El Coliseo Romano: Historia, Arquitectura e Impacto

Orígenes y Construcción

En Roma, capital del Imperio, la creciente demanda de espectáculos hizo necesaria la construcción de un nuevo anfiteatro, ya que el anterior había sido destruido por un incendio provocado por el emperador Nerón. Así, se mandó construir el Anfiteatro Flavio, que posteriormente se cree que pasó a llamarse Coliseo debido a una colosal escultura de casi 20 metros de altura de Nerón ubicada cerca del edificio.

La construcción del Coliseo, iniciada por el emperador Vespasiano en el 77 d.C., fue inaugurada por su hijo Tito en el 80 d.C. Su autor es desconocido. Este enorme edificio elíptico de 189 metros de largo, 156 de ancho y 48 de alto, se considera un precursor de los recintos deportivos modernos. Su forma elíptica surgió de la unión de dos teatros, alcanzando una capacidad de 50.000 espectadores que se reunían para presenciar espectáculos como luchas de gladiadores e incluso batallas navales. Los romanos crearon esta forma arquitectónica para satisfacer la necesidad de entretenimiento del pueblo.

Arquitectura y Diseño

El exterior del Coliseo presenta cuatro cuerpos bien diferenciados: los tres primeros con arcadas y el último con pequeñas ventanas. Como elementos sustentantes, los tres primeros cuerpos presentan muros con arcos de medio punto y semicolumnas adosadas de estilo dórico-toscano en el primero, jónico en el segundo y corintio en el tercero. El último cuerpo, más macizo y con pilastras, se añadió posteriormente para colocar 250 mástiles que soportaban toldos de lino para proteger a los espectadores del sol. La separación de cada cuerpo se realiza mediante entablamentos y cornisas. Los materiales de construcción son piedra (travertino) en sillares, hormigón y ladrillo.

La planta elíptica junto a las arcadas confiere una sensación dinámica al conjunto. La horizontalidad de los entablamentos equilibra la obra. Los huecos, las columnas y otros elementos crean un interesante juego de luces y sombras. En el interior, la cávea o gradería tenía tres pisos comunicados entre sí, con corredores cubiertos por bóvedas de arista o de cañón. Bajo la arena, una compleja estructura de pasillos albergaba objetos, máquinas, jaulas, armas, etc. La arena se colocaba sobre una estructura de madera. El exterior del edificio estaba revestido con placas de mármol, y en las arcadas del segundo y tercer piso se colocaron esculturas.

Influencia Romana y Legado

Roma heredó de Grecia los principios de la arquitectura, fusionando los sistemas arquitrabados griegos con las soluciones de arco y bóveda romanas. A diferencia de Grecia, Roma daba mayor importancia al interior que al exterior. Su arquitectura, predominantemente civil y funcional, se refleja en el diseño de las nuevas ciudades, que adoptaron un sistema de cuadrícula originado en la estructura de sus campamentos militares.

La influencia griega es más evidente en los templos romanos, aunque con modificaciones: suelen ser tetrástilos, pseudoperípteros, sobre podio y con acceso por una escalinata única que enfatiza la fachada principal. Una construcción original son los templos circulares cerrados con cúpula, como el Panteón de Roma, que combina un pórtico griego con una estructura circular cubierta por una gran cúpula.

Elementos importantes de la arquitectura romana son el arco de medio punto, las bóvedas y la cúpula. El hormigón era el material principal, revestido de mármol, pinturas, etc. para embellecerlo. Crearon el orden toscano, que frecuentemente sustituía al dórico.

La estructura del anfiteatro proviene de la unión de dos teatros, cuya estructura original se encuentra en Grecia, donde se construían en las laderas de un terreno, aprovechando el desnivel para el graderío. El sistema esclavista de la época romana hizo posible la construcción del Coliseo. Escenario del martirio de los primeros cristianos, que años más tarde se convertiría en la religión del imperio con Constantino, el Coliseo representa la ambición constructora de un pueblo que quería hacer de Roma el centro del universo.

El Coliseo es una de las mayores atracciones turísticas de Roma, incluso ha aparecido en diversas películas. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1980 junto con el casco histórico de Roma. El edificio se ilumina durante 48 horas cada vez que se conmuta una pena de muerte en el mundo.