Aportaciones de la pintura renacentista

Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Plástica y Educación Artística

Escrito el en español con un tamaño de 5,24 KB

LA GIOCONDA. Leonardo da Vinci

I. DESCRIPCIÓN Y ANÁLISIS

Óleo sobre tabla.
Retrato de una mujer en posición de tres cuartos (ni de frente ni de perfil sino en una posición intermedia). El artista crea un tipo de retrato de busto entero que tendrá gran influencia posteriormente, donde es novedosa la actitud de las manos en la silla.

Se advierte una gran idealización:
Forma oval del rostro y sonrisa enigmática, mezcla de ironía, sabiduría y misterio. El tratamiento de la luz y la técnica del SFUMATO, que difumina y suaviza las facciones, crean un velo atmosférico que envuelve toda la escena y hace inasequible e inalcanzable esta figura femenina, dotándola de un aura de misterio que contrasta con su corporeidad o volumen.

El paisaje del fondo es también una consecuencia directa de la PERSPECTIVA AÉREA, y constituye un elemento de inquietud formal, primero porque el paisaje parece independiente del rostro, pero sobre todo porque la línea de horizonte no coincide a la derecha y a la izquierda de la figura, lo que engaña la composición, crea dos planos de visión (figura y paisaje independientes) y aumenta su sentido enigmático.

II. CLASIFICACIÓN

PINTURA RENACENTISTA ITALIANA del CINQUECENTO. La Gioconda. Leonardo Da Vinci. S.XVI (1504).Museo del Louvre. 53 x 77cm.

III. RELACIONES ESTILÍSTICAS

A medio camino entre el Quattrocento y el Cinquecento aparece la figura extraordinaria de Leonardo da Vinci (1452- 1519).
Entre las aportaciones más importantes que desarrolla en la pintura, que se pueden apreciar en este retrato,

destacan dos: a) una nueva PERSPECTIVA AÉREA, que tiene en cuenta la bifocalidad de la visión humana y la existencia de aire entre los objetos y el observador; y b) la técnica del SFUMATO, una práctica que añade a la pintura un aire de misterio, de formas aparentemente inacabadas y perfiles difuminados, que recrean ese aire de fugacidad que caracteriza su pintura.

La difuminación de los colores y la acumulación de azules en los fondos son otras carácterísticas de su estilo, en este caso consecuencia directa de la aplicación de la perspectiva aérea. Siendo igualmente singular la utilización de una luz tibia y difusa en sus cuadros, habitualmente crepuscular, que contribuye a recrear el aire distante y misterioso que ya hemos dicho que caracteriza sus cuadros.

Son muchas las teorías sobre la identidad de la modelo: desde que representa el mito de la madre de Leonardo (la teoría de Freud), a que en ella se autorretrata Leonardo, dando pie con ello a una manifestación de su homosexualidad. Su nombre oficial es “Gioconda” (que, traducido del italiano al castellano es alegre), en honor a la tesis más aceptada acerca dicha identidad, apoyada en el hecho de que era esposa del rico mercader Francesco Bartolomeo del Giocondo y que su nombre era Mona Lisa Gherardini. Leonardo terminó la obra en 1506, pero continuó retocándola posteriormente, ya que nunca se desprendíó de la tabla. El robo que sufríó en 1911, las reproducciones realizadas, las múltiples obras de arte que se han inspirado en el cuadro y las parodias existentes contribuyen a convertir a La Gioconda en el cuadro más famoso del mundo, visitado por millones de personas anualmente.

-      Otras obras famosas del autor son La Última Cena y la Virgen de las Rocas (en sus diferentes versiones). 

La calidad de las obras que se suceden en estos años y la coincidencia de tres genios universales de la pintura (Leonardo da Vinci, Rafael y Miguel Ángel)
, hacen de este periodo un momento irrepetible de la historia del arte.

En el Museo del Prado se encuentra una copia de gran calidad, realizada en paralelo al original.

IV. ENTORNO SOCIO-CULTURAL

CINQUECENTO

El Cinquecento coincide cronológicamente con las primeras décadas del S. XVI, un momento de plenitud artística, porque se ha llegado a la plena madurez de un estilo que fue fraguándose a lo largo del Quattrocento; un estilo definido por la claridad compositiva, el equilibrio, las luces suaves y los colores en armónía. Un concepto clásico de la belleza, dominado por el ethos y el Naturalismo, que en pintura supera algunas conquistas del periodo anterior. Así, principalmente el concepto de la perspectiva, que sustituye la geométrica o lineal por una fórmula mucho más realista que aporta precisamente el mismo Leonardo, la perspectiva aérea. Se alcanza también una mayor hondura psicológica, una exquisita elegancia en los portes y las formas, y en general un mayor dominio técnico, que transforma las figuras un tanto estáticas del Quattrocento, en obras llenas de vida y naturalidad.

Entradas relacionadas: