Análisis de la poesía de Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez

Antonio Machado

Antonio Machado, representante de la Generación del 98, superó la tradición poética mediante procedimientos simbólicos y creó una poesía de gran emoción e introspección. Machado defiende la poesía como “el diálogo de un hombre con su tiempo”. El pensamiento poético parte de la intuición vivida, temporal, a diferencia del pensamiento lógico, que se basa en conceptos.

Temas de la poesía de Machado

• El tiempo: A Machado le interesa el tiempo vivido, no como mera abstracción. En sus versos, el poeta dialoga con su tiempo. Su poesía temporal nace de un sentimiento de angustia ante el paso del tiempo, aunque también se refiere a la temporalidad como fluidez y movilidad.
• El sueño y el amor: Para Machado, el sueño es una forma de conocimiento. También sueña la naturaleza como proyección del poeta. En cuanto al amor, aparece poco erotismo en sus obras.

Soledades y Soledades. Galerías. Otros poemas

En 1903 se publica Soledades y en 1907 se agregan las Galerías. Los temas de Soledades son el paso del tiempo, los sueños, la juventud perdida, y expresan las reacciones del yo poético ante la naturaleza. Es característica de Soledades la forma de diálogos: las estaciones, la noche…

En Soledades aparecen distintos símbolos:

• La tarde: simboliza el declive, el decaimiento.
• El agua: símbolo de la vida y la monotonía.
• La fuente: invita al recuerdo, pasado de pena y tristeza.
• El huerto: simboliza la ilusión.
• El jardín: se vincula con la tarde y la fuente. En la oposición naturaleza libre o naturaleza sometida a canon, Machado se inclina por lo libre.

Campos de Castilla

Campos de Castilla (1912) posee una referencia más directa que simbólica. Machado dirige su mirada hacia el paisaje, los hombres, la historia…

Campos de Castilla incluye:

• “Proverbios y cantares”: poemas breves de carácter sentencioso.
• Siete poemas dedicados a la muerte de Leonor.
• El largo romance “La tierra de Alvargonzález”: historia fratricida que plasma el tema de Caín.

Juan Ramón Jiménez

Hay una profunda evolución en la trayectoria poética de Juan Ramón Jiménez.

Primeras obras

En sus primeras obras hay influencias del esteticismo, decadentismo, simbolismo y modernismo.

• Ninfeas y Almas de violeta (1900): los temas son la nostalgia, la persecución de algo misterioso y el decadentismo.
• El simbolismo aparece en Arias tristes y Jardines lejanos. En este último aparece el conflicto erótico; el poeta asocia con el mal el atractivo sexual, al que opone la virginidad, pero la pureza se convierte en esterilidad y muerte.
• El modernismo influye en Baladas de primavera, Pastorales y Platero y yo (obra en prosa que implica un acercamiento a la naturaleza y al pueblo de Andalucía). También están influenciados por el modernismo, pero sin excesos, Poemas mágicos y dolientes y Laberinto.

Etapa de madurez

El regreso a Madrid y el conocimiento de Zenobia Camprubí conlleva que la melancolía de la primera etapa se transforme en un vitalismo influenciado por Ortega y Gasset. Alcanza la cima de su nueva concepción en Diario de un poeta recién casado (1917). En esta obra, el mundo se revela como un caos y aparece la idea de belleza. El marco del viaje real para casarse con Zenobia a Nueva York le servirá para hacer un recorrido por su propia conciencia. El mar es el eje vertebrador de la obra y su dinamismo y ritmo genera el verso libre.

La distinción prosa/verso es representativa de las dos caras del viaje: la real (desplazamiento geográfico) y la interior (evolución de la conciencia).

El viaje interior consiste en su introducción en la madurez afectiva; también es un viaje hacia la naturaleza encarnada en Nueva York y hacia su madurez estética.

Producción poética posterior al Diario

• Eternidades (1918)
• Piedra y cielo (1919): clama por el nombre exacto de las cosas.
• Poesía (1923): destaca el tema de la obra como venida de la muerte y lo desconocido.

En sus últimas obras busca en la conciencia el camino hacia lo absoluto y celebra el hallazgo de su búsqueda.

• Estación total: aquí aparece la idea de que morir no es acabar, pues la conciencia sigue existiendo y la vida se ve como un paraíso posible que se debe construir.
• Espacio (1954): aquí interroga a su conciencia inmortal.
• Animal de fondo (1949): aquí culmina su misticismo poético al producirse el encuentro con su dios, que está dentro del poeta. En este libro encuentra respuesta a sus interrogantes y a su ansia de eternidad.

Juan Ramón Jiménez fue premio Nobel de Literatura en 1956.