En los 40 destaca la novela existencial; en los 50 el Realismo social y en los 60 la novela experimental o estructural
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TEMA 17 (I): LA NARRATIVA DESDE 1940 A LOS AÑOS 70: PANORAMA GENERAL: Cada una de las décadas está marcada por una tendencia dominante, producto de circunstancias histórico-políticas y socio-culturales del momento. En la década de los 40 , predomina el Realismo tradicional y surge el "tenderismo"lo que incorpora situaciones brutales y sórdidas. Rasgo presente en novelas como La familia de Pascual Duarte, de Camilo José Cela, que se inscriben en el Realismo existencial.
Hacia el final de la década, La colmena, de Cela, inaugura una forma de novelar que marcará los siguientes años. En la década de los 50, prosiguen las producciones del Realismo tradicional Realismo tradicional, predomina el Realismo crítico en el neorrealismo y el Realismo social.
Otras tendencias minoritarias son la novela de la fantasía o de lo mágico, y la novela metafísica, que se desarrollarán en los siguientes años. En los 60, predomina la novela experimental.
/LA NARRATIVA DE LOS AÑOS 40: Los años 40 son difíciles de posguerra y dictadura franquista, de aislamiento internacional, pobreza, hambre, represión y férrea censura. Se publica una novela de vencedores con una visión dialéctica de la sociedad, dividida en buenos y malos, triunfalista, hasta que algunos escritores encuentran en el enfoque existencial su forma de expresión del desconcierto, el desequilibrio de fuerzas y la angustia vital. En 1942 Cela escriba La familia de Pascual Duarte, que inaugura el trenmendismo , caracterizado por la descripción truculenta de lo feo de la sociedad, con personajes que cuentan hechos violentos o desagradables en lenguaje duro, propio de su medio degradado. La novela entronca con una tradición que pasa por la picaresca, el drama rural y el determinismo de Baroja. En ella, Pascual Duarte escribe en la cárcel sus memorias y se duele de su trágico destino y su vida, que justifica como proveniente de su herencia y de circunstancias que lo ponen en situaciones límite. En 1945 Carmen Laforet publica Nada, novela donde una muchacha va a estudiar a Barcelona y se aloja con parientes derrotados en la Guerra Civil, que viven en un ambiente moral y físicamente degradado. La joven universitaria retrata sin tremendismo pero sin tapujos y con tristeza, una ciudad y unas gentes gobernadas por la nada, el vacío, el desencanto, la mezquindad, bajas pasiones e hipocresía social. En 1947 un joven Delibes recibe el Premio Nadal por: La sombra del ciprés es alargada, donde hay frustración y tristeza a pesar de la resignación religiosa. En la novela existencial predominan los temas: soledad, inadaptación, frustración, muerte…. Los personajes son seres marginados, violentos u oprimidos , a veces con taras físicas o psíquicas, que bien desorientados. Los espacios son limitados, estrechos, cerrados y se observa una preferencia por la primera persona y el monólogo./La narrativa de los años 50En los años 50 empieza una tímida apertura al exterior que coincide con una relajación de censura a editoriales abiertas, con el éxodo rural y la consolidación de la clase media burguesa y con los conflictos de clase y protestas de universitarios u obreros contra el régimen. Los autores encuentran en la novela social su instrumento para la denuncia. Los antecedentes están en el Realismo español decimonónico con costumbrismo, en la Generación del 98 con su denuncia del estancamiento nacional y en literatura extranjera del neorrealismo italiano o la generación perdida americana, resaltan rasgos grotescos Hay dos tendencias del Realismo social: el objetivismo y el Realismo critico. En ambas hay compromiso social pero en el objetivismo se refleja la realidad, conductas y diálogos de personajes, sin mediar comentarios o interpretaciones del autor y la crítica está implícita, y en el Realismo crítico está explícita. Ejemplo del objetivismo es El Jarama (1955) de Rafael Sánchez Ferlosio, novela que retrata la conducta y diálogos triviales de jóvenes obreros del momento disfrutando de un día de ocio a la orillas del Jarama. Los diálogos reflejan vidas huecas y vulgares, y de clientes de venta que reflejan la generación anterior. Las obras representativas del Realismo crítico son: Central eléctrica de López Pachero, que critica las condiciones laborales de obreros de presa, La piqueta de Antonio Ferres, sobre el chabolismo y La Zanja de Alfonso Grosso, sobre desigualdades sociales del campo andaluz. En las novelas de Realismo social prima el personaje colectivo frente al del individuo. El lenguaje será claro y sencillo, con diálogos en estilo directo con coloquialismos que alargan la acción; el narrador es tercera persona omnisciente. La estructura es sencilla: narración lineal con cuadros de situaciones cotidianas y espacios y tiempos son reducidos En La colmena de Cela (1951) trescientos personajes, de clase media empobrecida por la guerra, se retratan con trazos caricaturescos, y muestran la dureza de la vida española en el Madrid de 1943. La evolución de la infancia la hacen Sánchez Ferlosio en su novela Industrias y andanzas de Alfanhuí, narrando las aventuras fantásticas y poéticas de un niño que recorre el mundo ayudado por el gallo de la veleta de una torre, y Miguel Delibes en El camino (1950) mostrando a un niño que la noche antes de abandonar su pueblo para estudiar en la ciudad evoca sus correrías y la vida de los vecinos. La monótona vida del pueblo leónés se retrata en Los bravos de Jesús Fernández Santos LA NARRATIVA DE LOS AÑOS 60: Los años 60son de desarrollo económico, crecimiento turístico y cambio de mentalidad. Aumenta la emigración y la oposición al régimen franquista. En literatura se produce un desgaste de la novela social. Interesa más la renovación sin perder la intención crítica. En 1962 aparece Tiempo de silencio, de Luis Martín Santos. En ella Pedro, un médico becado para investigar sobre el cáncer, conoce el mundo de las chabolas madrileño, de donde saca ratones de laboratorio. Se implica contra su voluntad en un aborto clandestino. Le detienen, pero demuestra su inocencia, aunque su vida quedará marcada por circunstancias trágicas que le llevan a abandonar Madrid y hacerse médico rural. Esta obra introduce novedades carácterísticas de la novela experimental de esta década: el enfoque existencia extendido a clases sociales desfavorecidas, que en la novela social eran inocentes; la estructura en secuencias en vez de en capítulos, con ruptura temporal para narrar hechos de 6 días; el punto de vista múltiple incluye el monologo interior , el estilo indirecto libre y la segunda persona para hablar con uno mismo; el lenguaje experimental y culto : denso, recargado, salpicado de cultismos, tecnicismos médicos, neologismos, coloquialismos, argos y brillantes recursos retóricos; con descripciones y sintaxis complejas y con referencias mitológicas para describir personajes vulgares.
Hacia el final de la década, La colmena, de Cela, inaugura una forma de novelar que marcará los siguientes años. En la década de los 50, prosiguen las producciones del Realismo tradicional Realismo tradicional, predomina el Realismo crítico en el neorrealismo y el Realismo social.
Otras tendencias minoritarias son la novela de la fantasía o de lo mágico, y la novela metafísica, que se desarrollarán en los siguientes años. En los 60, predomina la novela experimental.
/LA NARRATIVA DE LOS AÑOS 40: Los años 40 son difíciles de posguerra y dictadura franquista, de aislamiento internacional, pobreza, hambre, represión y férrea censura. Se publica una novela de vencedores con una visión dialéctica de la sociedad, dividida en buenos y malos, triunfalista, hasta que algunos escritores encuentran en el enfoque existencial su forma de expresión del desconcierto, el desequilibrio de fuerzas y la angustia vital. En 1942 Cela escriba La familia de Pascual Duarte, que inaugura el trenmendismo , caracterizado por la descripción truculenta de lo feo de la sociedad, con personajes que cuentan hechos violentos o desagradables en lenguaje duro, propio de su medio degradado. La novela entronca con una tradición que pasa por la picaresca, el drama rural y el determinismo de Baroja. En ella, Pascual Duarte escribe en la cárcel sus memorias y se duele de su trágico destino y su vida, que justifica como proveniente de su herencia y de circunstancias que lo ponen en situaciones límite. En 1945 Carmen Laforet publica Nada, novela donde una muchacha va a estudiar a Barcelona y se aloja con parientes derrotados en la Guerra Civil, que viven en un ambiente moral y físicamente degradado. La joven universitaria retrata sin tremendismo pero sin tapujos y con tristeza, una ciudad y unas gentes gobernadas por la nada, el vacío, el desencanto, la mezquindad, bajas pasiones e hipocresía social. En 1947 un joven Delibes recibe el Premio Nadal por: La sombra del ciprés es alargada, donde hay frustración y tristeza a pesar de la resignación religiosa. En la novela existencial predominan los temas: soledad, inadaptación, frustración, muerte…. Los personajes son seres marginados, violentos u oprimidos , a veces con taras físicas o psíquicas, que bien desorientados. Los espacios son limitados, estrechos, cerrados y se observa una preferencia por la primera persona y el monólogo./La narrativa de los años 50En los años 50 empieza una tímida apertura al exterior que coincide con una relajación de censura a editoriales abiertas, con el éxodo rural y la consolidación de la clase media burguesa y con los conflictos de clase y protestas de universitarios u obreros contra el régimen. Los autores encuentran en la novela social su instrumento para la denuncia. Los antecedentes están en el Realismo español decimonónico con costumbrismo, en la Generación del 98 con su denuncia del estancamiento nacional y en literatura extranjera del neorrealismo italiano o la generación perdida americana, resaltan rasgos grotescos Hay dos tendencias del Realismo social: el objetivismo y el Realismo critico. En ambas hay compromiso social pero en el objetivismo se refleja la realidad, conductas y diálogos de personajes, sin mediar comentarios o interpretaciones del autor y la crítica está implícita, y en el Realismo crítico está explícita. Ejemplo del objetivismo es El Jarama (1955) de Rafael Sánchez Ferlosio, novela que retrata la conducta y diálogos triviales de jóvenes obreros del momento disfrutando de un día de ocio a la orillas del Jarama. Los diálogos reflejan vidas huecas y vulgares, y de clientes de venta que reflejan la generación anterior. Las obras representativas del Realismo crítico son: Central eléctrica de López Pachero, que critica las condiciones laborales de obreros de presa, La piqueta de Antonio Ferres, sobre el chabolismo y La Zanja de Alfonso Grosso, sobre desigualdades sociales del campo andaluz. En las novelas de Realismo social prima el personaje colectivo frente al del individuo. El lenguaje será claro y sencillo, con diálogos en estilo directo con coloquialismos que alargan la acción; el narrador es tercera persona omnisciente. La estructura es sencilla: narración lineal con cuadros de situaciones cotidianas y espacios y tiempos son reducidos En La colmena de Cela (1951) trescientos personajes, de clase media empobrecida por la guerra, se retratan con trazos caricaturescos, y muestran la dureza de la vida española en el Madrid de 1943. La evolución de la infancia la hacen Sánchez Ferlosio en su novela Industrias y andanzas de Alfanhuí, narrando las aventuras fantásticas y poéticas de un niño que recorre el mundo ayudado por el gallo de la veleta de una torre, y Miguel Delibes en El camino (1950) mostrando a un niño que la noche antes de abandonar su pueblo para estudiar en la ciudad evoca sus correrías y la vida de los vecinos. La monótona vida del pueblo leónés se retrata en Los bravos de Jesús Fernández Santos LA NARRATIVA DE LOS AÑOS 60: Los años 60son de desarrollo económico, crecimiento turístico y cambio de mentalidad. Aumenta la emigración y la oposición al régimen franquista. En literatura se produce un desgaste de la novela social. Interesa más la renovación sin perder la intención crítica. En 1962 aparece Tiempo de silencio, de Luis Martín Santos. En ella Pedro, un médico becado para investigar sobre el cáncer, conoce el mundo de las chabolas madrileño, de donde saca ratones de laboratorio. Se implica contra su voluntad en un aborto clandestino. Le detienen, pero demuestra su inocencia, aunque su vida quedará marcada por circunstancias trágicas que le llevan a abandonar Madrid y hacerse médico rural. Esta obra introduce novedades carácterísticas de la novela experimental de esta década: el enfoque existencia extendido a clases sociales desfavorecidas, que en la novela social eran inocentes; la estructura en secuencias en vez de en capítulos, con ruptura temporal para narrar hechos de 6 días; el punto de vista múltiple incluye el monologo interior , el estilo indirecto libre y la segunda persona para hablar con uno mismo; el lenguaje experimental y culto : denso, recargado, salpicado de cultismos, tecnicismos médicos, neologismos, coloquialismos, argos y brillantes recursos retóricos; con descripciones y sintaxis complejas y con referencias mitológicas para describir personajes vulgares.