, repeticiones y paralelismos, es decir, los recursos que facilitan la memorización del texto.
  6. Son textos que se conocen con diversas variantes, ya que en la mayoría de las ocasiones no hay un texto que se considere fijo.

El Mester de Clerecía y el Libro del Buen Amor

Gonzalo de Berceo

Los Milagros de Nuestra Señora

Arcipreste de Hita

Libro del Buen Amor, escrito en la primera mitad del siglo XIV por Juan Ruiz, es uno de los ejemplares más valiosos de la narrativa medieval en lengua castellana. Organizada como una autobiografía ficticia del propio autor, la obra arranca con un prólogo que desvela la finalidad didáctica de la misma. Se propone plantear diversas situaciones propias del amor carnal para que el lector u oyente sepa apreciar, a través del contraste, la esencia del buen amor, que no es otro que el amor divino.

Personajes

El Arcipreste y Trotaconventos, una vieja alcahueta que hace de intermediaria en los amores de este y que, sin duda, fue un precedente del personaje de Celestina. A través de las acciones del protagonista y de su acompañante, la obra se erige como fiel reflejo de la realidad peninsular de la época. En su afán de conquista y mediante las diferentes condiciones sociales de las mujeres pretendidas, el Arcipreste despliega ante los ojos del lector una muestra de cómo era la sociedad de su momento. Finalmente, también cabe señalar la singularidad de esta obra, que destaca por su original mezcla de géneros y de influencias literarias.

El mester de clerecía toma elementos de la juglaría y de carácter popular. La literatura goliardesca, cultivada por los estudiantes universitarios en contra de la cultura oficial de la iglesia y el estado, toma la ironía y la sátira. En prosa, toma la estructura de cuento de cuentos. Así, el Arcipreste también inserta relatos amorosos alegóricos, fábulas y todo tipo de digresiones morales y didácticas.

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