Etapas de la Revolución Francesa: De la Asamblea Nacional al Consulado de Napoleón

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1° Fase: La Asamblea General y la Toma de la Bastilla (1788-1789)

Aunque se inició por multitud de causas, la principal fue la crisis financiera del Estado. Francia, con una monarquía absoluta gobernada por Luis XVI y María Antonieta, y una sociedad estamental, arrastraba desde hacía años una auténtica bancarrota. A esto se sumaban el gran número de funcionarios corruptos y los gastos excesivos de la corte. En 1788, tras varios años de malas cosechas, la crisis se agravó ante la subida de precios de productos básicos como el pan. Además, la mayoría de impuestos recaían en el pueblo llano, compuesto mayoritariamente por campesinos.

Ante esta situación, en 1789 el rey convocó una Asamblea de Notables (nobleza y clero) con el objetivo de convencerlos para que contribuyeran al pago de impuestos. Los dos estamentos se negaron.

Luis XVI se vio obligado a convocar los Estados Generales (cortes), en los que participaron los tres estamentos, algo que no ocurría desde 1614 (hacía 175 años). Las sesiones se iniciaron en Versalles en mayo de 1789, pero surgieron problemas sobre la forma de votación. El Tercer Estado, más numeroso, exigió el voto individual, mientras que el clero y la nobleza exigían el voto por estamento. El rey cometió un gran error al aceptar esta última propuesta.

Por tal motivo, los representantes del pueblo llano se reunieron en un local llamado el Salón del Juego de Pelota y se constituyeron como Asamblea Nacional, realizando un juramento: ya no se trataba de solucionar la crisis financiera, sino de acabar con el Antiguo Régimen. El primer objetivo sería redactar una constitución.

El rey, alarmado por los hechos, intentó disolver la asamblea sin éxito. El pueblo, creyendo que iba a ser atacado, buscó defenderse y conseguir armas, lo que llevó a la Toma de la Bastilla el 14 de julio de 1789, una antigua prisión de París.

El inicio de la revolución se extendió a todo el país: los campesinos atacaron a sus señores, robándoles el ganado y saqueando las tierras, en un proceso que fue llamado El Gran Miedo.

2° Fase: La Asamblea Constituyente (1789-1791)

Como el principal objetivo era elaborar una constitución, la Asamblea pasó a denominarse Asamblea Constituyente. Una de sus primeras disposiciones fue redactar un documento previo conocido como la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, basado en las ideas de la Ilustración. En este documento se reconocieron los derechos fundamentales del ser humano: libertad, igualdad y fraternidad, que se convirtieron en el lema de la revolución.

Dos años después quedó elaborada la Constitución de 1791. En ella se proclama la soberanía nacional y la división de poderes (legislativo, ejecutivo y judicial) según el modelo ilustrado de Montesquieu.

Se reconocieron las libertades políticas y el derecho al voto (para hombres con determinado nivel de rentas o sufragio censitario). Pero lo más importante de todo fue que la monarquía dejó de ser absoluta para ser constitucional, derrumbando uno de los pilares del Antiguo Régimen.

Una vez aprobada la Constitución, la Asamblea pasó a ejercer su labor legislativa, denominándose Asamblea Legislativa.

Los diputados de esta asamblea se agrupaban en torno a dos grupos políticos:

  • Girondinos: Eran el partido moderado, partidarios de continuar con la revolución, pero de manera progresiva.
  • Jacobinos: Eran el grupo más radical, partidarios de acabar lo más rápidamente posible con el Antiguo Régimen.

Ante esta situación, el rey Luis XVI intentó buscar ayuda en el exterior. Al no conseguirlo, la familia real intentó huir de Francia, disfrazados de familia noble y camuflados en un carruaje, pero pronto fueron capturados. A este hecho se le conoce como la Fuga de Varennes (junio de 1791).

3° Fase: República y Guerra - Época del Terror (1792-1795)

En 1792 se eligió una nueva asamblea, la Convención Nacional. Las primeras decisiones estuvieron relacionadas con juzgar a los monarcas, que se encontraban encarcelados desde el intento de fuga. Finalmente, se les acusó de alta traición y fueron condenados a muerte en la guillotina: primero Luis XVI (1792) y poco después María Antonieta (1793).

Con una monarquía sin reyes, la Convención debía buscar un nuevo modelo de gobierno. Esto llevó al fin de la monarquía de los Borbones y a la proclamación de la Primera República Francesa, para la cual se tuvo que elaborar una nueva constitución en 1793.

La revolución alcanzó su etapa más sangrienta, conocida como la Época del Terror. El gobierno, liderado por el radical jacobino Robespierre, logró aprobar la Ley de Sospechosos, en la cual cualquier persona sospechosa de ser contraria a la república podía ser guillotinada. En apenas dos meses, más de 40,000 personas murieron en la guillotina.

Ante estos hechos, el partido moderado (girondinos) dio un golpe de estado que provocó la caída de Robespierre y sus aliados, quienes también fueron ejecutados en la guillotina.

4° Fase: Directorio y Consulado

Tras la Época del Terror y con el gobierno de los girondinos, se creó un nuevo gobierno en Francia: el Directorio, formado por cinco líderes militares, que elaboraron la tercera constitución del país (1795).

Muchos países europeos temían que la revolución se extendiera y le declararon la guerra a Francia.

Defendiendo a Francia, emergió un joven y brillante militar llamado Napoleón Bonaparte.

Al llegar a Francia tras lograr grandes victorias en Egipto, su fama creció. Sus múltiples apoyos le permitieron organizar un segundo golpe de estado, que también triunfó. El Directorio fue derrotado y se inició el Consulado, un nuevo gobierno formado por tres cónsules: Ducos, Sieyès y Napoleón, quien además se proclamó cónsul principal. Con el Consulado finalizó la Revolución Francesa, logrando su objetivo principal: acabar con el Antiguo Régimen, ya que Napoleón mantuvo la soberanía nacional y la división de poderes.

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