La democracia: del gobierno del pueblo a los requisitos

Enviado por Chuletator online y clasificado en Griego

Escrito el en español con un tamaño de 4,45 KB

La democracia

El gobierno del pueblo

En un sistema político democrático, el poder está en manos del pueblo. La palabra democracia proviene de los términos griegos demos (pueblos) y kratos (poder). Esto se debe a que la forma de gobierno democrática fue adoptada por primera vez en Atenas, donde alcanzó su máximo desarrollo hacia el siglo V a.C. La democracia es un sistema de organización social en el que el poder lo tiene el pueblo.

A diferencia de lo que ocurría en otras ciudades donde gobernaban los reyes o los nobles, en la antigua Atenas las decisiones políticas más importantes se adoptaban mediante votación en una asamblea abierta a todos los atenienses. El único requisito necesario para poder participar en la asamblea era ser ciudadano, lo cual en aquella época significaba ser un hombre libre, mayor de edad e hijo de padres atenienses. Esto quería decir que había grandes grupos de personas que quedaban fuera del sistema democrático. Ni las mujeres, ni los extranjeros residentes en la ciudad ni los numerosos esclavos que vivían en Atenas podían tomar parte en las discusiones democráticas.

Sin embargo, y pese a estas importantes limitaciones, el sistema político más abierto e igualitario que existió en la antigüedad, sobre todo si lo comparamos con el modo en que se ejercía el poder en otros lugares por aquella misma época.

El sistema político que adoptaron los atenienses era una democracia directa, porque en ella todos los ciudadanos que lo deseaban podían intervenir y participar en la política. Esto era posible porque Atenas no era una ciudad demasiado grande, y porque a las asambleas no siempre acudían todos los ciudadanos. La época de esplendor de la democracia ateniense coincidió con momentos de auge económico, militar y cultural para la ciudad.

DE SÚBDITOS A CIUDADANOS

Después de una larga etapa en la que la democracia parecía haberse extinguido por completo, el sistema de gobierno democrático reapareció a finales del siglo XVIII. En esta época se desarrollaron dos grandes acontecimientos históricos de enorme importancia: la independencia de los Estados Unidos de América y la Revolución francesa.

Sin embargo, tanto los Estados Unidos como Francia son países mucho más grandes que la antigua Atenas. Los modernos Estados nacionales se caracterizan por tener un extenso territorio y una población muy numerosa, que no se pueden gobernar mediante una democracia directa. Para solventar este problema se propuso desarrollar un sistema diferente, basado en la democracia representativa.

En una democracia representativa, los ciudadanos también participan en las decisiones, pero lo hacen de manera indirecta porque no resultaría práctico convocarlos a todos a una asamblea abierta. Para garantizar la intervención del pueblo se realizan elecciones, en las que los ciudadanos eligen a unos representantes para que actúen en su nombre. Estos representantes son los que se reúnen para deliberar, hacer las leyes y tomar las decisiones en el Parlamento.

Tanto los revolucionarios estadounidenses como los franceses eran muy conscientes de la importancia histórica que tuvo la reaparición de la democracia. A diferencia de lo que sucede cuando gobiernan los reyes, en un sistema democrático las personas pueden participar en las decisiones que les afectan. Cuando el poder está en manos del pueblo, los individuos ya no son súbditos, sino que pasan a ser ciudadanos. Esto quiere decir que las personas han dejado de estar sujetas al poder de otro y han pasado a gobernarse sí mismas, implicándose activamente en la organización y el mantenimiento del orden social.

LOS REQUISITOS DE LA DEMOCRACIA

Para que podamos decir que un Estado es verdaderamente democrático, es preciso que se cumplan una serie de requisitos básicos. En primer lugar debe respetarse el imperio de la ley y la división de poderes. En una verdadera democracia existe igualdad ante la ley porque las leyes son las mismas para todos los ciudadanos y se aplican de la misma manera independientemente de nuestras circunstancias personales. También deben existir elecciones libres con sufragio universal, para que los ciudadanos puedan elegir libremente a sus representantes entre distintos partidos políticos. Además, los derechos de los ciudadanos deben estar reconocidos y protegidos por la ley de forma que se respeten la igualdad, la libertad y la participación de todos.

Entradas relacionadas: