Catedral de Santa Ana de Las Palmas: Historia, Arquitectura y Arte

Catedral de Santa Ana

Interior

El interior de la Catedral de Santa Ana, en Las Palmas de Gran Canaria, consta de tres naves longitudinales. La nave central, más ancha que las laterales, está bordeada por trece capillas independientes. Tiene una planta de cruz latina, con el crucero o transepto coronado por el cimborrio. Al fondo de la nave central se sitúa la capilla mayor, de forma cuadrangular, donde se encuentran el presbiterio y el coro. La cabecera acoge formas neoclásicas, propias del momento en que se construyó esta parte del edificio.

Materiales y Estructura

El material principal es la cantería azul de San Lorenzo, utilizada en los arcos, nervios de la cubierta y soportes, con su característico color gris. También se empleó arenisca amarilla o dorada, traída de la zona de Guanarteme. Las zonas de cantería destacan sobre el fondo blanco del yeso de los muros. Las cubiertas, de poco espesor, están realizadas en material volcánico (piedra pómez), poroso y ligero. Los arbotantes exteriores no cumplen su función de soportar los empujes de las bóvedas, siendo el muro de mampostería el que realiza la función de soporte. Éste se articula en dos niveles con pequeñas aberturas y ventanales. Las ventanas son concebidas como huecos en el muro, utilizando dos tipos que aparecen superpuestos en los muros laterales: ventanas saeteras y huecos abocinados.

Soportes y Arcos

Se aprecian dos tipos de soporte: las columnas exentas, que separan las naves laterales, de forma cilíndrica, con basa poligonal, fuste estriado, recorrido verticalmente por columnillas adosadas y fraccionadas por molduras en forma de collarinos; y los pilares adosados a los muros laterales, cruciformes y con capiteles corridos, formados por anillos cilíndricos. Aparecen también pilastras de orden clásico en el interior de las naves y columnas renacentistas. Los arcos de las capillas laterales son apuntados u ojivales, mientras que los de las bóvedas aparecen rebajados.

Bóvedas y Cubiertas

Las cubiertas están realizadas con bóvedas de crucería en las naves central y laterales. Se trata de bóvedas baídas nervadas, con variantes como las bóvedas estrelladas que cubren la parte de la nave del Evangelio que rodean el cimborrio, y las bóvedas terceletes.

Construcción e Historia

La idea de construir este gran edificio religioso surge con la creación de la diócesis en 1485, con sede en la ciudad de Las Palmas. La construcción de la Catedral se produjo en dos grandes fases y contó con la participación de diversos artistas. Diego Alonso de Montaude y Pedro de Llerena concibieron el templo en estilo gótico y planta basilical. La catedral se comenzó a construir, en contra de la costumbre de la época, por la fachada, debido a la idea de mantener el edificio de la iglesia del Sagrario. Posteriormente, Juan de Palacios cambió el proyecto, creando una iglesia de salón, con las naves a igual altura. La construcción avanzó con los maestros de obras Martín de Barea y Pedro Narea, quienes concluyeron la capilla de Santa Teresa. La obra se paralizó en 1781. En ese año se hizo cargo de la edificación Diego Nicolás Eduardo, quien, junto a otras actuaciones en el exterior, prolongó el espacio desde la zona del cimborrio hasta la cabecera del templo. Su discípulo, José Luján, reanudó las obras de las fachadas con trazado neoclásico. En 1821 las obras se paralizaron nuevamente. En 1974, la Catedral de Las Palmas fue declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional.

El Cimborrio

El cimborrio, de sección cuadrangular aunque de aspecto esférico en el interior, tiene un tambor con ventanales, cúpula y linterna. Actúa como elemento de transición entre la parte gótica y neoclásica.

Decoración e Iluminación

Los elementos decorativos son escasos y destacan los de tipo arquitectónico. Existe una decoración escultórica que bordea el interior del cimborrio. En los ventanales resaltan las vidrieras. Hay que destacar la alternancia de los colores gris oscuro de los arcos y el blanco liso de los muros y bóvedas. El espacio interno mantiene una gran homogeneidad y se concibe de forma proporcional y armónica. No se marca demasiado el eje vertical o la altura. A través de las columnillas adosadas a los soportes o pilares se resalta el movimiento ascensional que culmina en los nervios, que con sus líneas se abren a modo de palmeras. Es significativa la ausencia de girola, debido a la intención de respetar, hasta el último momento, la iglesia del Sagrario que existía en el lugar, y también a las deudas económicas. La luz procede de las ventanas de las capillas y las del cimborrio. Los ventanales no son amplios, por lo que el muro no se hace translúcido como es tradicional en el gótico europeo. Las vidrieras hacen que el interior parezca un ambiente oscurecido y coloreado.

Estilo y Contexto Histórico

El interior de este edificio se clasifica como gótico tardío por sus rasgos técnicos y estéticos. Esta anacronía temporal es una de las características de este estilo en las islas. Tras la conquista de las islas y la llegada de los primeros castellanos, se inicia un proceso de construcción de edificaciones, siendo el gótico el primer estilo occidental que se implanta en Canarias. En la actualidad, solo quedan restos aislados de elementos góticos en Canarias. Este templo es la única representación de arquitectura gótica en Las Palmas de Gran Canaria. A ello se añade la limitación de materiales y los escasos recursos económicos de la época.