Etapas del Aprendizaje de la Escritura y Técnicas de Dictado

Etapas del Aprendizaje de la Escritura

Pre-escritura o Etapa de Preparación

Vigotskí y sus colaboradores dicen que este proceso sigue una trayectoria que va de los símbolos más primarios, como son los gestos y el juego, o otros más complejos, como el dibujo, hasta llegar a la escritura. El gesto es el primer signo visual que contiene en sí la futura escritura del niño. Los signos escritos serían como señas que han quedado fijadas. En esta etapa se desarrollan dos tipos de actividades: manuales y de pre-escritura.

Etapa Precaligráfica o de Iniciación

Comprende los primeros momentos de contacto con la escritura, cuando hay que plantearse los problemas básicos en su dimensión técnica: reproducción correcta de las formas de las letras, regularidad de tamaño, dirección, compaginación, etc. y cuando hay que cuidar la pulcritud, la legibilidad, etc. Esta etapa se caracteriza porque la escritura del niño presenta una serie de rasgos que evidencian inmadurez, falta de dominio y regularidad en el acto gráfico.

Etapa Caligráfica Infantil o Progresiva

Aunque lentamente, el niño escribe con cierta soltura, manifiesta un dominio de motricidad fina y su escritura corresponde al ideal caligráfico escolar: las líneas son rectas y regularmente distanciadas, los márgenes se respetan en forma correcta, las letras y palabras aparecen diferenciadas claramente. Esta etapa alcanza su mejor expresión entre los 8 y 10-12 años.

Etapa Postcaligráfica

Suele aparecer esta etapa a partir del periodo 10-12 años. Las huellas del modelo caligráfico aprendido se van borrando y empieza a configurarse la letra definitiva. El acto de escribir se ha automatizado, la rapidez en la escritura es ahora de gran importancia y la escritura caligráfica infantil es muy lenta para tomar apuntes. Estas exigencias de rapidez y de personalidad conducen al alumno a unir las letras con mayor facilidad y también a simplificar sus formas, observándose una crisis de la escritura en este período.

El Dictado: Una Herramienta Didáctica

El dictado forma parte de las técnicas más utilizadas por los maestros en la enseñanza de la ortografía, especialmente, en relación con la fase de evaluación. Sin embargo, no siempre se plantea de manera adecuada. El dictado es una actividad que no solo sirve para evaluar, sino también para la etapa de ejercitación. En ningún caso se trata de "pillar al alumno". Debe aparecer ante los ojos infantiles como una actividad entretenida y provechosa, en la que él es un participante activo, capaz de observar sus progresos y comprobar los aspectos que aún hay que superar. Es recomendable hacer dictados en contextos y las listas de palabras son recomendables solo en algunos casos muy específicos.

Usos del Dictado

• Como diagnóstico: el maestro selecciona un texto adecuado, o lo construye, cuidando que su extensión no sea muy grande. Se debe dictar en forma natural, sin exagerar, de manera que todos puedan oírlo bien y mediante frases con sentido.
• Como ejercitación: si se emplea el método inductivo, es necesario que el alumno tenga varias oportunidades de emplear palabras con la dificultad en estudio. En esta oportunidad el dictado es una forma de hacerlo, especialmente en lo que se refiere a la ortografía del acento.
• Como forma de evaluación: con la finalidad de verificar el logro de los objetivos el dictado se presenta como una alternativa más. Es conveniente que éste se realice sin tensión, en un ambiente relajado. Aparte del dictado deben utilizarse otras formas de evaluar.

Formas de Hacer Dictados (Cassany)

1. Dictado por parejas: Se forman parejas entre los alumnos. Un alumno tiene una hoja con unos cuentos fragmentados del dictado, con vacíos intercalados; el otro alumno dispone del texto complementario. Uno de los alumnos dicta al otro, en primer lugar, el primer fragmento y el otro lo escribe en la hoja; y viceversa. Al final, cada alumno corrige su dictado a partir del texto escrito en la hoja del compañero. Para esta actividad hay que proponer textos completos y breves.
2. Dictado de secretario: Los alumnos son secretarios/as que tiene que tomar nota de una carta o de otro tipo de texto. Para ello, el maestro lee el texto a velocidad normal, sin detenerse, y los/as alumnos/as toman las notas que pueden. A continuación se forman grupos de tres o cuatro alumnos que han de intentar reconstruir el texto a partir de las notas o apuntes tomados.
3. Dictado memorístico: El maestro escoge el fragmento para dictar y la fotocopia en la parte posterior de la hoja de papel. Da a los alumnos un tiempo determinado para mirarlo e intentar memorizarlo.
4. Dictado telegráfico: El maestro sólo dicta las palabras llenas (nombre, verbos, adjetivos) y el alumno tiene que apuntar la frase completa.

Técnicas de Animación a la Lectura

Antes de Leer

Actividades de motivación, para dar sentido y funcionabilidad a la lectura; disponibilidad, para ofrecer información del texto y autor; y de predicción, para aventurar hipótesis partiendo del índice, título, tapa, etc.

Durante la Lectura

Se proponen fórmulas intermedias que, respetando la lectura individual, permitan la participación grupal del procesamiento de la hipótesis y, a la vez, se creen otras nuevas. Durante la lectura el lector procesará la información, confirmará hipótesis, contrastara opiniones, etc. Reestructurando continuamente su conocimiento.

Después de la Lectura

Actividades encaminadas a la revisión, comprensión final de un libro o texto y valoración personal. Son más completas.