El cuerpo como recipiente del alma
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TEMA 7:
CONCEPCIONES SOBRE EL SER HUMANO
La visión griega
1.El héroe homérico:
No hay distinción para el cuerpo humano entre lo físico y lo psíquico. El término griego Soma→cuerpo muerto. El cuerpo humano es un conjunto de órganos dominados por distintas fuerzas cuyo resultado son los movimientos y las emociones.
El término griego Psiché hace referencia al principio vital, es decir, lo que da vida al cuerpo. Cuando el cuerpo muere, la Psiché abandona el cuerpo. Se entendía también como un doble del muerto que vive en otro lugar, el Hades.
La identidad personal me viene dada por los demás. El sujeto lo recibe de fuera, no es algo que le viene dado con su ser. Las apreciaciones que los demás hacen de nosotros, es lo que constituye nuestra identidad (alegres, valientes, tristes, cobardes, etc.).
La realización personal consistirá en conseguir la excelencia (areté), llevando una vida virtuosa capaz de realizar grandes hazañas. El modelo de virtud lo aportan los héroes mitológicos. Así conseguiremos el reconocimiento de los demás y por lo tanto, una identidad personal.
2.Platón y el cuerpo como cárcel:
Los filósofos presocráticos entienden la Psiché como una entidad espiritual del ser humano, el alma, cuyas carácterísticas son la inmortalidad, la perfección, la razón, la conexión con la divinidad. Mientras que para el cuerpo queda todo lo negativo. El alma vive en el mundo divino, pero si es expulsada de él queda desterrada al cuerpo del cual será liberada cuando muera.
Para Sócrates en todos hay un “genio” o Daimón que actúa como conciencia, pero es la voz de los Dioses que nos advierte de nuestras equivocaciones y nos orienta en la búsqueda del bien, la verdad y la justicia.
Si el alma consigue no contaminarse con el cuerpo, tras la muerte irá con los dioses. En caso contrario, purgará en el Hades o se reencarnará en otro cuerpo hasta que se perfeccione.
3.El Empirismo:
Para los atomistas el ser humano es materia. No existe ningún principio de tipo espiritual. Cuerpo y alma están formados por átomos. Estos consideran que en el alma reside el principio vital, pero a causa de los átomos del alma. Asocian la vida con el calor por lo que los átomos del alma se localizan en las partes más calientes del cuerpo.
Cuando el cuerpo muere, lo que desaparece es la estructura corporal, es decir, cuerpo y alma; pero los átomos que son eternos seguirán existiendo.
A imagen de la divinidad
El politeísmo grecorromano recurre al antropomorfismo para representar a los Dioses. Estos no solo anatómicamente son iguales, sino que están sometidos a los mismos deseos y pasiones.
El judeocristianismo presenta la trascendencia de Dios. El judaísmo dice que es imposible representar a Dios. El cristianismo permite representar a Dios con forma humana pero deja claro que Dios y hombre no se pueden identificar. En ambos casos, respecto al hombre, creen que Dios ha creado al ser humano a su imagen y semejanza, con un cuerpo y un alma inmortal.
El cristianismo afirma que el hombre nace marcado por el pecado original que se borra con el bautismo. El hombre es libre, puede elegir entre el mal o el bien guiado por un principio moral: el mandamiento del amor y el perdón.
“Persona”, derivado del verbo personare. Hace referencia a la capacidad del lenguaje simbólico que tiene el ser humano, elemento que le diferencia del resto de especies animales.
También tiene que ver con la expresión per se unum, que hace referencia a la visión cristiana del ser humano, un todo integral de espíritu encarnado.