Explorando el Relativismo Moral, Subjetivismo y Ética del Consumo
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El relativismo moral se define como la convicción de que la calificación de una acción como buena o mala depende de cada cultura o de cada grupo. El subjetivismo moral es la afirmación de que en cuestiones morales cada persona opina como quiere y no es posible argumentar sobre ellas de modo que lleguemos a las mismas conclusiones. El pluralismo moral no tiene nada que ver con las ideas anteriores, en todo caso estaría opuesto a ellas. Hay dos tipos:
- Monismo moral: Una sociedad es moralmente monista cuando comparten la misma cosmovisión.
- Politeísmo moral: Consiste en creer que cada persona o grupo tiene sus propios valores.
El Pluralismo como Proyecto Ético
Las exigencias mínimas de justicia en las que ya están de acuerdo esas distintas concepciones morales de la buena vida son exigencias que hemos aprendido históricamente, porque, como dice Jürgen Habermas, las sociedades no solo aprenden técnicamente, sino también moralmente. Valores mínimos de la ética cívica:
- La libertad: Entendida como autonomía moral y como política.
- La igualdad: Eliminación de la dominación. Ningún individuo o grupo de individuos puede poseer un bien dominante.
- La solidaridad: Se exige un tipo de acción: apoyar al débil y explotar al máximo los talentos propios.
- La tolerancia: O el respeto activo.
- Una actitud dialógica.
Tradiciones Éticas
La Tradición Aristotélica
Aristóteles parte de un hecho: los seres humanos realizamos acciones con el fin de ser felices. Pero además, como seres dotados de razón, en vez de tomar decisiones precipitadas, deliberamos serenamente y elegimos con inteligencia los medios que conducen a la felicidad. La persona prudente es quien al elegir no tiene en cuenta solo el momento concreto, sino lo que le conviene para el conjunto de su vida. También se es prudente si se proponen fines buenos, a diferencia de quien solo es hábil.
La Tradición Hedonista
El placer como meta. Epicuro de Samos fue quien fundó esta escuela y dijo que todos los seres humanos buscan el placer y huyen del dolor. La felicidad consiste en organizar de tal modo nuestra vida que logremos el máximo placer y el mínimo dolor. La razón moral será una razón calculadora. El hedonismo individualista se trata de lograr el mayor placer individual, y el utilitarismo es cuando se convierte en social y considera que los seres humanos estamos dotados de sentimientos sociales, y entre ellos cuenta la simpatía. Si se puede lograr el mayor placer para el mayor número de seres vivos, mejor.
La Tradición Dialógica
Esta ética arranca de Sócrates y resurge en la ética discursiva creada por Karl-Otto Apel y Habermas. Considera la razón moral monológica cuando en realidad es dialógica. Las personas no llegamos a la conclusión de que una norma es ley moral o es correcta individualmente, sino mediante el diálogo con los demás. Ahora bien, para comprobar tras el discurso si la norma es correcta, habrá que atender a dos principios:
- El principio de universalización: Una norma es válida cuando todos los afectados por ella están de acuerdo con sus ventajas y consecuencias.
- El principio de la ética del discurso: Es reformulación de la autonomía kantiana. Solo se aceptan las normas que encuentran la aceptación por parte de todos los afectados. O sea, que la norma tiene que estar aprobada por todos los afectados y por los intereses universales.
El Consumismo
Desde finales del siglo XIX, como resultado del desarrollo industrial, surgieron personas que se enriquecieron por el crecimiento del comercio y entienden el consumo como forma de reconocimiento de otras clases, como obreros y campesinos. Esto es lo que el sociólogo T. Veblen demostró como consumo ostentoso: es el consumo que solo se hace para demostrar que se tiene suficiente dinero, sin importar la finalidad o la necesidad.
La Publicidad
La publicidad funciona de diversas maneras. Puede parecer que la única función de la publicidad es la económica, con la intención del incremento de consumo. Sin embargo, existen una multitud de mensajes que recibimos con la publicidad y son los siguientes:
- Función sustitutiva: El objeto que se anuncia se presenta dotado con unas cualidades que no tiene.
- Estereotipadora: La publicidad tiende a hacer que las personas compren objetos del mismo tipo e intenta igualar también las formas de pensar y de ser.
- Desproblematizadora: Solo presenta el lado bello del mundo. En estos anuncios no aparece ni el dolor ni la muerte. El producto que se anuncia es indispensable para ser feliz.
- Conservadora: Detrás de la publicidad no hay más que la consolidación de valores establecidos por la sociedad.
- Dialógica: La publicidad puede convertirse en medio de presión ideológica, ya que puede contribuir a formar estados de opinión en los miembros de la sociedad.
Consumo y Consumismo
El consumo ha de considerarse como un fenómeno que se produce en el contexto de producción del capitalismo industrial. El consumismo es una forma de pensar según la cual el sentido de la vida consiste en comprar objetos o servicios. Esta forma de pensar se ha convertido en la principal ideología que sostiene el sistema capitalista. El consumismo es el consumo por el consumo.
Consecuencias del Consumismo
- El consumismo aumenta las diferencias existenciales entre los países.
- El consumismo acentúa las diferencias entre las personas, generando pobreza.
- Debido a la caducidad de los productos del consumo, se agotan las reservas naturales y aumenta la cantidad de residuos que se producen diariamente, lo que da lugar al deterioro del medio ambiente.
- Las personas atrapadas en el círculo consumista pierden su propia identidad al confundir lo que son con lo que poseen.
- Las personas consumistas se sienten desgraciadas cuando no pueden comprar el objeto o la apariencia deseadas.