Comentario de texto estatuto real 1834
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Bloqconstruccionyconsolidacióndelestadoliberal.Tema 3Revolución liberal en el reinado de Isabel II.
Carlismo y guerra civil. Construcción y evolución del Estado liberal.El reinado de Isabel II es un período muy complejo en el que se produjeron importantes transformaciones:Ámbito político:El Antiguo Régimen fue definitivamente desmantelado, permitiendo el desarrollo de un estado burgués parlamentario, dirigido por una nueva clase social, la burguésía agraria.Ámbito socioeconómico:Se pusieron las bases del sistema económico capitalista moderno y se produjo el paso de la sociedad estamental a la sociedad de clases.El período estuvo salpicado por guerras civiles, las guerras carlistas, y por varios pronunciamientos militares. REGENCIA DE MARÍA Cristina.1833-40Durante este periodo se produce la división del liberalismo en dos tendencias:Moderados, que buscaban un estado en el que el peso político de la corona fuese grande y el sufragio restringido a un cierto número de población rica, por lo tanto seguramente más conservadora. Tenían el apoyo del clero.Progresistas, partidarios de la continuar con las reformas de la Constitución del 12, por lo tanto de restringir el poder real y aumentar el poder del parlamento, por lo tanto del poder legislativo.Tanto María Cristina como su hija Isabel se apoyaran principalmente en gobiernos moderados.Estatuto real:La necesidad de apoyos a la causa Cristina, valedora de la sucesión de Isabel, frente a los movimientos del infante Don Carlos, obligó a la reina viuda María Cristina a buscar la ayuda de los liberales en el exilio.Así llego Martínez de la Rosa quien se hizo cargo del gobierno estableciendo una Carta Otorgada como base jurídica del Estado.Establecida en 1834, regulaba la convocatoria de unas Cortes bicamerales de carácter conservador y elitista, tanto por su composición (nobleza, clero, funcionarios, altos cargos del ejército y alta burguésía) como por el modo de elección, mediante sufragio censitario indirecto (sólo tenían derecho a voto unos 16.000 hombres). Además, otorgaba a la Corona una amplia capacidad legislativa y de veto, pudiendo incluso disolver libremente las CortesEl gobierno, en manos de los liberales moderados, no fue capaz de dirigir correctamente la difícil situación de guerra contra los carlistas. Además la falta de recursos económicos, una epidemia de cólera y el anticlericalismo hicieron crecer el descontento frente al gobierno, al tiempo que aumentaba el apoyo a los liberales progresistas.Gobierno progresista
1835-37El conde de Toreno o Mendizábal dirigieron algunos de los sucesivo gobiernos progresistas sobre los que se apoyó la regente en estos momentos de crisis. Su política anticlerical (clausura de conventos, desamortizaciones…) supuso la ruptura de relaciones con la Santa Sede, pero también tuvieron que hacer frente a los elementos más revolucionarios en las principales ciudades que amenazaban el proceso de disolución del absolutismo y que daban alas a la causa carlista con el apoyo del clero o de los industriales..Las medidas que tomaron los progresistas en este periodo fueron afianzando el sistema liberal a pesar de las diferencias entre los más radicales y los partidarios de negociar con los liberales moderados y con la corona, lo que supondrá un continuo cambio de presidentes de gobierno. La situación no mejorará tras las elecciones del 36 donde los progresistas ganan.Este enfrentamiento interno dará lugar al “Motín de sargentos de la Granja” en el verano del 37 que reforzará esta dinámica.Algunas medidas de los sucesivos gobiernos fueron:Creación de la Guardia Nacional, heredera de las milicias y dependiente de cada ayuntamiento.Libertadde prensa (parcial)Desamortizaciones de propiedad eclesiástica (Mendizábal).Sufragio universal masculino a nivel municipal (amplias funciones fiscalizadoras y administrativas).Pero la reforma más importante fue la redacción de una nueva constitución, la de 1837.Constitución de 1837 (ver texto)
Las nuevas Cortes elaboraron una nueva Constitución, la de 1837, con la que se pretendía contentar tanto a liberales progresistas como a los moderados.Por un lado proclamaba la Soberanía Nacional y concedía derechos individuales, pero, por otro lado, manténía un poder ejecutivo fuerte en manos del rey, que también tenía competencias legislativas, derecho a veto y suspensión de las Cortes.
Carlismo y guerra civil. Construcción y evolución del Estado liberal.El reinado de Isabel II es un período muy complejo en el que se produjeron importantes transformaciones:Ámbito político:El Antiguo Régimen fue definitivamente desmantelado, permitiendo el desarrollo de un estado burgués parlamentario, dirigido por una nueva clase social, la burguésía agraria.Ámbito socioeconómico:Se pusieron las bases del sistema económico capitalista moderno y se produjo el paso de la sociedad estamental a la sociedad de clases.El período estuvo salpicado por guerras civiles, las guerras carlistas, y por varios pronunciamientos militares. REGENCIA DE MARÍA Cristina.1833-40Durante este periodo se produce la división del liberalismo en dos tendencias:Moderados, que buscaban un estado en el que el peso político de la corona fuese grande y el sufragio restringido a un cierto número de población rica, por lo tanto seguramente más conservadora. Tenían el apoyo del clero.Progresistas, partidarios de la continuar con las reformas de la Constitución del 12, por lo tanto de restringir el poder real y aumentar el poder del parlamento, por lo tanto del poder legislativo.Tanto María Cristina como su hija Isabel se apoyaran principalmente en gobiernos moderados.Estatuto real:La necesidad de apoyos a la causa Cristina, valedora de la sucesión de Isabel, frente a los movimientos del infante Don Carlos, obligó a la reina viuda María Cristina a buscar la ayuda de los liberales en el exilio.Así llego Martínez de la Rosa quien se hizo cargo del gobierno estableciendo una Carta Otorgada como base jurídica del Estado.Establecida en 1834, regulaba la convocatoria de unas Cortes bicamerales de carácter conservador y elitista, tanto por su composición (nobleza, clero, funcionarios, altos cargos del ejército y alta burguésía) como por el modo de elección, mediante sufragio censitario indirecto (sólo tenían derecho a voto unos 16.000 hombres). Además, otorgaba a la Corona una amplia capacidad legislativa y de veto, pudiendo incluso disolver libremente las CortesEl gobierno, en manos de los liberales moderados, no fue capaz de dirigir correctamente la difícil situación de guerra contra los carlistas. Además la falta de recursos económicos, una epidemia de cólera y el anticlericalismo hicieron crecer el descontento frente al gobierno, al tiempo que aumentaba el apoyo a los liberales progresistas.Gobierno progresista
1835-37El conde de Toreno o Mendizábal dirigieron algunos de los sucesivo gobiernos progresistas sobre los que se apoyó la regente en estos momentos de crisis. Su política anticlerical (clausura de conventos, desamortizaciones…) supuso la ruptura de relaciones con la Santa Sede, pero también tuvieron que hacer frente a los elementos más revolucionarios en las principales ciudades que amenazaban el proceso de disolución del absolutismo y que daban alas a la causa carlista con el apoyo del clero o de los industriales..Las medidas que tomaron los progresistas en este periodo fueron afianzando el sistema liberal a pesar de las diferencias entre los más radicales y los partidarios de negociar con los liberales moderados y con la corona, lo que supondrá un continuo cambio de presidentes de gobierno. La situación no mejorará tras las elecciones del 36 donde los progresistas ganan.Este enfrentamiento interno dará lugar al “Motín de sargentos de la Granja” en el verano del 37 que reforzará esta dinámica.Algunas medidas de los sucesivos gobiernos fueron:Creación de la Guardia Nacional, heredera de las milicias y dependiente de cada ayuntamiento.Libertadde prensa (parcial)Desamortizaciones de propiedad eclesiástica (Mendizábal).Sufragio universal masculino a nivel municipal (amplias funciones fiscalizadoras y administrativas).Pero la reforma más importante fue la redacción de una nueva constitución, la de 1837.Constitución de 1837 (ver texto)
Las nuevas Cortes elaboraron una nueva Constitución, la de 1837, con la que se pretendía contentar tanto a liberales progresistas como a los moderados.Por un lado proclamaba la Soberanía Nacional y concedía derechos individuales, pero, por otro lado, manténía un poder ejecutivo fuerte en manos del rey, que también tenía competencias legislativas, derecho a veto y suspensión de las Cortes.