Crítica a la Metafísica y al Conocimiento en la Filosofía de Hume

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Hume

Crítica a la idea de causalidad

Hume analiza la causalidad porque es el fundamento de las cuestiones de hecho, en las que se basa la ciencia y todo el conocimiento. Este análisis es crucial ya que gran parte de nuestro conocimiento se basa en las conexiones causales, asumiendo una conexión necesaria entre la causa y el efecto. Hume examina los principios de causalidad, particularmente el principio que afirma que todo lo que sucede tiene una causa (si sucede A, entonces B).

Hume argumenta que no existe una conexión necesaria entre causa y efecto, sino que esta conexión es solo una sensación que proviene del hábito y la costumbre, generada por la repetición de muchas experiencias similares (unión espacio-temporal).

  • El principio de que todo tiene una causa no es válido porque no tenemos una impresión válida de"tod". La experiencia, por lo tanto, debilita el principio de causalidad, ya que no existe una conexión necesaria, lo que a su vez debilita la base del conocimiento.

  • Nos queda un conocimiento probabilístico, reducido al aquí y ahora "hic et nun"). Las cuestiones de hecho no son válidas, ya que se basan en el principio de causalidad.

Crítica a la metafísica

Para los filósofos de la época de Hume, la sustancia es aquello que existe por sí mismo, de forma independiente, más allá de los accidentes, aquello que subsiste al cambio.

  • Hume se pregunta de dónde proviene nuestra idea de sustancia, ya que solo tenemos impresiones de las cualidades, pero no de la sustancia en sí misma. Por lo tanto, la idea de sustancia no es válida.

  • Hume, siendo empirista, argumenta que no es posible el conocimiento de la sustancia, ya que no tenemos una impresión de lo que subyace a los accidentes. Esto socava la base de la ciencia.

  • Por otro lado, Descartes, en su búsqueda de las garantías del conocimiento, descubre la res cogitans (yo), la res infinita (Dios) y la res extensa (el mundo).

— Sin embargo, al analizar la idea del"y", la res cogitans, que es la primera sustancia según Descartes, Hume no encuentra una impresión de sí mismo pensando. No hay una impresión constante del"y", por lo tanto, no es una idea válida.

— En cuanto a la res extensa, el mundo contingente, solo se puede hablar de él en términos del hic et nunc, es decir, el aquí y el ahora, ya que no tenemos una impresión de todo el mundo a la vez. La mente unifica las impresiones creando ideas de las cuales no tiene una impresión directa.

— La idea de Dios: es algo de lo que nunca hemos tenido una impresión, ya que jamás se puede conocer la impresión de un ser necesario. Además, afirmar la existencia de Dios resulta contradictorio para Hume.

Con esto, Hume derrumba el sistema cartesiano, declarando que ninguna de las tres sustancias que suponían la garantía del conocimiento es válida.

Crítica de las demostraciones de la existencia de Dios

1. Santo Tomás

Las cinco vías de Santo Tomás comparten cuatro pasos: se parte de un hecho observable y se aplica el principio metafísico de causalidad.

— Hume argumenta que este razonamiento no es válido porque el principio de causalidad no es válido en sí mismo, sino que se debe a un mecanismo psicológico. No hay una impresión real de la causalidad, sino que se basa en el hábito y la costumbre, donde nuestra mente establece una conexión necesaria.

2. San Anselmo de Canterbury

El argumento ontológico de San Anselmo deduce la existencia de Dios a partir de su esencia. Se parte de la idea de Dios como un ser sumamente perfecto, y como la existencia es un atributo de perfección, entonces Dios existe.

— Hume critica este argumento diciendo que no demuestra la existencia real de Dios, sino solo una existencia ideal. Es una relación entre ideas, y para Hume solo son válidas las cuestiones de hecho basadas en la experiencia.

3. San Agustín

La prueba noetica de San Agustín sostiene que Dios irradia sus ideas en nuestro interior. Sin embargo, para un empirista como Hume, no existen ideas innatas.

Esta postura lleva a Hume al fenomenismo y al escepticismo. No hay conocimiento válido. Sostiene que no podemos conocer el 'noúmeno', es decir, el objeto en sí, sino solo el fenómeno.

El noúmeno es aquello objetivamente real; sin embargo, la realidad solo se puede conocer subjetivamente. Solo podemos hablar de aquello que conocemos, que es el fenómeno. No podemos salir de los límites del conocimiento fenoménico, por lo tanto, no hay conocimiento válido.

Ética

El objetivo de Hume es socavar la metafísica occidental y dar un nuevo fundamento al liberalismo político. La postura ética que defiende es el emotivismo moral, es decir, lo contrario al intelectualismo moral.

— Hume sostiene que un acto o una decisión moral no puede recibir su clasificación moral a partir de la razón, ya que esta no puede conocer la validez de los juicios morales. La ética no trata de lo que es, sino de lo que debería ser.

La razón no sirve de guía para nuestras acciones, ya que es esclava de las pasiones. Hume argumenta que lo bueno es lo que nos causa buenas sensaciones y lo malo lo contrario.

— Sostiene que lo que guía nuestras acciones son las emociones. Este es un emotivismo moral: no podemos deducir lo que debe ser a partir de lo que es. Hume critica las"falacias naturalista" que intentan hacer esto.

Hume se cuestiona si lo que nos causa buenas impresiones es necesariamente bueno, ya que las emociones son subjetivas. Por lo tanto, se pregunta cómo podemos llegar a lo bueno de manera objetiva. Su respuesta se basa en la utilidad: lo que produce más placer al mayor número de personas es el principio universal de la moral. Este principio se basa en la estimabilidad, en pensar no solo en nuestro propio bien, sino en el bien de la humanidad en general.

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