Exploración de la Realidad según Platón: Mundos Sensible e Inteligible
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La mayéutica
Es una técnica que consiste en interrogar a una persona para hacerla llegar al conocimiento no conceptualizado. La mayéutica se basa en la dialéctica, la cual supone la idea de que la verdad está oculta en la mente de cada ser humano. Esta se pone en el segundo nivel del proceso socrático. Libre del prejuicio, el discípulo es invitado a continuar el diálogo para descubrir de manera profunda la coherencia de la verdad. Se parte de la idea de que el conocimiento se encuentra latente en la conciencia humana y que es necesario hacerlo nacer. La mayéutica consiste en la creencia de que existe un conocimiento que se acumula en la conciencia por la tradición y la experiencia de generaciones pasadas. Por lo tanto, en la mayéutica el individuo es invitado a descubrir la verdad que se encuentra en él latente sin haberla hecho consciente, mientras que la ironía, históricamente creada por Sócrates, combate en el individuo lo erróneo de lo que cree saber y tiene como verdad, siendo falso.
Resumen y Definición de Términos Clave
1.1 Resumen del texto
Este texto se inspira en la obra República de Platón. Inicialmente, se explora cómo aplicar la realidad a lo que parece irreal y cómo acceder al ámbito inteligible. Luego, se centra en la idea del Bien como respuesta a esta cuestión y como principio fundamental. Se explica que la idea del Bien es cognoscible y es la causa de todas las cosas. En el mundo sensible, aporta “luz” para distinguir las cosas, mientras que en el mundo inteligible es productora y portadora de la verdad, esencial para alcanzar la sabiduría. Por lo tanto, la idea del Bien es universal y necesaria.
1.2 Definición de términos
Bien: En términos generales, el bien se refiere a aquello que posee la característica de la perfección o que es objeto de ser “bueno”. Sin embargo, Platón lo concibe como la idea suprema, el principio que dota de sentido y explica la realidad, siendo a la vez universal.
Idea: Representación mental relacionada con algo real. Para Platón, corresponde al mundo inteligible y representa las cosas del mundo sensible. Estas ideas son inmutables, eternas y universales, constituyendo la verdadera realidad.
Ámbito visible: Se refiere al mundo sensible, el mundo físico de las cosas que percibimos con los sentidos. Es un mundo donde las ideas se reflejan de manera imperfecta, siendo corruptible, mutable, particular y material.
Teoría Platónica sobre el Mundo Sensible y el Mundo Inteligible. Teoría de la Realidad
La teoría de la realidad de Platón (ontología) es una teoría sobre las ideas que le permite no solo elaborar una teoría sobre los valores que considera importantes, sino también explicar el Universo. Platón se distancia de Protágoras al entender las cosas como “cosas en sí” y no como “cosas para mí”, lo cual es fundamental para establecer un estado justo. Para comprender esta teoría, Platón distingue:
Cosas sensibles: Son corruptibles, modificables e incluso eliminables. Materiales y particulares, intentan imitar a las ideas sin lograrlo. Pertenecen a una realidad física.
Ideas: Constituyen la verdadera realidad para Platón. Son inmateriales, inmutables, universales y eternas. Tienen un carácter normativo respecto a las cosas sensibles, indicando no solo lo que son, sino lo que deben ser. Las ideas son múltiples, a diferencia de las cosas sensibles que son particulares. Platón concibe las ideas organizadas en un sistema jerárquico, con la idea del Bien en la cúspide, otorgando sentido y orden a las demás. Esta jerarquía se estructura así:
- Idea del BIEN
- Ideas éticas
- Ideas estéticas
- Cosas sensibles
Todas se interrelacionan mediante “relaciones dialécticas”. Solo conociendo la idea del Bien se puede construir un estado justo. La idea del Bien es el principio supremo que da orden, sentido e inteligibilidad a la realidad, siendo la causa universal de todo. Quien conoce el Bien, conoce la realidad. Platón divide esta realidad en dos mundos (dualismo):
Un mundo sensible: Al que pertenecen las cosas sensibles, es mutable y corruptible.
Un mundo inteligible: Donde se encuentran las ideas, siendo universal y eterno.
Platón, al dividir la realidad en dos mundos, se sitúa entre Heráclito (mundo sensible) y Parménides (mundo inteligible). El conocimiento de las ideas no se logra durante la vida de forma directa, sino a través de las cosas sensibles o después de la muerte. Solo conociendo el mundo inteligible se puede gobernar el mundo sensible y construir un estado justo.
Para Platón, pensar es ver el aspecto de la figura. Teorizar es contemplar las ideas en sí mismas y sus relaciones (dialécticas), lo cual garantiza una buena política y un buen funcionamiento del estado.
Implicaciones Políticas de la Teoría Platónica
En Atenas, los sofistas influían en la política con su convencionalismo y empirismo político. El convencionalismo sostiene que las leyes son acuerdos variables, y el empirismo que lo bueno para el pueblo es lo que este opina. Platón, influenciado por la condena de Sócrates, creía que los gobernantes debían ser filósofos conocedores de la idea del Bien para establecer una sociedad justa.
Comentario de Texto: Fedro de Platón
Contextualización
El texto pertenece al libro Fedro (247 C-E) de Platón, una obra de su etapa de madurez, junto con Banquete, República y Fedón, donde desarrolla su Teoría de las Ideas.
Género, Naturaleza y Tipo de Texto
- Género: Didáctico
- Naturaleza: Filosófica
- Tipos: Expositivo, argumentativo y analítico
Tema
La auténtica realidad.
Problema y Tesis
: La pregunta planteada en este fragmento de “Fedro” es: ¿Qué elementos integran el lugar en el que habita la auténtica realidad? La tesis, o respuesta dada por el autor al problema, se sitúa en torno a las dos grandes ideas de la filosofía de platón:La existencia de conceptos o “ideas” eternas e inmutables y la dualidad cuerpo/alma.:El texto nos sitúa en un lugar “que está más allá de los cielos”, donde “habita (…) la auténtica realidad”. Según Platón, existen realidades eternas, que se hallan en un mundo separado no perceptible por nuestros sentidos. A estos universales los denomina “Ideas (ideia o eidos)”(visión de algo en su ser eso que es). Se trata de arquetipos (modelos eternos de las cosas, que establecen un vínculo entre la divinidad suprema y el mundo de la materia) de los objetos de este mundo, los cuales son meras copias o “sombras”, sujetas a un continuo fluir. El hombre tiende al verdadero conocimiento -pero no el conocimiento que comienza a ser o el que existe en cualquier cosa de las que llamamos reales”, que pertenece al “Mundo de las Ideas”, mientras que los sentidos no son más que un punto de partida que ofrece una realidad falsa e inestable; las Ideas son la verdadera realidad, eterna e inmutable, y las cosas son tan sólo el reflejo de dicha realidad, de la cual participan.Las Ideas existen en comunidad jerarquizada, de modo que las inferiores se hallan comprendidas en las superiores, en una escala que culmina con la Idea del Bien.Platón propone que los objetos del mundo físico sólo se parecen o participan de las formas perfectas, y que sólo éstas pueden ser el objeto del verdadero conocimiento; lo que es eterno e inmutable son los modelos espirituales o abstractos, a cuya imagen todo está moldeado, todos los fenómenos de la Naturaleza son solamente “sombras” de las Ideas eternas.Conclusión: Platón establece una realidad dividida en dos:Una parte es el “Mundo de los Sentidos”, sobre el que sólo podemos conseguir conocimientos aproximados e imperfectos utilizando nuestros sentidos. Todo lo que integra este mundo “fluye” y nada permanece. No hay nada que seaen este mundo, solamente se trata de cosas que surgen y perecen.La otra parte es el “Mundo de las Ideas”, sobre el cual podemos conseguir conocimientos ciertos, mediante la utilización de la razón. Este mundo no puede reconocerse por medio de los sentidos.Citando un ejemplo de “El mundo de Sofía”:[“¿Por qué todos los caballos son iguales, Sofía? A lo mejor piensas que no lo son en absoluto. Pero hay algo que todos los caballos tienen en común, algo que hace que nunca tengamos problemas para distinguir un caballo de cualquier otro animal. El caballo individual “fluye” (…), pero el “molde de caballo” es eterno e inmutable. (…) Ese caballo está moldeado según un modelo que queda inalterado de caballo en caballo. (…) Todos los caballos tienen un denominador común, un origen común, están hechos con el mismo molde.”]El otro punto de la filosofía platónica que aborda este texto gira en torno al cuerpo y el alma. Para Platón, el hombre se compone de alma y cuerpo, pero la parte absolutamente más noble es el alma, porque es espiritual, y por lo tanto, eterna e inmutable. La espiritualidad le viene dada por su origen, pues procede de una existencia anterior. El alma se encontraba en el “Mundo de las Ideas”, mundo que “por ser objeto de verdadero conocimiento, sólo puede ser percibido por (…) el alma”, pero como castigo a una culpa cometida, fue arrojada al cuerpo, y en él mora temporalmente hasta que pueda volver a su lugar de origen. La unión alma-cuerpo es accidental, pero no independiente. La interdependencia se explica acudiendo a las tres partes de que consta el alma: la parte apetitiva (que se encuentra en el vientre y a la que se deben las sensaciones placenteras), la parte irascible (que está en el pecho y corresponde a los afectos) y la parte intelectual o racional (que reside en la cabeza y está en contacto con las Ideas). El alma añora el retorno a la contemplación de las Ideas, “se ocupa en captar lo que le es afín, se regocija al contemplar por fin el ser; se alimenta de la contemplación de la verdad y es feliz (…). Contempla a la justicia misma, a la moderación misma y al conocimiento (…). Y, habiéndose recreado en la contemplación de las otras cosas que son igualmente verdaderas, el alma se sumerge de nuevo dentro de la parte interior del cielo, para regresar a casa”. A esta contemplación directa y plena llegará mediante la perfección que le concede la práctica de las virtudes, correspondientes a cada parte del alma. Así, se establecen cuatro virtudes fundamentales: a la parte apetitiva le corresponde la templanza, la moderación por la cual el hombre domina sus pasiones; a la parte irascible, la fortaleza o valor; a la parte racional, la prudencia o sabiduría. Por encima de todas ellas, está la justicia, virtud por excelencia. Cuando el cuerpo muere, el alma sigue existiendo. Si durante su peregrinaje por este mundo ha conseguido la purificación por medio de la virtud, el alma regresará a su lugar de origen; de no ser así, se reencarnará en otro ser, hasta que logre la perfección. En “Fedro”, Platón describe así el alma: [“El alma es semejante a un carro alado, del que tiran dos briosos corceles, uno blanco y otro negro, regidos por un auriga moderador”].ESQUEMA IDEAS:Idea principal:¿Qué elementos integran el lugar en el que habita la auténtica realidad?Ideas secundarias: ¿Qué nota tienen en común todos esos elementos?¿Dónde se encuentra la auténtica realidad?Lo que percibimos por los sentidos, ¿es el verdadero conocimiento?RESÚMEN:El alma asciende desde el “mundo de los Sentidos”, donde se encuentra unida a un cuerpo, hasta su lugar de origen: el “mundo de las Ideas”. Allí, contempla la verdadera realidad, el conocimiento puro, las virtudes y añora quedarse ahí, pero vuelve a descender para regresar a su “casa provisional”.