Encandilamiento Platón

Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Filosofía y ética

Escrito el en español con un tamaño de 6,15 KB

Alma:


Es la esencia del hombre: todo lo que es el hombre está en su alma.
Tiene una estructura tripartita: alma racional, irascible y concupiscible. Su estado natural es la separación del cuerpo. La relación entre ambos no sólo no es esencial, sino que es anti-natural (el cuerpo como “cárcel del ama”). Por eso el alma debe dominar y dirigir al cuerpo.

Ámbito inteligible/ Ámbito visible:


Platón divide su mundo en dos ámbitos completamente distintos:

a) el ámbito inteligible, formado por los seres inteligibles (entidades matemáticas e Ideas). Es objeto de conocimiento de la episteme (con sus dos niveles: diánoia y noésis);;

b) el ámbito sensible, constituido por los seres sensibles (seres físicos y sus imágenes) y que no es más que una copia imperfecta del anterior. Es objeto de conocimiento de la doxa (con sus dos niveles eikasía y pistis).

Cadenas:


Todo lo relacionado con aquello que nos ata al mundo material: deseos, sensualidad, corporeidad, ignorancia.

Caverna: Mundo sensible, o sea, el mundo de los sentidos y del cambio permanente. En él solo puede hacer doxa y nunca episteme.

Cosas de arriba:


Los objetos reales del exterior de la caverna. O sea, se refiere a las Ideas y a las entidades matemáticas.

Descenso de nuevo a la caverna:


El que ha accedido a una vida y conocimiento superiores se compadece de la triste existencia de sus antiguos compañeros, de ahí que decida descender para enseñarles la verdad. Es la imagen del filósofo que decide gobernar en vez de habitar en “la isla de los bienaventurados”, constituida por aquellos que han alcanzado la verdad. Ese descenso requiere también una escalonada adecuación de la vista, y por ello se muestra desmañado y es objeto de burlas, sobre todo cuando afirma algo que les resulta ininteligible: que la verdadera realidad está más allá de la caverna.


Encandilamiento:


Platón describe dos tipos de encandilamiento que todos hemos tenido ocasión de experimentar: el que ocurre cuando se va de lo luminoso a lo oscuro y viceversa. El efecto es muy parecido, pero son completamente diferentes: el primero es motivo de admiración, pues es signo de haber accedido a una existencia superior, mientras que el segundo de apiadamiento. Es obvio que Platón tiene muy en mente el proceso de Sócrates, en el que este se comportó de manera torpe ante la caverna de los tribunales, por su falta de costumbre en disputar sobre sobras de justicia ante quienes jamás habían contemplado la Justicia en sí.

Escarpada y empinada cuesta:


El costoso y difícil tránsito de la opinión al conocimiento. Por tanto, se refiere a la dialéctica. También representa el proceso mismo de educación.

Ideas:


Son realidades eternas, inmateriales e inmutables. Constituyen la causa y la esencia del mundo sensible (las cosas materiales participan o imitan a las Ideas). Existen por sí mismas de manera independiente de los hombres, que se limitan únicamente a descubrir su existencia. Todos los ámbitos de la filosofía platónica tienen como punto de partida la teoría de las Ideas.

Idea del bien


Cúspide de toda filosofía platónica. No solo esta en una situación de preeminencia ante las demás ideas sino que además es responsable de la esencia de cada idea sin ser ella misma esencia.

Inteligencia:


facultad de conocer intuitivamente las ideas. A través de ella el alma racional culmina el proceso de conocimiento.

Liberación de las cadenas


Se nos describe dicha liberación a partir de un elemento externo y de manera gradual. Se está refiriendo a la educación que nos concede herramientas para dominar las tendencias más espontaneas y embrutecedoras para desistir la seducción de lo material y sensible.


Luz de un fuego


Platón se refiere a la luz del sol, responsable de toda visibilidad en la caverna. El sol ejerce una función en el mundo sensible análoga a la que cumple el bien en el mundo inteligible. Hay que estar atentos al hecho de que el sol aparece de dos maneras en la alegoría: como elemento imaginado y como elemento real.

Mirar las cosas de arriba


Con esta expresión, platón se refiere al verdadero conocimiento que es tal por tener como objeto lo auténticamente real, aquello que no cambia: las entidades mate4maticas y las ideas.

Necesidad de acostumbrarse a la luz antes de mirar a los objetos mismos


Platón piensa en el cultivo de las matemáticas como preparación necesaria de la dialéctica. Recuérdese la inscripción que hizo colocar a la puerta de su Academia “no entre nadie aquí que no sea geómetra”

Prisioneros


Alude a la condición misma del hombre al estar inexorablemente apresado por los sentidos. La mayoría de la humanidad permanece toda su vida presa del error, de los prejuicios, de la manipulación, mientras que solamente una minoría consigue liberarse y acceder a una existencia superior gracias al conocimiento del bien.

Sabiduría existente allí


La opinión, un mero saber acerca de sombras de lo real. Es el único “conocimiento” posible en la caverna, con dos niveles: conjetura y creencia. La verdadera sabiduría esta fuera de la caverna.

Señor de ésta


El señor de la luz, o sea, el sol.

Sombras


Imágenes, nivel inferior de realidad. Se corresponde en el plano del conocimiento con el nivel inferior de la doxa: la eikasia, que se ocupa de las copias de la realidad.

Verdad:


es considerada desde una perspectiva ontológica, es decir, como una propiedad objetiva de la realidad. No se refiere, por tanto, a la validez del conocimiento que posee un sujeto. Es un sentido que pervive hoy día en nuestra manera de hablar, por ejemplo cuando decimos “es un verdadero padre”. El bien es causa tanto de la verdad como de la ciencia. Por tanto, la verdad es algo que pertenece a los seres inteligibles en sí mismos.

Entradas relacionadas: