Tiempo y espacio de la obra los cachorros

Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Lengua y literatura

Escrito el en español con un tamaño de 7,19 KB

LOS CACHORROS: SIMBOLISMO

La novela de “Los cachorros” es publicada por Mario Vargas Llosa en 1967, pertenece a su primera etapa basada en una narrativa realista donde trata de denunciar la injusticia y la corrupción de la sociedad. El título de la novela designa al grupo homogéneo de adolescentes en el que Cuéllar busca integrarse. Es un americanismo usado despectivamente para expresar la mala educación.

La vida de los miraflorinos transcurre entre la asistencia a clase, los amigos y los juegos y el deporte. El dominio de la jerga deportiva confiere a las acciones un carácter de “acto mágico”. Aquí el fútbol se erige en mito. Los otros elementos míticos son el machismo y la posesión de objetos.

El apodo de Cuéllar, Pichula o Pichulitaàse utiliza para designar el pene de los niños, por eso, que lo denominen así tiene connotaciones negativas, pues es precisamente lo que él no tiene. Es provocador y ridiculizante.

El perroà simboliza el cambio, representa el instinto animal del hombre, es la agresividad de la sociedad burguesa hacia lo diferente.
Judasà el nombre del perro, en la tradición cristiana, simboliza la traición; Cuéllar se convierte en un “Cristo traicionado” e este huerto de los Olivos que es el colegio religioso. La castración es la muerte simbólica de Cuéllar: muere el individuo. Lo individual debe ser sacrificado para que prevalezca lo colectivo, la sociedad burguesa. Cuando Judas es sacrificado en su lugar aparecen los cuatro conejos blancos que simbolizarían los cuatro amigos. Se ha camuflado la bestia bajo la imagen inofensiva de estos animalitos.

Los cachorrosàrepresentan a los hijos que están integrados en la sociedad para llegar a formar parte de ella. Son inmaduros e incompletos.

Teresaà se confunde con una mariposa. Ambas son bellas, rápidas y caprichosas. Por otro lado la mariposa puede identificarse con Cuéllar, la castración se relaciona con el apachurramiento de la mariposa. Al final del capítulo, Teresita ve otra mariposa, esto se relaciona con el abandono de Cuéllar y el comienzo de la relación con Cachito. Cuéllar y la mariposa comparte las mismas carácterísticas: vulnerabilidad, fragilidad y amor por la libertad.

El buitreà relacionado con la digestión. Cuando Cuéllar se emborracha, empieza a vomitar y la voz colectiva “buitreándose”, que significa una referencia al pasado que no es capaz de digerir. Buitrear puede ser interpretado por traicionar. La palabra traición es importante en Vargas Llosa y representa la relación edípica hacia su padre. El buitre huele la muerte a gran distancia: elemento premonitorio y anticipador de la muerte de Cuéllar.

El marà aporta seguridad al protagonista, le permite desahogarse y arrojar su ira, exhibir su valía y hombría. También elemento amenazador, puesto que arriesga su vida y lo desafía. En clave psicoanalítica representa la figura de la madre.

Las tablas del surf; los cochesà representan la potencia sexual. Símbolo machista de virilidad.
La escopeta, pistola y revólverà símbolos fálicos y de poder.
Cachitoàdiminutivo de Cacho (cuerno), alude a la situación simbólica.
Capónà una calle donde hay muchos restaurantes chinos, alude a la condición de castrado de Cuéllar.

LOS CACHORROS: EL TIEMPO Y EL ESPACIO

La novela de “Los cachorros” es publicada por Mario Vargas Llosa en 1967, pertenece a su primera etapa basada en una narrativa realista donde trata de denunciar la injusticia y la corrupción de la sociedad. El título de la novela designa al grupo homogéneo de adolescentes en el que Cuéllar busca integrarse. Es un americanismo usado despectivamente para expresar la mala educación.

El tiempo del relato abarca unos veinticinco años aproximadamente. Narra la historia de un grupo de personajes desde su ingreso en el colegio hasta que sus hijos viven la misma circunstancia. Se produce una condensación del tiempo narrativo. La cronología de los capítulos es asimétrica, el tiempo que comprenden no es igual:

  • Capítulo I: un periodo de unos dos años: de los ocho a los diez años.
  • Capítulo II: abarca unos cinco años: de los diez a los quince.
  • Capítulo III: comprende unos cinco años.
  • Capítulo IV: unos dos años.
  • Capítulo V: otros dos.
  • Capítulo VI: aunque no esté fijado exactamente, abarca unos diez años.

La novela comienza con una generación y acaba con otra, lo que crea una sensación circular de la novela aunque el tiempo es lineal, teniendo en cuenta que hay frecuentes saltos temporales. El tiempo histórico es concreto, la década de los 50, definido por acontecimientos de tipo social como la llegada de Pérez Prado y por referencias a figuras de moda como Elvis Presley.

El espacio protagonista es el barrio de Miraflores en Lima, incomunicado con otros estratos sociales, el mundo de los privilegiados. El Champagnat es el núcleo de la acción. Las relaciones de amistad están determinadas por los vínculos que establece el colegio. Es un microcosmos integrado por los alumnos que viven en zonas próximas. Miraflores es el ámbito donde estos jóvenes desarrollan su vida. El paso del tiempo lleva consigo una serie de desplazamientos. En la adolescencia el interés por el fútbol decae, sustituido por fiestas y chicas, lo que determina algunos distanciamientos llegando incluso a visitar otros barrios. Cuando empiezan a cortejar a las chicas, el espacio de reuníón será el parque Salazar.  Al final del relato se esboza un nuevo protagonismo del Champagnat.

Existen también espacios imaginados, lugares de evasión adonde Cuéllar escapará creando un mundo imaginario. Esta actitud evasiva va a ser constante en el personaje desde que ocurre el accidente y lo trasladan a la Clínica Americana para recuperarse de las heridas. Una primera huída la realiza en la cama del Hospital, identificándose con el Ágüila Enmascarada, personaje de cómic con poderes de superhombre. En otros momentos, también se evade del espacio real, como cuando, en una conversación del grupo y con las chicas, trata temas más trascendentes a los que el grupo no estaba acostumbrado. Otro modo de evasión era distanciarse de los demás queriendo salir de la rutina en la que todos estaban sumidos e imaginando un futuro mejor para Miraflores. Espacios reales como el mar, Tingo María (lugar al que va a sembrar café), son otros lugares reales que sirven de evasión al protagonista.

Entradas relacionadas: