La casa de Bernarda Alba tipo de texto
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Este fragmento pertenece al Acto III de “La Casa de Bernarda Alba”, una obra teatral escrita por Federico García Lorca, un gran escritor, músico y pintor que nacíó en Granada (1898-1936). Su infancia se desarrolló en el seno de una familia acomodada y, desde muy pequeño mostró sus aptitudes artísticas. Entre Entre 1919 y 1928, vivíó en la Residencia de Estudiantes de Madrid, donde conocíó a figuras importantes como Antonio Machado o Salvador Dalí. ejerce influencia en un grupo de escritores conocido como la Generación del 27, compuesta, por Federico García Lorca, Rafael Alberti, Luis Cernuda, Pedro Salinas, Miguel Hernández, entre otros.. Aunque desean encontrar nuevas fórmulas poéticas, su intención es fundamentalmente estética, combinando tradición y Vanguardismo, sin embargo estos autores se preocupaban especialmente por aquellos asuntos y temas que les preocupaba al ser humano: el amor, la muerte, el destino…. La Guerra Civil los marcó, ya que estaban muy reprimidos;.
Sus obras fundamentales fueron el Romancero gitano, perteneciente al género lírico y que trata sobre la cultura gitana, reflejando así la cercanía del autor con estos. En el ámbito teatral destaca una trilogía teatral, basada en la situación de la mujer de la época: Bodas de sangre, Yerma y La casa de Bernarda Alba, considerada su obra maestra.
Algunas de las carácterísticas de la Generación del 27 se aprecian claramente en La casa de Bernarda Alba, especialmente en los temas presentes en la obra (el amor, la muerte, el destino, la libertad…) y la intención estética, mediante el empleo de un lenguaje metafórico y simbolista que apreciamos tanto en los nombres de los personajes, como en los diálogos y acotaciones. “¡Qué pobreza la mía no poder tener un rayo entre los dedos!”, “¡Ahí fuera está, respirando como si fuera un león!”, “hubiera volcado un río de sangre sobre su cabeza!”, etc..
El tema que trata el fragmento es la reclusión que sufren las hijas de Bernarda debido a la obsesión de ésta por mantener el honor y el orgullo de la casa frente a las críticas y las opiniones del pueblo, y la soledad, el luto, la muerte y la virginidad a la que son sometidas.
En esta última parte de la escena, Martirio delata a Adela y le cuanta a Bernarda que aparecíó con las enaguas llenas de paja de trigo. En la grave discusión que surge, Adela rompe con rebeldía el bastón de su madre y confirma que está enamorada de Pepe.