Dieta equilibrada y ejercicio físico
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Drogas y alcohol: efectos sobre el organismo.
El cannabis, la cocaína, la heroína y las drogas llamadas de diseño, que se presentan en forma de pastillas, constituyen las grandes enemigas de la libertad de las personas. Debemos incluir el alcohol entre ellas. Estos socavan el organismo, afectando a muchos órganos y sistemas del cuerpo y a la mente.
Las drogas, todas ellas, son muy peligrosas porque cuesta mucho dejarlas. Hay que evitarlas, por tanto, a toda costa y aprender a decir que no, sin dejarse influir por las modas, por la presión de los amigos consumidores…
-Mitos
Ayudan a divertirse, incluso no hay diversión sin alcohol o drogas. Es falso. También es falso. ya que la presencia de comida en el estomago hace un poco más lenta la absorción del alcohol, pero éste acaba igualmente en la sangre y se distribuye luego a todos los órganos, produciendo el mismo daño. No mejora las relaciones sociales, porque hacen hablar mucho pero escuchar poco. También es falso: aunque parezca que pueden reducir momentáneamente los síntomas de ansiedad y nerviosismo. Sólo llegan a ser alcohólicos o drogadictos los que ya tienen Problemas psicológicos.
Esto es totalmente falso, ya que la única condición para desarrollar alcoholismo o drogadicción es habituarse a su consumo. Los problemas psicológicos vienen después.
Producen desinhibición. Si se come antes no hace daño. Ayudan a superar la tristeza y la ansiedad.
En sus inicios, las drogas provocan mareos, vómitos, dolor de cabeza
y de estómago. Ésta es la respuesta de alerta del organismo ante sustancias dañinas. La persona que se habitúa apenas nota esos efectos. Su organismo se acostumbra poco a poco, y deja de sentir las sensaciones de las primeras veces. Las personas que desarrollan tolerancia a una droga, tienen mayor probabilidad de desarrollar una dependencia, porque necesitan cada vez más cantidad y no sienten la necesidad de parar al no percibir los síntomas de alerta.
El consumo habitual impide poder decidir libremente cuánto, cuándo y cómo beber o tomar drogas. La drogadicción es el punto final de un proceso que se inicia a veces con el consumo de sólo los fines de semana.
El ejercicio físico no será efectivo, con posibilidades de lesiones, y sobre todo perderá su capacidad de ser placentero y de disfrutar con el cuerpo en movimiento. Reduce la fuerza, la potencia, la resistencia muscular, la velocidad, y el rendimiento cardiovascular. El alcohol, en particular, provoca un efecto dañino sobre la coordinación, el tiempo de reacción, la precisión y el equilibrio, y dificulta la regulación de la temperatura corporal durante el ejercicio prolongado.
La postura corporal: el equilibrio pélvico
La característica principal de la postura humana es que hay que mantener un constante estado de equilibrio.
Dieta equilibrada y ejercicio físico
Todas las sustancias que se ingieren, a excepción de las medicinas, constituyen la dieta. Una correcta nutrición es aquella que se basa en la dieta equilibrada.
La dieta es equilibrada cuando permite el mantenimiento de un adecuado estado de salud, a la vez que capacita para la realización de actividad física.
Los alimentos están constituidos por sustancias nutritivas. Hay seis grandes grupos de estas sustancias, denominadas nutrientes: hidrate de carbono, proteínas, grasas, sales minerales, vitaminas y agua. A estos debemos sumar la fibra alimentaria como componente esencial que facilita el tránsito intestinal de los alimentos.
Los nutrientes los podemos agrupar en tres grupos,
Dependiendo de la función que cada uno tiene en el organismo:
Los principios inmediatos, aportan la energía necesaria para el desarrollo de la actividad física y de las funciones vitales. Son las proteínas, necesarias para el crecimiento y la renovación de los tejidos, y las sales minerales, que contribuyen a regular los procesos corporales. Intervienen en los mecanismos de defensa del organismo. Los forman las vitaminas y las sales minerales, y algunos tipos de proteínas.
Los alimentos se pueden agrupar en cuatro grandes grupos, en función de sus características nutricionales, tal como ves en el gráfico.
Cereales. Pan, pastas, arroz, unos 500 g al día.
Carnes, pescados y huevos, unos 200 g por día. Frutas y verduras, alrededor de 500 g por día.
Una dieta equilibrada será el resultado de la combinación de alimentos de los cuatro grupos en proporciones adecuadas.
Las necesidades energéticas del organismo dependen de varios factores tales como la edad, el sexo, el tamaño corporal y el tipo de actividad. En una dieta equilibrada la energía necesaria será aportada en las siguientes proporciones:
Las proteínas: del 10 al 15% Las grasas: del 30 35% Los hidratos de carbono: del 50 al 60%
La energía es necesaria tanto para la actividad física habitual o la deportiva, como para cubrir las necesidades de las funciones vitales del organismo, o que llamamos metabolismo basal.
La persona de más peso necesita mayor cantidad de energía ya que ha de mover una mayor masa corporal. El aporte de alimentos debe compensar los gastos de energía para que el peso corporal permanezca estable.
El agua como nutriente es una sustancia esencial para el mantenimiento de la vida. Es el medio en que se producen la mayoría de las - reacciones químicas, desempeñando un importante papel en el transporte de sustancias, y como sistema de refrigeración y eliminación de sustancias de desecho.
El agua supone un 60% del peso corporal, pero el organismo tiene una - reserva muy pequeña de ella, por lo que estará presente en la alimentación, tanto ingerida directamente, como a través de los alimentos sólidos. Las verduras, las frutas y la leche tienen un contenido de agua superior al 80%.
El trabajo muscular produce calor, y para que la temperatura corporal no aumente en exceso, disponemos de un mecanismo de refrigeración con agua, que es la transpiración. Las necesidades de agua de la persona son de tres litros al día, de los que un litro y medio lo aportan los alimentos y el otro litro y medio debe ser ingerido. Cuando no se respeta esta necesidad y se realiza ejercicio físico de alta intensidad o larga duración, o las condiciones ambientales son negativas (excesivo calor y humedad), se puede producir la deshidratación, experiencia desagradable y nada aconsejable para el organismo. Para evitar esta situación, se debe beber antes, durante y después del ejercicio físico, y no cuando se tenga la sensación de sed, ya que esta aparece cuando ya no es posible recuperar totalmente las pérdidas de agua.
El cannabis, la cocaína, la heroína y las drogas llamadas de diseño, que se presentan en forma de pastillas, constituyen las grandes enemigas de la libertad de las personas. Debemos incluir el alcohol entre ellas. Estos socavan el organismo, afectando a muchos órganos y sistemas del cuerpo y a la mente.
Las drogas, todas ellas, son muy peligrosas porque cuesta mucho dejarlas. Hay que evitarlas, por tanto, a toda costa y aprender a decir que no, sin dejarse influir por las modas, por la presión de los amigos consumidores…
-Mitos
Ayudan a divertirse, incluso no hay diversión sin alcohol o drogas. Es falso. También es falso. ya que la presencia de comida en el estomago hace un poco más lenta la absorción del alcohol, pero éste acaba igualmente en la sangre y se distribuye luego a todos los órganos, produciendo el mismo daño. No mejora las relaciones sociales, porque hacen hablar mucho pero escuchar poco. También es falso: aunque parezca que pueden reducir momentáneamente los síntomas de ansiedad y nerviosismo. Sólo llegan a ser alcohólicos o drogadictos los que ya tienen Problemas psicológicos.
Esto es totalmente falso, ya que la única condición para desarrollar alcoholismo o drogadicción es habituarse a su consumo. Los problemas psicológicos vienen después.
Producen desinhibición. Si se come antes no hace daño. Ayudan a superar la tristeza y la ansiedad.
En sus inicios, las drogas provocan mareos, vómitos, dolor de cabeza
y de estómago. Ésta es la respuesta de alerta del organismo ante sustancias dañinas. La persona que se habitúa apenas nota esos efectos. Su organismo se acostumbra poco a poco, y deja de sentir las sensaciones de las primeras veces. Las personas que desarrollan tolerancia a una droga, tienen mayor probabilidad de desarrollar una dependencia, porque necesitan cada vez más cantidad y no sienten la necesidad de parar al no percibir los síntomas de alerta.
El consumo habitual impide poder decidir libremente cuánto, cuándo y cómo beber o tomar drogas. La drogadicción es el punto final de un proceso que se inicia a veces con el consumo de sólo los fines de semana.
El ejercicio físico no será efectivo, con posibilidades de lesiones, y sobre todo perderá su capacidad de ser placentero y de disfrutar con el cuerpo en movimiento. Reduce la fuerza, la potencia, la resistencia muscular, la velocidad, y el rendimiento cardiovascular. El alcohol, en particular, provoca un efecto dañino sobre la coordinación, el tiempo de reacción, la precisión y el equilibrio, y dificulta la regulación de la temperatura corporal durante el ejercicio prolongado.
La postura corporal: el equilibrio pélvico
La característica principal de la postura humana es que hay que mantener un constante estado de equilibrio.
Dieta equilibrada y ejercicio físico
Todas las sustancias que se ingieren, a excepción de las medicinas, constituyen la dieta. Una correcta nutrición es aquella que se basa en la dieta equilibrada.
La dieta es equilibrada cuando permite el mantenimiento de un adecuado estado de salud, a la vez que capacita para la realización de actividad física.
Los alimentos están constituidos por sustancias nutritivas. Hay seis grandes grupos de estas sustancias, denominadas nutrientes: hidrate de carbono, proteínas, grasas, sales minerales, vitaminas y agua. A estos debemos sumar la fibra alimentaria como componente esencial que facilita el tránsito intestinal de los alimentos.
Los nutrientes los podemos agrupar en tres grupos,
Dependiendo de la función que cada uno tiene en el organismo:
Los principios inmediatos, aportan la energía necesaria para el desarrollo de la actividad física y de las funciones vitales. Son las proteínas, necesarias para el crecimiento y la renovación de los tejidos, y las sales minerales, que contribuyen a regular los procesos corporales. Intervienen en los mecanismos de defensa del organismo. Los forman las vitaminas y las sales minerales, y algunos tipos de proteínas.
Los alimentos se pueden agrupar en cuatro grandes grupos, en función de sus características nutricionales, tal como ves en el gráfico.
Cereales. Pan, pastas, arroz, unos 500 g al día.
Carnes, pescados y huevos, unos 200 g por día. Frutas y verduras, alrededor de 500 g por día.
Una dieta equilibrada será el resultado de la combinación de alimentos de los cuatro grupos en proporciones adecuadas.
Las necesidades energéticas del organismo dependen de varios factores tales como la edad, el sexo, el tamaño corporal y el tipo de actividad. En una dieta equilibrada la energía necesaria será aportada en las siguientes proporciones:
Las proteínas: del 10 al 15% Las grasas: del 30 35% Los hidratos de carbono: del 50 al 60%
La energía es necesaria tanto para la actividad física habitual o la deportiva, como para cubrir las necesidades de las funciones vitales del organismo, o que llamamos metabolismo basal.
La persona de más peso necesita mayor cantidad de energía ya que ha de mover una mayor masa corporal. El aporte de alimentos debe compensar los gastos de energía para que el peso corporal permanezca estable.
El agua como nutriente es una sustancia esencial para el mantenimiento de la vida. Es el medio en que se producen la mayoría de las - reacciones químicas, desempeñando un importante papel en el transporte de sustancias, y como sistema de refrigeración y eliminación de sustancias de desecho.
El agua supone un 60% del peso corporal, pero el organismo tiene una - reserva muy pequeña de ella, por lo que estará presente en la alimentación, tanto ingerida directamente, como a través de los alimentos sólidos. Las verduras, las frutas y la leche tienen un contenido de agua superior al 80%.
El trabajo muscular produce calor, y para que la temperatura corporal no aumente en exceso, disponemos de un mecanismo de refrigeración con agua, que es la transpiración. Las necesidades de agua de la persona son de tres litros al día, de los que un litro y medio lo aportan los alimentos y el otro litro y medio debe ser ingerido. Cuando no se respeta esta necesidad y se realiza ejercicio físico de alta intensidad o larga duración, o las condiciones ambientales son negativas (excesivo calor y humedad), se puede producir la deshidratación, experiencia desagradable y nada aconsejable para el organismo. Para evitar esta situación, se debe beber antes, durante y después del ejercicio físico, y no cuando se tenga la sensación de sed, ya que esta aparece cuando ya no es posible recuperar totalmente las pérdidas de agua.