Estudio exhaustivo del Pensamiento Filosófico y Teológico desde la Antigüedad hasta la Edad Moderna

Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Filosofía y ética

Escrito el en español con un tamaño de 46,01 KB

Santo Tomás (1224-1274)

Santo Tomás (1224-1274) nació en Rocaseca, Nápoles, en una familia aristocrática. En contra del deseo de sus padres, ingresó en la orden de los Dominicos. Dominicos y Franciscanos eran órdenes religiosas que intentaban reformar la Iglesia desde dentro, regresando a la pobreza original de los Evangelios. Pese a la oposición inicial de la Iglesia de Roma, ambas órdenes consiguieron el beneplácito papal y adquirieron poder e influencia. Los Dominicos controlaban la Universidad de París en el siglo XIII. Se llegó a decir que París era la Atenas de Pericles trasladada a la Edad Media. Los Franciscanos se hicieron con el control de la Universidad de Oxford. Fueron los dos centros de saber más importantes de la época. Los Dominicos identificaban a Dios con la RAZÓN. Dios no está limitado por la razón, pero no puede hacer nada irracional. No podría haber creado un mundo donde el tiempo marchara al revés o donde el pecado fuera virtud. Por el contrario, los Franciscanos identificaban a Dios con la VOLUNTAD. Dios podría haber creado un mundo donde no existiera Dios. Esta polémica se mantuvo durante el siglo XIII, enfrentando a Dominicos y Franciscanos. Santo Tomás estudió en la Universidad de Milán, donde conoció a San Alberto Magno, quien fue su maestro. San Alberto Magno no es un pensador original, pero sí un gran erudito; sus obras son compendios del saber de la Antigüedad y la Edad Media. Santo Tomás continuó sus estudios en la Universidad de París, donde ejercería la docencia el resto de su vida. Murió camino del Concilio de Lyon. Antes de morir, experimentó una visión mística y afirmó que su obra no valía absolutamente nada, que solo era "paja" comparada con esta experiencia beatífica. Santo Tomás fue canonizado en 1323, cuando la Iglesia aún mantenía reservas sobre algunas de sus tesis filosóficas y teológicas. Actualmente, el tomismo es la teología que ejerce una influencia más poderosa en la Iglesia de Roma.

Obras:

Santo Tomás es autor de una vasta obra teológica. Podemos destacar tres tipos:

  • Del ente y la esencia: Es una obra de juventud donde aparecen esbozadas algunas de las tesis de la teología racional tomista, como la distinción entre esencia y existencia. Según Santo Tomás, Dios es el único ser necesario, porque es el único cuya esencia incluye la existencia; todos los demás seres, incluidos los hombres y mujeres, son seres contingentes, es decir, finitos y meramente posibles.
  • Summa contra gentiles: Fue escrita para promover la conversión de los musulmanes al cristianismo y para evitar que las doctrinas del islam y de la Biblia se mezclaran, ya que en algunas zonas de Oriente Medio y el Magreb se tendía al sincretismo religioso.
  • La summa teológica: Es una obra que quedó inacabada, pero se desarrolló suficientemente hasta el extremo de contemplar el estudio de Dios, el hombre y la naturaleza. Es su obra fundamental y representa una de las cumbres de la teología. En la obra se pretenden resolver todas las controversias y dificultades que puede encontrar un teólogo en sus reflexiones, siempre desde un punto de vista fiel a la doctrina de la Iglesia. El fragmento que nos ocupa trata sobre el problema de la existencia de Dios: si su existencia es evidente, si es posible demostrarla y, finalmente, concluir si Dios existe o no.

Fe y Razón:

Al igual que San Agustín, Santo Tomás creía que fe y razón son complementarias, pero en el caso de que surja un conflicto entre ambas, siempre prevalece el criterio de la fe, ya que se basa en las Sagradas Escrituras. Las Sagradas Escrituras son la palabra de Dios. La postura de Santo Tomás coincide con la de San Anselmo de Canterbury, que en el siglo XI afirma: "no busco entender para creer, sino que creo para poder entender". Para Santo Tomás, la fe es un criterio extrínseco, externo al mundo, que nos permite diferenciar entre la verdad y el error. El propósito esencial de Santo Tomás es elaborar una TEOLOGÍA RACIONAL. Aunque reconoce que algunos dogmas son inasequibles para la razón. Por eso distingue entre "preámbulos de fe" y "artículos de fe". Los preámbulos de fe pueden explicarse por medio de la razón, por ejemplo, la existencia de Dios y sus atributos. Por el contrario, los artículos de fe son dogmas que desbordan la razón, como el misterio de la Santísima Trinidad y la encarnación de Cristo. Se pueden elaborar algunas explicaciones, pero siempre serán insuficientes.

La Síntesis Tomista:

La filosofía de Santo Tomás intenta conciliar el pensamiento de Platón y Aristóteles con la revelación cristiana.

  • De Platón: Santo Tomás tomará el concepto de participación. Dios es existencia, pues es el único ser necesario donde la esencia incluye la existencia. Todos los seres finitos y contingentes solo existen porque participan de la esencia divina.
  • De Aristóteles: Santo Tomás incorporará los siguientes conceptos a su pensamiento: sustancia primera y sustancia segunda, sustancia y accidente, materia y forma, acto y potencia, la teoría de las cuatro causas y el concepto de teleología.

Santo Tomás discrepa con Aristóteles en las siguientes cuestiones: la teleología no es inmanente, intrínseca a la naturaleza, sino que está impuesta por Dios. Es cierto que Dios es el primer motor inmóvil del cosmos, pero su actividad no consiste en pensar exclusivamente en su propia naturaleza, ya que Dios es amor y por amor creó el cosmos y al ser humano. Santo Tomás tampoco está de acuerdo con Aristóteles en lo que respecta al alma humana, pues Aristóteles niega la inmortalidad y el cristianismo sostiene que el alma es inmortal.

Respecto al pensamiento árabe, Santo Tomás recogerá la distinción entre esencia y existencia formulada por Al-Farabi. Esta distinción servirá para explicar que Jesucristo, en cuanto a su existencia, fue humano, pero su esencia fue divina. Santo Tomás no aceptará la interpretación que realiza Averroes del pensamiento aristotélico. Averroes sostiene que el alma no es inmortal, que el mundo es eterno (siempre ha existido y siempre existirá) y que la verdad se desarrolla en un plano filosófico y otro teológico. Esta teoría de la doble verdad, según Santo Tomás, le quita importancia a la teología, fomentando la autonomía de la razón y debilitando la fe. Del pensamiento de San Agustín, Santo Tomás adoptará la teoría de la causalidad ejemplar (las ideas platónicas son los pensamientos de Dios) y la explicación del mal como ausencia del bien.

Las pruebas sobre la existencia de Dios:

Santo Tomás creía que se podía probar racionalmente la existencia de Dios. Santo Tomás apreciaba mucho el argumento ontológico de San Anselmo de Canterbury, según el cual, si Dios es el ser más perfecto, no puede estar privado de la existencia, porque entonces ya no sería el ser más perfecto. Dicho de otro modo: "Dios es el ser mayor que el cual no cabe otro, pues si pudiéramos concebir otro ser más grande, ya no sería ese ser que establece los límites de la realidad al representar una magnitud insuperable". Santo Tomás consideraba que este argumento no es válido porque presupone la existencia de lo mismo que se pretende demostrar, es decir, la existencia de un ser perfecto. Además, este argumento realiza un tránsito del lenguaje a la realidad que no puede justificarse lógica ni ontológicamente. Santo Tomás considera que la existencia de Dios no es evidente, pero que se puede deducir por los efectos que ha producido en el mundo. Hay dos procedimientos para demostrar la existencia de Dios: el procedimiento que va de la causa al efecto ("propter quid") y el procedimiento que se eleva del efecto a la causa ("quia"). Según Santo Tomás, solo puede utilizarse el segundo procedimiento para probar la existencia de Dios. Santo Tomás elabora cinco vías o pruebas para demostrar que Dios existe. Son pruebas racionales basadas en el principio de causalidad y que siempre se elevan del efecto a la causa.

5 Vías o pruebas:
  1. Prueba cosmológica: Todas las cadenas causales tienen un principio; en el caso del cosmos, ese primer principio tiene que ser una causa incausada, porque si hubiera una causa anterior, la cadena causal se prolongaría indefinidamente, y esa posibilidad es lógicamente imposible. Dios es la causa primera o causa incausable de la que procede el universo.
  2. Prueba causal: En cualquier cadena causal hay un orden lógico donde la causa precede al efecto. El universo no puede ser causa de sí mismo, porque tendría que ser anterior a sí mismo como causa para producirse a sí mismo como efecto. Tiene que existir una causa eficiente, externa al mundo, que es el origen de la realidad. Dicho de otro modo: "Dios es la causa eficiente de la que proceden todas las causas".
  3. Prueba de la contingencia del mundo: El universo es meramente probable. No hay ninguna causa lógica que justifique su existencia. Tiene que existir, por lo tanto, una causa necesaria que haya determinado la aparición del universo, y esa causa solo puede ser Dios.
  4. Prueba de los grados de perfección: En la naturaleza apreciamos diferentes grados de perfección, y esa diversidad solo puede explicarse por un absoluto que actúa como término de referencia.
  5. Prueba teleológica: Todo lo que existe está orientado hacia un fin que solo puede proceder de un ser racional, que es Dios. Es necesario que exista una inteligencia primera y ordenadora de la que procede la teleología del mundo natural.

Al margen de elaborar cinco pruebas para demostrar la existencia de Dios, Santo Tomás intenta describir su naturaleza utilizando dos procedimientos:

  1. En primer lugar, la teología negativa o apofática se basa en el principio de exclusión: nos revela que Dios es inmóvil, inmutable, es absolutamente simple y perfectamente en acto.
  2. En segundo lugar, la teología positiva o catafática procede por medio de la analogía: nos revela que Dios es absolutamente bueno, todopoderoso, omnisciente, providente, único, inteligente y voluntario. Descubrimos estas características atribuyendo a Dios todas nuestras cualidades en grado superlativo; esta vía también se conoce como vía de la eminencia.

Moral y Política:

Moral:

Santo Tomás establece tres niveles para explicar la providencia de Dios y fundamentar las normas morales y las leyes que regulan la convivencia en el marco de cualquier comunidad.

  • La ley eterna: Es el conjunto de leyes físicas establecidas por Dios para garantizar el funcionamiento del cosmos.
  • La ley natural: Es el conjunto de mandamientos morales que Dios ha grabado en el corazón de todos los hombres. Con independencia de la época y la sociedad, hay cuatro inclinaciones universales en el ser humano: conservar la vida, reproducirla, vivir en sociedad, buscar la verdad y la felicidad. Los mandatos de la ley natural coinciden con nuestras inclinaciones naturales. El primer mandato de la ley natural: haz el bien y evita el mal. El bien se identifica con nuestras inclinaciones: preservar la vida, procrear, formar comunidad y buscar la felicidad.
  • La ley positiva: Es el conjunto de leyes que establece el Estado para regular la vida social y garantizar el amparo jurídico de las personas. Durante mucho tiempo se alegó la existencia de un derecho natural basado en impulsos naturales de carácter universal; todo lo que coincide con las inclinaciones naturales debería poseer rango de ley. Actualmente, el derecho natural ha perdido influencia en el ámbito jurídico, pero sigue constituyendo un tema de debate.

Política:

Santo Tomás reconoce la autonomía del poder político, pero señala que el Estado pierde su legitimidad cuando aprueba leyes o conductas contrarias a la moral cristiana. Esta doctrina coincide con el punto de vista actual de la Iglesia católica.

San Agustín (354-430)

Nació en el año 354 d.C. en Tagaste, Numidia, y murió en el año 430 en Hipona, Imperio romano. San Agustín fue obispo de Hipona, y es por este motivo que también se le conoce con el nombre de San Agustín de Hipona.

Vida:

San Agustín fue hijo de un pagano y de una cristiana, que sería canonizada como Santa Mónica. San Agustín no mostró al principio de su vida ningún interés por el estudio ni por la religión. De hecho, llevó una existencia desordenada y tuvo un hijo natural. La lectura del Hortensio de Cicerón, la influencia de su madre y de su maestro San Ambrosio fueron determinantes para su conversión al cristianismo. Al inicio de su trayectoria filosófica, San Agustín se identificó con las tesis del maniqueísmo, una doctrina según la cual hay dos fuerzas cósmicas (el bien y el mal) que se enfrentan constantemente y que son el origen de la historia, la acción moral y la relación del hombre con lo sobrenatural. El cristianismo rechazó la doctrina del maniqueísmo porque atribuía al mal el mismo estatuto ontológico que al bien. El Dios cristiano está situado por encima del mal, y el mal, de acuerdo con la filosofía de Platón, solo es ausencia del bien. San Agustín abandonó el maniqueísmo tras considerar que solo el bien se identifica con lo sobrenatural y que el mal es una simple carencia. Después de convertirse al cristianismo, San Agustín se dedicó a combatir las herejías de su época. En primer lugar, se enfrentó al donatismo, según el cual los sacramentos administrados por obispos o sacerdotes que hayan adoptado comportamientos inmorales o heréticos carecen de validez. La validez de los sacramentos no está determinada por las cualidades de los que se encargan de administrarlos, sino por la gracia de Dios. El que ha sido bautizado en el seno de la Iglesia católica se beneficia de todos los derechos asociados a este sacramento.

En segundo lugar, San Agustín combate el pelagianismo, según el cual la salvación del hombre no depende de la gracia, sino del libre albedrío. El pelagianismo rechaza la teoría de la predestinación, según la cual Dios ha decidido desde la eternidad quién se salvará y quién se condenará. San Agustín no afirma que exista la predestinación por voluntad divina, pero sí sostiene que la gracia de Dios desempeña un papel esencial y que el hombre no podría salvarse por sí mismo. Esta postura explica que durante la Reforma luterana los protestantes invocaran la figura de San Agustín como precursor de sus ideas.

Obras:

San Agustín escribió una larga obra teológica que incluye tratados, sermones, cartas, etc. Dentro de esta obra hay que destacar las siguientes:

  • Confesiones: Es un texto autobiográfico donde San Agustín narra su conversión al cristianismo y reflexiona sobre temas como el tiempo, la eternidad, las pruebas sobre la existencia de Dios y el pecado. Se puede decir que San Agustín crea un género literario, ya que en la Antigüedad griega y romana existían obras autobiográficas, pero orientadas al elogio y a la justificación del autor. San Agustín nos relata sus pecados, se describe a sí mismo como un ser humano sumamente imperfecto y afirma que sin la figura de Cristo nunca habría conseguido arrepentirse, cambiar su naturaleza y enmendar sus errores.
  • Del libre albedrío: Es un estudio teológico donde San Agustín atribuye más importancia a la gracia divina que a la voluntad individual. Sin la ayuda de Dios, los hombres carecen de libertad, pues su naturaleza les empuja hacia el mal. Sin el sacrificio de Cristo, ningún hombre podría ser libre y bueno. Su principal interés reside en dos aspectos fundamentales: por un lado, utiliza el método del diálogo al estilo platónico como modo de argumentación y búsqueda de la verdad; el otro aspecto fundamental de este fragmento es su tema: el origen del mal.
  • Trinidad: Es un tratado teológico donde San Agustín afirma que Dios está compuesto por tres personas sin que esto afecte a su unidad como sustancia. El concepto de persona está asociado a la razón, la libertad, la conciencia moral y no a hechos particulares que acontezcan en el tiempo.
  • Ciudad de Dios: Después del saqueo de Roma en el 410 d.C. por Alarico, muchos creyeron que se estaba produciendo el fin de la civilización y acusaron al cristianismo de ser responsable de la decadencia de Roma. La ciudad celestial de la que habla San Agustín está habitada por los hombres que aman a Dios hasta despreciarse a sí mismos; en cambio, la ciudad terrenal está compuesta por los hombres que se aman a sí mismos hasta despreciar a Dios. No se trata de dos ciudades reales que ocupen un lugar en la historia de la humanidad, sino de ciudades metafóricas, simbólicas, que representan el pecado y la virtud. San Agustín se refiere a ellas utilizando dos nombres simbólicos: Jerusalén (ciudad celeste, visión de paz) y Babilonia (confusión, es la ciudad terrenal fundada por el gesto homicida de Caín). Estas ciudades han existido siempre y siempre existirán; solo Dios podrá separarlas el día del Juicio Final; mientras tanto, se hallan mezcladas en todos los espacios habitados por el hombre. San Agustín reconoce la independencia del poder político del Estado, pero considera que un gobierno pierde su legitimidad cuando incumple los mandatos de Dios.

Fe y Razón:

Tertuliano, padre de la Iglesia, afirmaba: "Creo, porque es absurdo" (porque es irracional, indemostrable). Por el contrario, San Agustín afirmaba que la fe encuentra en la razón su mejor aliado. Fe y razón son complementarias, y cuando surge un conflicto entre ellas prevalece el criterio de la fe. San Agustín cita al profeta Isaías para fundamentar su punto de vista; Isaías afirma: "Si no tenéis fe, no podéis comprender". En el siglo XIII, Santo Tomás elabora argumentos semejantes para explicar la relación entre fe y razón.

Persona:

San Agustín escribió: "¡Qué misterio tan profundo es el hombre!". San Agustín sitúa su propio yo en el centro de su filosofía. Escribe: "Yo mismo me había convertido en un gran problema. No comprendo todo lo que soy, pero sé que conocerse a uno mismo significa conocerse en tanto imagen de Dios". San Agustín atribuye un valor extraordinario al concepto de persona. La persona no es una abstracción, sino una realidad compleja que nos permite acercarnos a Dios. La persona posee derechos, sensibilidad moral y una identidad propia. Cualquier forma de vida humana refleja el esplendor de Dios. Dios nos creó a su imagen y semejanza, y se encarnó para redimir a la humanidad del pecado original. La continuidad de la vida interior nos permite conocer nuestra identidad; la atención nos revela la existencia del presente; la memoria nos permite reconstruir el pasado; y la imaginación nos ayuda a anticipar el futuro. Sin estos rasgos de la personalidad, sería imposible identificar un yo que actúa como sujeto de nuestras acciones.

La verdad como iluminación:

San Agustín sostiene que la verdad no se halla en el exterior, sino en el interior del ser humano. Por eso escribe: "No busques fuera de ti; entra en ti mismo, y hallarás la verdad". En un ejercicio de introspección (autoconocimiento), lo primero que descubrimos es que podemos dudar de todo menos de que dudamos. San Agustín anticipa a Descartes al afirmar: "Si fallo, es indudable que existo". Esta reflexión aparece en los mismos términos que el "cogito cartesiano" ("Pienso, luego existo"), sin llegar a convertirse en una de las claves esenciales de la filosofía agustiniana. San Agustín niega la existencia de las ideas platónicas como entes inmóviles, inmutables y eternos. Esto no significa que las ideas no existan de alguna manera, pues San Agustín entiende que las ideas son pensamientos de Dios: belleza, verdad, justicia son modelos que se hallan en la mente de Dios y que fueron utilizados para crear el mundo empírico. Dios emplea las ideas como modelos para imprimirle una forma a la materia. Esta doctrina se llama ejemplarismo. San Agustín llama a las ideas que se encuentran en la mente de Dios "razones seminales". Al mismo tiempo, sustituye la reminiscencia platónica por la iluminación divina. Saber ya no es recordar, sino obtener la iluminación que nos permite conocer la verdad. San Agustín escribe: "Dios, como ser, crea; como verdad, nos ilumina; y como amor, nos atrae y nos da paz".

La existencia de Dios y sus atributos:

Dios es existencia, verdad, bien y amor. En primer lugar, Dios es suma esencia. Es el ser inmutable que creó el universo a partir de la nada. Para definir a Dios, San Agustín se remite al versículo del Éxodo, donde Dios se presenta a sí mismo como "Yo soy el que soy", es decir, Dios es EXISTENCIA. En segundo lugar, Dios nos proporciona un criterio de verdad, garantizando que nuestras percepciones y conocimientos se corresponden con hechos objetivos. En tercer lugar, Dios nos proporciona un criterio moral, definiendo el bien y el mal e imponiendo unos mandamientos de valor universal. En cuarto lugar, solo Dios nos hace felices, porque Dios creó el mundo por amor. San Agustín considera que solo el cristiano que busca a Dios encuentra la felicidad. San Agustín sostiene que Dios es una sola sustancia, pero está compuesta de tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. El misterio de la Trinidad es inasequible a la razón. Dios actuó como Padre de la humanidad y creador del mundo, y como Hijo se hizo hombre para redimirnos del pecado original. El Espíritu Santo permite que la gracia de Dios llegue a los hombres y les inspire, alejándoles del pecado. Dios percibe todas las secuencias del tiempo simultáneamente, pues se halla en la eternidad, donde no hay un antes ni un después. Al igual que San Agustín, Santo Tomás define el mal como ausencia del bien: el mal es una privación, no-ser, carencia. El mal, sobre todo, es una ausencia de Dios.

Descartes (1596-1650)

Nació en Haye-Turena, Francia, y murió en Estocolmo.

Vida:

Hijo de un parlamentario, Descartes estudió en el prestigioso colegio de La Flèche, dirigido por jesuitas. En 1616 se licenció en Derecho, y más tarde ingresaría en una escuela militar, donde realizó estudios de mecánica y física. Durante la Guerra de los Treinta Años, combatió tanto en las filas de los protestantes como de los católicos. Apenas le interesaba la política, y solo mostraba interés por estudiar la trayectoria de los proyectiles y armas de guerra. Sin embargo, la publicación de sus libros le convertiría en una figura pública. Acusado de ateísmo, tuvo que refugiarse en Holanda y más tarde en la corte de la reina Cristina de Suecia. Murió en 1650.

Obra:

Autor de una obra relativamente breve, en 1628 escribe Las reglas para la dirección del espíritu, que nunca llegó a finalizar. En 1637 publica El discurso del método, que en realidad solo es un prólogo a un tratado de dióptrica, geometría y meteoros. Esta obra suscitará las primeras acusaciones de ateísmo. En 1641 aparecen Las meditaciones metafísicas, inspiradas en Los ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola. En 1644 se publican Los principios de la filosofía, y de forma póstuma aparecerán El tratado del hombre, El tratado del mundo y El tratado de las pasiones.

La búsqueda del método:

Descartes consideraba que todas las ramas del saber pueden unificarse en una ciencia única y universal. A fin de cuentas, la física, la ética o la metafísica tienen un objetivo común: la verdad. Si logramos unificar todas las ramas del saber, podremos elaborar una ciencia universal semejante a un árbol cuyas raíces se corresponderían con la metafísica, el tronco con la física y sus tres ramas principales con la mecánica, la medicina y una moral provisional. Descartes es el máximo representante del racionalismo. El racionalismo es una corriente filosófica que se basa en la autonomía de la razón. De alguna manera, la razón adquiere su mayoría de edad con este movimiento filosófico que reduce la figura de Dios a un papel casi insignificante. El racionalismo sería inconcebible sin el Renacimiento, el humanismo, la Reforma luterana y la Revolución científica. El Renacimiento y el humanismo exaltan la dignidad del ser humano, superando el pesimismo antropológico de la Edad Media. La Revolución científica comienza en la Baja Edad Media con Nicolás de Cusa, según el cual el universo tiene un tamaño mucho mayor que el establecido por el modelo geocéntrico. Nicolás de Cusa afirma que en el universo no hay un centro, porque todas las posiciones son relativas. Ya en la Edad Moderna, Nicolás Copérnico lanza la hipótesis heliocéntrica.

Descartes elabora un método basado en cuatro pasos:

  1. Evidencia: No debemos aceptar ningún enunciado cuya veracidad no sea clara e incuestionable. Debemos repensar todos nuestros conocimientos adoptando una duda sistemática.
  2. Análisis: Cuando nos enfrentamos a un problema, debemos dividirlo en partes hasta llegar a unidades indivisibles.
  3. Síntesis: Hay que reconstruir el enunciado que hemos analizado reuniendo de nuevo las partes que lo componen, es decir, que hay que deshacer y rehacer.
  4. Comprobaciones: Hay que estudiar los problemas desde todos los ángulos posibles, superando todas las contradicciones que aparezcan.

El método cartesiano apenas se ha utilizado; la ciencia ha preferido utilizar el método hipotético-deductivo creado por Galileo, que apareció por primera vez en la Escuela de Medicina de Padua. El éxito del método hipotético-deductivo procede de su principio de verificación. Descartes no sometía sus teorías a verificaciones empíricas.

Pienso, luego existo:

La duda sistemática solo puede resolverse mediante el hallazgo de un principio indubitable. Sin embargo encontrar esa evidencia no es sencillo pues el conocimiento humano incurre en el error a menudo. En 1º lugar los sentidos no son fiables, Descartes muestra la misma desconfianza hacia el conocimiento sensible que Platón. En 2º lugar nuestros razonamientos tampoco son infalibles. El conocimiento racional solo puede justificarse por medio de un criterio de verdad que según Descartes en su época aún no se había formulado. En 3º lugar aunque nuestro conocimiento se basara en certezas racionales Descartes señala que tal vez exista un “genio maligno” que nos engaña y nos confunde sistemáticamente. De esta forma Descartes desemboca en un escepticismo radical. Descartes solo encuentra una salida que consiste en afirmar que “puedo dudar  de todo menos de que estoy dudando” “si pienso existo” y no solamente puedo afirmar esto sino que además he obtenido un principio indubitable  que nos servirá de punto de partida y referencia en los casos de incertidumbre. La afirmación “pienso luego existo” se nos presenta con tal claridad y distinción que solo puede ser una evidencia. Todas las ideas claras y distintas son verdaderas.  Además Descartes recorre a dios  para garantizar la certeza de nuestro conocimiento. Dios es la garantía definitiva que resuelve el conflicto del genio maligno. El genio maligno es una figura retorica que refleja la mentalidad de una época donde se contemplaba la posibilidad de que la vida fuera un sueño. Se ha dicho que Descartes incurre en un círculo vicioso pues al cuestionar la veracidad de nuestro conocimiento resuelve el problema afirmando  “que todo lo que conocemos de forma clara y distinta es verdadero”. Este razonamiento constituye una tautología, es decir un argumento falso que resuelve un conflicto por medio de una redundancia, es decir repitiendo con otras palabras lo mismo que se cuestiona.

LA TEORIA DE LAS DOS SUSTANCIAS Descartes acepta la definición clásica de sustancia según  la cual  solo podemos llamar sustancia a lo que existe por si mismo. De acuerdo con esta noción, solo dios merecería el nombre de sustancia. Sin embargo Descartes considera que el alma y el cuerpo también son sustancia  aunque su existencia depende de Dios. Dios seria sustancia infinita y el alma y el cuerpo sustancias finitas- El alma es una sustancia finita cuyo atributo es el pensamiento. El cuerpo es una sustancia finita cuyo atributo es la extensión. El atributo es la esencia de la sustancia y a cada atributo le corresponden unos modos. Por ejemplo: los modos del pensamiento. El cuerpo es una sustancia finita cuyo atributo es la extensión- El atributo es la esencia de la sustancia y a cada atributo le corresponden unos modos. Por ejemplo: los modos del pensamiento sin juzgar, querer, imaginar, sentir.  Los modos de la extensión son únicamente dos: figura y movimiento-reposo. Al señalar que cuerpo y alma constituyen dos sustancias diferentes, Descartes plantea el problema a de la comunicación entre el cuerpo y el alma. Según Descartes el cuerpo y el alma se comunican a través de la glándula pineal. Al igual que Platón, Descartes considera que lo esencial en el hombre es el alma, el pensamiento, la razón y en este sentido coincide con el punto de vista de la tradición cristiana. Por el contrario, Descartes afirma que los animales solo son maquinas y de hecho fue uno de los pioneros en experimentación animal y junto con Pascal.

LA MÁQUINA DEL UNIVERSO Descartes describe al universo como una maquina compuesta por materia y movimiento. Según Descartes en el universo no existen átomos o partículas indivisibles, pues considera que la materia puede dividirse indefinidamente, no existe tampoco el vacio pues el movimiento necesita un medio por el que desplazarse. Ese medio es el ETER (el 5 elemento). Además Descartes excluye la posibilidad de que exista una fuerza de atracción entre los cuerpos de forma que en ningún caso aceptara la existencia de la gravedad. Descartes explica el movimiento por el contacto entre los cuerpos en un espacio lleno de éter, y cuando el movimiento no puede explicarse con esta hipótesis recurre a Dios. Dios le radio el primer impulso al universo y mantiene su funcionamiento mediante una intervención constante en los fenómenos que se producen en el cosmos. Descartes afirma que hay 3 grandes leyes en el universo: 1”Cada cosa permanece en el estado en que se encuentra si nada lo cambia” Por primera vez se formula el principio de inercia. 2”Todo cuerpo que se mueve tiende a continuar su movimiento en línea recta”: Al considerar que los movimientos naturales eran circulares, Galileo no pudo descubrir el principio de inercia. 3”Si un cuerpo que se mueve encuentra a otro más fuerte que él, no pierde nada de su movimiento y si encuentra otro mas débil que puede ser movido por el pierde tanto movimiento como trasmite”. Esta leu se llama ley de conservación del movimiento.

EL FEDÓN El Fedón  , es una obra que data del periodo de madurez de Platón (hasta el 370 a.C) escrita por el filoso griego Platón , nacido en Grecia en el 427 a.C ,hijo de los aristócratas Aristón y Perictione ,en esa época Grecia era un conjunto de ciudades estado independientes unas de otra política , económica y socialmente pero vinculadas por medio del lenguaje (griego) y algunas tradiciones religiosas , durante su vida trascurrieron hechos históricos de gran importancia como las Guerras medicas (490a.C), la época de decadencia de Atenas (una de las principales polis griegas , era Atenas y Esparta) , socialmente las polis griegas eran sociedades agrarias , pobres , dedicadas intensamente al comercio con los pueblos Etruscos entre otros , a través de este medio expandían sus costumbres y las contagiaban  al igual  que sus conocimientos , la sociedad era esclavista dividida en ciudadanos , meteos y esclavos , era una sociedad democrática (Atenas) y militarizada la de Esparta , con gran esplendor cultural (tragedias Sófocles , escultura praxíteles y arquitectura (ordenes jónico , dórico y corintio),  en cuanto al contexto filosófico existente estaban la escuela de Atenas : Retorica (sofistas) , matemáticas (Euxodo), y filosofía Academia de Platón (384a.C)

Platón tuvo tres antecesores que influyeron en el positivamente:  Heráclito de Éfeso: decía que el ser es la totalidad de lo real, es un devenir incesante que cambia continuamente  (“nadie se baña dos veces en el mismo rio “ , ya que tanto el agua como la persona cambian) Otro pensador que le influyo y que era contrario a las ideas de Heráclito del ser era  Parménides de Elea: que decía que el ser era inmutable e inamovible, que no podía cambiar no transformarse. Por ultimo también cabe destacar la influencia de un último pero no menos importante : Pitágoras :  que le transmitió las ideas de la preexistencia del alma (el alma existía antes del cuerpo , estas vivían en el mundo sensible, junto al bien y al mal,  como posteriormente dirá Platón y a causa de que cometieron un pecado o  falta (Según San Agustín el Pecado original) fueron condenadas a encerrarse dentro del cuerpo y si pasan una vida buena sin hacer el mal , dominando siempre la parte irascible serán libres de volver al mundo sensible o de las ideas, sino se quedaran perpetuamente encerradas hasta que lo logren , posteriormente también hablara Platón de la reminiscencia o anamnesis (el alma ya tiene unos conocimientos adquiridos dentro , ya que a vivido varias vidas y por tanto el saber es recordar lo ya  aprendido , pero que al ser encerrada en la “cárcel” del cuerpo pierde lo que sabía).

También le trasmite la idea de la necesidad de llevar una vida ascética, dedicada al estudio de la filosofía (que llega a definir Platón como la preparación para la muerte, algo que no venían con miedo puesto al haberse dedicado a la vida ascética y  a la mente su alma seria libre y regresarían al mundo de las ideas) y  la mente, alejada de los placeres banales 

Volviendo al Fedón cabe decir que es su obra de mayor importancia, que trata del relato de un dialogo entre Felón, Sócrates  y el pitagórico Equécrates  Que al ser pitagórico es partidario de las ideas de llevar una vida ascética y de la preexistencia del alma. En esta obra Platón expone sus ideas por boca de Sócrates (quién fue su maestro hasta la muerte, aunque en ese preciso momento de sus últimos minutos Platón no estaba allí) que está en su lecho de muerte, situado en su celda donde espera para tomar la copa de cicuta y dejar este mundo, se trata de un dialogo de madurez , que no es definitivo puesto que todos los pensamientos nunca dejan de evolucionar y por eso las teorías expuestas están sujetas a autocritica y a cambios. Principalmente trata los temas de la inmortalidad del alma  teniendo en cuenta la reminiscencia /anamnesis y la trasmigración del alma dependiendo de si esa vida ha sido buena (uso principal de la razón) o mala (dejándose llevar por los placeres (parte concupiscible) en cuyo caso el alma queda incompleta y necesita volver a pasar otra vida en otro cuerpo)  y es un ejemplo del método dialectico , este consta de 3 partes, pasos: Docta ignorancia: “solo sé que no sé nada”  Ironía: desmontar con preguntas los argumentos del contrario  y demostrar su equivocación llevándole a “encerronas”, se describe a sí mismo como el “tábano de Atenas” Mayéutica: (arte de parir), con este método consideraba que ayudaba a parir ideas, método que consiste en conducir a la verdad mediante preguntas guiadas

Aristoteles:Nace en Estagira (Macedonia), cuidad griega , que como todas las ciudades griegas era una polis , ciudad-estado , unidas unas a otras en cuanto al idioma y algunos ritos religiosos pero desvinculadas social , política y económicamente,  nace en el 384aC hijo de Nicómaco, médico personal de Filipo II  , fue preceptor de Alejandro Magno , con quien mantuvo una extraordinaria relación hasta que Alejandro decidió extender la nacionalidad griega a la gente de las colonias nuevas recién conquistadas , esto no le parecía bien a Aristóteles , puesto consideraba que existían 2 tipos de personas , los Griegos y los barbaros (extranjeros) que por supuesto al igual que las mujeres carecían de derechos y solo eran merecedores de llamarse humanos los Griegos y a causa de esto se distancio su amistad.Estudio durante 20 años en la academia de Platón y tras la muerte de este se pensó que sería director de la misma pero cedió dicho puesto a su sobrino. Tras esto creo su propia academia llamada el Liceo  y sus alumnos se llamaran los peripatéticos. En su escuela (El Liceo) las matemáticas no eran el centro de los estudios sino que estaban más enfocados a las ciencias naturales, se consideraba a sí mismo un biólogo,   fue el primero en afirmar que el murciélago era un mamífero y fue tomado como maestro por científicos como Charles Darwin. Tras la muerte de Alejandro Magno (323a.C) sus partidarios fueron perseguidos así que tuvo que huir a Calcis donde permaneció hasta el colofón (final) de su vida. Durante su época se dieron varios hechos de calado histórico importante: vivió el esplendor de las polis griegas durante el mandato de  Pericles, tras la victoria en las guerras médicas, aunque por otra parte también vivió la decadencia Ateniense  cuando fueron derrotados por Esparta en las guerras del Peloponeso, además del auge de Macedonia y el imperio de Alejandro magno su discípulo. En cuanto a la sociedad vivió en una sociedad igual a la de Platón , agraria , pobre muy dedicada al comercio, sobre todo al marino (despotismo) , vivió en una sociedad democrática  (Atenas)  mientras que militarizada en Esparta aparte de un gran esplendor cultural tanto arquitectónicamente : ordenes : dórico, jónico y corintio, como en escultura : praxíteles  y las tragedias de Sófocles . En cuanto al contexto filosófico había varias escuelas: de retórica (sofistas), de matemáticas (euxodo) y de filosofía la academia de Platón a la que asistió durante 20 años.

F//Uno de sus preceptos es que  cada cosa tiene una finalidad  , así como la finalidad humana es conocer la verdad para así llevar una vida buena , gracias al conocimiento que le otorga sabe la verdad , por esta razón los filósofos viven mejor que los demás seres humanos puesto que conocer mejor la verdad ya que se dedican a ello , conocer la verdad es el fin del filosofo, que al conocerla será el ser humano más feliz y satisfecho por haber cubierto su finalidad, ocuparse de conocer los principios y causas universales e inmutables, por ello en su investigación se refiere al ser (el ser, tanto en los humanos como en los animales es el todo constituido por la forma y la materia , también cabe distinguir entre el acto (lo que es actualmente) y la potencia (lo que puede ser , hipotéticamente)  esto le lleva a Aristóteles a explicar el movimiento como paso de la potencia (lo que puede ser – hipotéticamente ) a el acto (lo que es actualmente).

Hilemorfismo: todas las cosas están constituidas por  2 principios,  la materia y la forma, también hay que distinguir entre el acto y la potencia, esto le conduce a la investigación del movimiento (paso de potencia al acto). Causas del movimiento:  son cuatro : material , formal (intrínsecas : propiedad del sujeto ) componente básico de todas sustancia ,  dos principios uno material y pasivo, activo y estructural el otro, que inseparablemente forman un todo individual (la sustancia y las causas finales (extrínsecas , ajenas al sujeto , exteriores). El resultado de las investigaciones es la teoría hile mórfica: explicación de la realidad a partir de  la unión de las 2 causas materia y forma.

Dice que una parte de la realidad es el ser humano , la sustancia del ser humano , ese animal curioso y  , social , dotado de  razón y palabra , compuesto por cuerpo y alma , de materia y forma que quiere conocer y vivir  .El ser humano conoce tanto lo contingente como lo necesario e inmutable , por eso es necesario distinguir entre el saber teórico , que tienen por objetivo lo inmutable y saber practico que conoce lo contingente , además hay un tercer saber: el productivo , ligado a lo contingente y propio de la técnica (contingente : todo aquello que puede ser bien o no ser) .El saber teórico y el practico difieren tanto en objetivos como en métodos , saber teórico como saber demostrar mientras que el practico es un saber vivir aquel es preciso y enseñable , tiene por objeto lo universal , el que conoce lo particular no puede ser tan preciso  ni tan riguroso y no es enseñable (el practico) ,el primero emparentado con la reflexión, el segundo con la acción(no productiva) , ambos tiene un punto de relación , saber practico humano consiste en realizar la virtud (arete) , excelencia de la vida individual (y ese objeto de la ética) o social (objetivo de la política).

“La Política” es una de las últimas obras de Aristóteles, la cual pertenece a las obras esotéricas. “La Política” de Aristóteles es una obra en la cual se reflejan diversos temas donde se describen y analizan la vida en común de la ciudad y de los ciudadanos.

El tema principal de la obra es la libertad y los derechos entre los bárbaros y los griegos, donde Aristóteles dice que los bárbaros nunca debían disfrutar de los mismos derechos que los griegos y mucho menos en convertirse en ciudadanos. Aristóteles a pesar de ser extranjero, defiende la teoría, que la ciudadanía griega solo debe corresponder a los que nacieron en la Hélade, también se hace referencia al estudio de las diferentes formas de gobierno donde Aristóteles se inclina a la monarquía democrática, pero considera que las formas de gobierno deben estar sujetas a las circunstancias. Por otro lado el tema principal del fragmento hace referencia a la complementariedad entre la mujer y el hombre, donde se explica que la inteligencia es gobernante por naturaleza, menciona también que la familia donde en el texto se refiere a “la casa”, es una comunidad natural constituida para satisfacer las necesidades vitales. Aristóteles hace referencia a “pero entre los bárbaros, la hembra y el esclavo tienen la misma posición”, es aquí donde se está refiriendo a que ambos no tienen el mismo elemento gobernante por naturaleza ya que no reconoce ninguna clase de derechos a esclavos, extranjeros y mujeres. El texto se divide en tres partes: la introducción desde la línea 24 a 35 nos habla sobre “el que es capaz de prever con la mente, es un jefe por naturaleza y un señor natural, y el que puede con su cuerpo realizar estas cosas, es súbdito y esclavo por naturaleza”, es por eso que al señor y al esclavo le interesa lo mismo. El conflicto de este texto está ubicado entre las líneas 36 a 54 donde se compara a las mujeres con un buey de labranza. Por último el texto termina mencionando al gobierno de los dioses de la línea 55 a 67. La mayor diferencia entre Platón y Aristóteles en cuestiones políticas se encuentra en el contraste entre una filosofía utópica y una filosofía  realista. Para Aristóteles la política es el arte de lo posible y nunca podrá aspirar a crear una sociedad perfecta.

Las obras de Aristóteles se dividen en obras exotéricas y obras esotéricas. Las obras exotéricas eran obras con forma de dialogo, de las cuales la mayoría se han perdido en su totalidad; y las obras esotéricas son los apuntes que Aristóteles formulaba para dar sus clases, fueron reagrupadas por temas en el año 60 a.c. por Andrónico de Rodas el cual ordenó los manuscritos y les puso diferentes títulos .En las obras esotéricas diferenciamos “La Física”, “La Lógica”, “La Ética”, “La Política”, “La Estética” y “La Metafísica”. El tema principal de la obra es la virtud, Aristóteles define la virtud como un término medio entre dos vicios, uno por exceso y otro por defecto. El término medio no se trata de un término medio aritmético, sino de un término medio relativo a nosotros, el cual establece moderación (prudencia) de acuerdo con las circunstancias.  Según Aristóteles la virtud solo se adquiere a través del hábito y las costumbres. Aristóteles distingue entre virtudes éticas, las cuales están relacionadas con las emociones, como el valor, la generosidad; y las virtudes dianoéticas o intelectuales las cuales están relacionadas con los conceptos como la sabiduría, la prudencia. En cualquier caso la ética aristotélica tiene un carácter esencialmente práctico.  El tema principal de dicho fragmento hace referencia al término medio y afirma que todo conocedor evita el exceso y el defecto buscando así el término medio relativo a nosotros. El término medio es el que modera al exceso y al defecto buscando el equilibrio entre ambos. En cuanto al contraste filosófico, Aristóteles discrepa con Platón en cuanto a la identidad del bien, pues estima que el bien es múltiple y diverso. La ética aristotélica está orientada  a la felicidad, pero no coincide con el placer ni los bienes materiales sino con el ejercicio de la razón. Es por tanto una ética eudemonista.

Entradas relacionadas: