Exploraciones y civilizaciones en América y Europa en el siglo XV

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En la segunda mitad del siglo XV, los castellanos emprendieron su expansión por territorios anteriormente desconocidos. Este hecho fue provocado por diversos motivos:

• Búsqueda de rutas comerciales. En 1453, los turcos habían conquistado Constantinopla, bloqueando las rutas tradicionales hacia Oriente y haciendo necesario buscar trayectos alternativos para conseguir productos de lujo, como seda o especias.
• Política expansiva. Finalizada la Reconquista en la Península, Portugal y Castilla rivalizaban por expandir sus territorios.
• Avances técnicos. La revolución científica traída por el humanismo proporcionó instrumentos de navegación cruciales, como el timón, la brújula y los mapas.

Portugal se expande. Las exploraciones portuguesas comenzaron en el siglo XV, impulsadas por el infante Enrique el Navegante, con el objetivo de alcanzar la India por mar. Realizaron sucesivas exploraciones de la costa atlántica africana. Primero descubrieron Madeira, Azores y exploraron el golfo de Guinea. En 1488, Bartolomé Díaz dobló el cabo de Buena Esperanza. Diez años más tarde, Vasco de Gama llegó a la India y establecióse en Calicut, ciudad de las especias.

Los mayas habitaban la península de Yucatán. Entre los siglos III y VIII, su cultura había alcanzado el máximo apogeo, asentada en ciudades como Tikal o Palenque. A la llegada de los españoles, los mayas estaban en clara decadencia, aunque seguían organizándose en ciudades-estado, como Mayapán. La economía maya se basaba en el maíz, tomate, cacao, frijol o calabaza, que cultivaban en la selva mediante el sistema de tala y quema. La religión se organizó en torno a sus alimentos y sustentos principales, como el maíz, y se hacían sacrificios a los dioses para asegurar su crecimiento, traer las lluvias o proteger las cosechas. La cultura era avanzada. Usaban el número cero, tenían conocimientos astronómicos y un calendario muy complejo. Su escritura era jeroglífica.

Los incas dominaban la región de los Andes y habían conseguido formar un gran imperio que abarcaba los actuales Ecuador, Perú, Bolivia y norte de Chile y de Argentina. Desde Cuzco, la capital del imperio, se extendía una extensa red de caminos que conectaba todo el territorio. La economía se basaba en la agricultura del maíz y la patata, que cultivaban en terrazas construidas en las laderas de las montañas. Además, domesticaron llamas y alpacas, de las que aprovechaban la carne y la piel, y desarrollaron una elaborada artesanía en la que destacaba la cerámica, el textil y la metalurgia de oro y cobre. La religión inca era politeísta y, además de Inti, el Sol, la principal deidad era Viracocha.

Asentados en el centro de México, Tenochtitlan, que se encontraba en la actual Ciudad de México, los aztecas eran el más poderoso y disponían de un gran ejército, sometiendo a otros pueblos centroamericanos, a los que obligaban a pagar tributos. La sociedad azteca estaba muy jerarquizada. El principal gobernante era el amado tlatoani. Por debajo de él estaba la nobleza, la casta sacerdotal y el pueblo llano. También tenían esclavos. En su economía destacaban el cultivo de maíz y otros productos, el comercio y el pago de tributos a los pueblos sometidos. La escritura azteca se basaba en dibujos, con los que representaban cuestiones políticas, religiosas o administrativas. Además, tenían un complejo calendario. Los artistas aztecas podían elaborar refinadas esculturas o construir templos y palacios. Los aztecas creían en numerosos dioses, en cuyo honor realizaban sacrificios, a veces humanos. Huitzilopochtli y Quetzalcoatl eran los dioses.