Arte Griego: Arquitectura, Escultura y Pintura

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El Arte Griego: Arquitectura, Escultura y Pintura

Contexto Geográfico e Histórico

Geográficamente, Grecia se encuentra situada en el Mediterráneo y se pueden distinguir dos partes diferenciadas: la Península del Peloponeso y la parte continental, ambas unidas por el istmo de Corinto. También se pueden distinguir dos zonas contrastadas: la marítima y la montañosa. Mientras la primera es pacífica, culta y abierta a los influjos externos, la segunda es guerrera, de vida dura y bastante cerrada a sus propios valores. Dos ejemplos claros de ciudades pertenecientes a ambos ámbitos son Atenas y Esparta respectivamente.

Llegaron a formar parte de Grecia muchas de las islas del mar Egeo, llamadas Cícladas, las colonias de Asia Menor o Jonia, las grandes islas del Mediterráneo oriental, Chipre y Creta y la Magna Grecia.

Las ciudades eran independientes, organizadas a modo de ciudad-estado. Estas ciudades se desarrollaban solas y no tenían más lazos de unión que la guerra para defenderse de ataques externos y los juegos, entre los que destacan los Olímpicos, Ístmicos, Píticos y Nemeos, según el tiempo y lugar en que se desarrollaban.

Grecia conoció una época de grandeza histórica en tiempos de Alejandro Magno, pero fue muy corta y, en la práctica, no llegó a formar un gran imperio estable. Él unificó toda Grecia, pero su muerte prematura hizo que el Estado se dividiese entre sus generales.

Los antiguos pobladores fueron los pelasgos y los aqueos, que más adelante sufrieron la invasión de los eolios, jonios y dorios.

Religión y Cultura

Les unía también la religión, conjunto de leyendas, héroes, gigantes y mitos (mitología). Los griegos eran politeístas y de religión antropomórfica, ya que a los dioses se les daba una forma humana y se les distinguía con los vicios y virtudes de los hombres. Todas las divinidades griegas fueron asumidas por los romanos, aunque con distinto nombre.

A todas estas divinidades se les dedicaban templos que, a veces, no congregaban en el interior. Los sacerdotes eran augures que interpretaban el vuelo de las aves, las entrañas de los animales y todos los fenómenos naturales. Se comunicaban con los fieles a través de pitonisas y oráculos.

El pueblo griego es el más culto de la antigüedad y su arte es el resultado de su cultura, historia, religión y juegos.

Los juegos olímpicos comienzan el año 776 a. C., celebrándose cada cuatro años, período llamado Olimpiadas. Las principales especialidades de competición eran la carrera, el pugilato, disco, salto, la jabalina, la carrera de caballos en el hipódromo y de carros en el circo. Estos juegos fueron suprimidos por el emperador romano Teodosio.

En cuanto a la cultura, los griegos cultivan la ciencia humana, la filosofía, la búsqueda del hombre y sus valores y la investigación del principio de todas las cosas.

Tras los imperios conquistadores y religiosos, Grecia nos ofrece la Democracia, una religión acomodativa, un ambiente cultural donde el espíritu humano tiene una gran tendencia al pensamiento individual y colectivo, llegándose a una ordenación de los conocimientos en todas las ramas del saber.

El arte refleja la religión en la construcción de los templos, los juegos en la escultura y en los edificios civiles para su celebración, todo a la medida del hombre, y por primera vez, las obras no son anónimas.

Etapas del Arte Griego

Son tres:

  • Arcaica o de formación: anterior al siglo V a. C.
  • Clásica o de apogeo: los siglos V y IV a. C.
  • Helenística o de difusión: y que llega hasta los romanos.

Arquitectura

La hay tanto religiosa como civil.

Arquitectura Religiosa: El Templo

La arquitectura religiosa está representada en los templos. Los de la época arcaica son bastante primitivos, recibiendo el nombre de tholos cuando son de planta circular. Son de materiales pobres y en ocasiones los hay cortos de planta, normalmente de tipo hexástilo. Los ejemplos más importantes son los de Hera en Olimpia, Apolo en Thermon y, ya de transición, es el de Atenea en Egina.

El tipo de templo clásico es de planta rectangular, tamaño medio, adintelado, rodeado de columnas, cubierta a dos aguas y levantado sobre dos o tres escalones a modo de plataforma que constituye el estilóbato. El material más usado es el mármol procedente de la región del Pentélico, que posteriormente se policromaba.

Son tres los tipos de templos atendiendo al tipo de capitel que utilicen: dórico, jónico y corintio.

Orden Dórico

Dórico. La columna tiene fuste sin basa y con un ligero ensanchamiento en su parte central. Por tanto, arranca directamente del suelo y puede ser liso o estriado de arista viva. En cuanto al capitel, consta de collarino, equino y ábaco de tableta. El equino, que es donde nos tenemos que fijar para destacar el orden al que pertenece, es convexo.

La proporción de altura de una columna dórica es de siete veces y media el diámetro de la base del fuste.

Sobre las columnas está el entablamento que a su vez consta de tres elementos: arquitrabe, friso y cornisa. El primer elemento es liso, mientras el friso consta de triglifos y metopas. Estos triglifos son tres canales en cabeza de viga y en mármol, mientras que la metopa es la placa decorada en relieve que se encuentra entre dos triglifos consecutivos. Aunque también es posible el friso de relieve corrido sin triglifos. La cornisa, último de los elementos del entablamento, es la que sobresale más y la menos complicada.

Se corona todo el edificio con un frontón triangular. El interior del triángulo se llama tímpano y también va decorado con esculturas en relieve. Estos frontones se sitúan en la fachada anterior y posterior de un templo. La decoración de un tímpano es simétrica, partiendo del centro, y muchas veces el artista es el arquitecto y el escultor. Los temas tratados son de lo más variado, aunque dominan los mitológicos y narrativos. Mientras, en los ángulos del frontón, se colocan unas decoraciones de tipo animal unas veces y geométricas otras que se llama cimacio.

El plano general del templo es de planta rectangular, rodeada de columnas y escalinatas. Generalmente, tiene tres dependencias que se llaman: pronaos, naos y opistodomos, lo que podría ser una especie de vestíbulo, sala a modo de sacristía, aunque no siempre se da.

Por la situación de las columnas los templos se clasifican en: períptero, si está rodeado de columnas; hemíptero, si están pegadas a la pared; díptero, si la fila de columnas es doble; próstilo, si sólo tiene columnas por delante (los próstilos también se llaman templos in antis); antipróstilo, si las tiene delante y detrás.

Por el número de columnas en sus frentes se clasifican en tetrástilo, si son cuatro; hexástilo, si lo son de seis; octástilo, si lo son de ocho y decástilo si tienen diez, que normalmente es el máximo.

Los principales templos dóricos son: el Partenón de Atenas, el de Poseidón en Poestum, el de Zeus en Olimpia y el Teseión en Atenas.

El Partenón de Atenas es octástilo, períptero y está realizado con sillares de mármol del Pentélico. Es obra de Ictinos y Calícrates sin argamasa y “a hueso”. Es una construcción de proporciones exactas que contiene la escultura criselefantina (de oro y marfil) de la diosa Palas Atenea, obra de Fidias a quien se deben también los frisos del Partenón. El mármol inicial se policroma después. Fue destruido en el s. XVII por la explosión de un polvorín.

El Teseión es hexástilo, períptero y con friso corrido en el opistodomos.

Orden Jónico

Jónico. La columna tiene basa, fuste de estrías pulidas o biseladas, y capitel con su collarino, equino de espirales o volutas a modo de cuernos o rizos, y ábaco. En el orden jónico también se puede sustituir la columna por la figura humana. Si se trata de mujeres se llaman cariátides, mientras que si son hombres reciben el nombre de atlantes.

El entablamento tiene también los tres elementos del dórico, pero aquí el friso es liso.

Los templos jónicos más importantes son los de Diana en Éfeso, que es díptero, y el Erecteión de Atenas, famoso por su tribuna de cariátides, obra de Filoclés.

Orden Corintio

Corintio. Tiene basa; el fuste es más esbelto que los anteriores y en el capitel, el equino es de hojas de “acanto” o cardo a modo de cesto de flores y ábaco cuadrado muy fino. Es el más tardío de los tres órdenes y en el entablamento fija detalles generales de gran ornamentación de tipo geométrico. Los principales templos corintios son los de Delfos y Epidauro. En Delfos hay también un templo de planta circular.

Arquitectura Civil

En cuanto a la arquitectura civil, el tipo de vivienda consta de atrio porticado, androceo donde el jefe de familia ejerce su trabajo, y gineceo o dependencias de las mujeres.

Otro tipo de construcción civil son las tumbas como la de Mausolo y que tienen formas parecidas a los templos.

Hay también gimnasios, hipódromos, odeones, calles porticadas llamadas “stoas” y mercados públicos o “ágoras”. También existe un monumento civil llamado la Linterna de Lisícrates y el Faro de Alejandría, ambos fuera de Grecia.

Edificios de la Acrópolis: el Partenón (dórico), el Erecteión (jónico), el templo de la Victoria Niké (jónico), el pórtico de los propileos (dórico); y entre los edificios civiles: el odeón, una pinacoteca o sala de pintura, y un teatro con 30.000 localidades a cielo abierto aprovechando el declive del terreno.

Escultura

La escultura griega es la que alcanza un mayor grado de perfección en la idealización de la figura humana. Los dioses eran hombres y mujeres; y los juegos olímpicos les daban la ocasión para observar el cuerpo humano en todas sus actitudes. Así pues, cultivaron el desnudo, y los materiales más utilizados son el bronce y el mármol policromado.

Los períodos principales son tres: arcaico, clásico y helenístico.

Periodo Arcaico

Arcaica, en ella se dan las esculturas masculinas bastante rudas con los brazos y las piernas pegados al cuerpo y, generalmente, adelantando un pie y desnudos. Mientras, las representaciones femeninas tienen rostros sonrientes, inexpresivos, que por darse en las esculturas del templo de Egina, se llama sonrisa eginética. Visten larga túnica de pliegues paralelos, sin ninguna gracia y ceñida a la cintura. También llevan el pelo recogido a la nuca. La técnica de pliegues paralelos y pegados al cuerpo se llama técnica de paños mojados. Los jóvenes se llaman Kuroi y las jóvenes Koré.

En un segundo momento de esta época se inicia el peinado, y la sonrisa se hace cada vez más expresiva. Muchas obras de este período son anónimas. En la época de transición del arcaico al clásico se dan obras como el Auriga de Delfos, obra realizada en bronce, cuyo autor es Pitágoras de Samos.

También son obras arcaicas el frontón del templo de Artemisa donde aparece la Gorgona Medusa. La Koré de Atenas y el Moscóforo (hombre que lleva sobre sus hombros un becerro). En muchas ocasiones estas obras están policromadas.

Periodo Clásico

Clásica. Se caracteriza por la conquista del movimiento, la belleza, la proporción, la serenidad y el mayor grado de idealismo de las figuras. Se corresponde al llamado Siglo de Oro o de Pericles, época que abarca parte de los siglos V y IV a. C.

A la primera mitad de siglo corresponden tres autores: Mirón, Fidias y Policleto, mientras a la segunda mitad lo hacen otros tres: Escopas, Praxíteles y Lisipo.

Mirón, interpreta a la perfección el movimiento en su obra el Discóbolo, atleta lanzador del disco. Aquí, presenta al hombre en el último segundo antes de lanzar el disco y concentrado en sí mismo.

Fidias, es el escultor de mayor belleza. Así, tiene la escultura de la diosa Palas Atenea por partida doble; una de piedra y otra de oro y marfil (criselefantina), y el frontón del Partenón, y el friso corrido de las Panateneas en el mismo templo. Es también de Fidias el frontón de Zeus en Olimpia que presenta una lucha entre centauros y lapitas. Fidias era un maestro en todas las ramas del arte, en la interpretación de los pliegues, anatomía, naturalidad, equilibrio y perfección. Se le considera el mejor intérprete del sentimiento religioso y cívico del pueblo griego.

Policleto, es el escultor que fija el canon proporcional de la figura humana y el tipo de belleza masculina. Sus obras son: el Doríforo o portador de lanza, el Diadumeno o joven atleta que se pone la cinta en el pelo. Esta escultura es llamada el canon de Policleto porque es donde se muestran sus mejores proporciones. La altura o estatura es siete veces y media el diámetro anteroposterior de la cabeza. Tiene otra obra, la Amazona herida, que es considerada el canon femenino.

En la segunda mitad de siglo se atiende más a la expresión del sentimiento del dolor y hay un gran sentido de la elegancia con cierta melancolía.

Escopas, procede de la isla de Paros, muy rica en mármol. Desde el principio se interesó por los estados de ánimo, centrándose en un carácter patético y atormentado. En sus retratos destacan las facciones y da especial importancia al movimiento, la pasión y el dolor. Sus obras son: La cabeza de Meleagro en el Museo del Vaticano, Las Ménades, los frontones del templo de Apolo y el friso del mausoleo de Halicarnaso. Lo más característico de la obra de este autor es la profundidad de sus ojos por medio de las cuencas vacías y el arco suprafiliar muy marcado. También hay que destacar el rictus amargo de sus bocas.

Praxíteles, es el escultor de la gracia juvenil, que interpreta con una silueta graciosa ligeramente curvada, que se llama curva praxitélica. Sus obras: Hermes con Dioniso niño de Olimpia, Apolo Sauróctono que presenta al dios de la luz matando a una lagartija símbolo de la noche, Afrodita de Cnido, la muchacha de Chíos...

Lisipo, es un gran broncista y escultor de la corte de Alejandro Magno que destaca por la elegancia y flexibilidad de sus atletas. Su obra principal es el Apoxiomeno, o atleta que se limpia el masaje con una cuchilla. También es autor de la estatua de Alejandro y de otra de Hermes calzándose. A esta época corresponde también la estatua de Diana, en Versalles, y la de Apolo Belvedere, ambas de autor anónimo.

Periodo Helenístico

Helenística. Se tiende a huir del idealismo del período clásico y se logra un mayor realismo en la expresión del movimiento, del dolor y la alegría. Se dispara la pasión y se multiplican los desnudos femeninos.

Algunas obras anónimas de esta etapa son: el Negro Cantor, el Niño de la Oca y la Venus de Milo.

Hay cuatro escuelas principales, que son: Pérgamo, Rodas, Trales y Alejandría.

Pérgamo. Aquí abundan las representaciones de lucha contra los galos: Galo herido, Galo moribundo, Galo suicidándose. También abundan los relieves gigantescos como los del Altar de Pérgamo, realizado por Eumenes, que representa una lucha de dioses y gigantes con gran sentido dramático.

Rodas. Destaca el grupo de Laocoonte y sus hijos, representando a un padre y sus hijos atacados por serpientes, obra de Polidoro y Atenodoro. El Coloso de Rodas pertenece también a esta escuela y es obra de Cares de Lindos, y la Niké de Samotracia, obra de Pitócritos de Rodas.

Trales. A la que pertenece el Toro Farnesio, que presenta el castigo de Dirce por sus hermanos que la atan a un toro salvaje, y que es obra de Apolonio de Trales.

Alejandría, es una de las escuelas más fecundas y donde encontramos algunas características como el carácter pictórico de sus relieves con fondos de paisajes. También abunda la escultura de género de pequeñas figuras de bronce, mármol o barro cocido.

Pintura

Es complementaria a la arquitectura y a la escultura, sirviendo también para decorar la cerámica como vasos, ánforas y platos.

En la cerámica hay dos tipos: figuras negras sobre fondo rojo y figuras rojas sobre fondo negro.

Los temas de estas pinturas suelen ser escenas mitológicas, pero también se da la decoración vegetal, animal y geométrica.

Los principales pintores griegos son Polignoto, Parrasio, Zeuxis, Apeles y Timantes.

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