Colonias de explotación y de poblamiento

LA Administración COLONIAL:

La presencia de los europeos en los territorios colonizados supuso el control político, social y cultura, y el sometimiento de los pueblos colonizados a los interese económico de las metrópolis.La administración local de los territorios coloniales comenzó siendo realizada por las compañías privilegiadas de comercio, que recibieron amplios poderes. Sin embargo, pronto el Estado asumíó esas funciones.Hubo distintos modelos de dominación colonial. Los más frecuentes fueron las colonias, los dominios, los protectorados y las concesiones.

Las colonias, en su aspecto político, podían ser consideradas de varios tipos: 1 Colonias de administración directa y centralizada (colonias en sentido estricto). Eran aquellos territorios en los que la población indígena estaba totalmente sometida a la potencia colonial, implantando un gobierno y una administración totalmente europeos. La metrópoli administraba el territorio a través de sus funcionarios blancos, y bajo las órdenes de un gobernador; las compañías privadas realizaban la explotación del territorio. Esta fórmula fue seguida por Alemania, Italia y Gran Bretaña.Desde un punto de vista económico podían ser:
colonias de poblamiento:
En este caso la potencia colonizadora facilitaba el asentamiento de colonos europeos. A pesar de que los europeos eran una minoría, impónían su lengua, formas de vida e instituciones, y ocupaban los puestos de mayor relevancia. Esto ocurre, sobre todo, en los Dominios Británicos (Canadá, Sudáfrica, Australia) y en Argelia, colonia de poblamiento francesa.

Colonias de explotación

Objeto de un intenso saqueo y expolio por parte de las compañías capitalistas. Tienen muy poca población de origen europeo.
Son lugares para obtener materias primas y vender productos manufacturados (India, Indochina, China). 2 Concesiones.
Las potencias colonizadoras obténían ventajas comerciales de países que eran independientes y que le cedían una serie de puertos que podían administrar y explotar. El caso más destacado fue la concesión británica de Hong-Kong. 3 Dominios.
Pertenecían al Imperio británico. Eran zona de poblamiento, es decir, las preferidas para instalarse de manera definitiva por la población procedente de Inglaterra. Gozaban de amplia autonomía y tenían instituciones de gobierno parecidas a las inglesa (Parlamento, partidos políticos…). Eran casi totalmente libres en política interior (sólo un gobernador representaba al rey de Inglaterra); pero en política exterior estaba controlada por la metrópoli, pero teniendo en cuenta los intereses de los dominios.

Los protectorados se solían establecer en territorios coloniales con escaso poblamiento europeo donde ya existía una Estado soberano con su propia estructura política y cultural, es decir, tenían una organización indígena, y  el colonizador no estaba especialmente  interesado en la ocupación militar. La metrópoli respeta el gobierno indígena y éste tiene plena libertad en asuntos internos, pero en política exterior está totalmente sometido a los intereses de la metrópoli. El país colonizado acepta esta sumisión por presiones financieras y militares, perdiendo así su personalidad jurídica a nivel  internacional, pierde su carácter de país independiente. Para la existencia de un  protectorado es necesario  que los distintos países europeos reconozcan a la potencia colonizadora su zona de influencia, esto tiene lugar en conferencias internacionales, o bien a través de pactos bilaterales entre dos naciones europeas. Este modelo fue muy aplicado por Francia en lugares como Camboya (1863) o Túnez (1881), Marruecos (1906)... Gran Bretaña también lo utilizó en algunos estados de  la India donde respetó  el gobierno de los príncipes locales. En el caso de Túnez, Francia firmó un tratado con el Bey por el cual el gobierno francés controlaba la política interior y la exterior, y las finanzas para asegurarse de que Túnez devolvería los préstamos a Francia y Gran Bretaña.En Egipto confluyeron los intereses franceses y británicos, controlando ambos el canal de Suez, después de que las tropas británicas ocuparan Egipto.