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Es preciso mencionar dentro de este contexto a Socrates, el cual se presenta como un maestro de la areté política que utiliza como instrumento la misma retórica pero no para tratar de convencer de mi verdad, sino para encontrar la verdad. Sócrates propone que hay una verdad que está en el interior de la persona y la mayéutica sirve para encontrarla, para sacarla. Cada palabra tiene un concepto asociado que depende de cada persona, a partir de la mayéutica podemos encontrar lo más puro del concepto.

"Solo sé que no sé nada" es el primer paso de la mayéutica, poner en duda lo que sé, porque si lo sé para qué voy a pensarlo. Se piensa a través de las preguntas dirigidas.

Para Sócrates la areté política sería la justicia, es decir, lo justo, lo bueno y lo bello.

Todo lo que conocemos de Sócrates es gracias a los diálogos de Platón

Comentario de texto:

2B Explicación del fragmento a nivel Gnoseológico.

Para comenzar este comentario es preciso destacar que Platón cree que la verdad está en la palabra hablada de ahí que su obra sea un diálogo.

Este fragmento pertenece a la ALEGORÍA DE LA CAVERNA, texto ubicado en el libro siete de una de las obras más importantes de Platón, LA REPÚBLICA, a través del cual expone su teoría del conocimiento con un diálogo entre Sócrates y Glaucón.

DENTRO DE LA CAVERNA:

Dentro de la Caverna estos encadenados no conocen la realidad, sino que se quedan limitados a un conocimiento doxológico, un conocimiento de opinión. Dentro del conocimiento doxológico, Platón lo va a dividir en la Eikasia y en la Pisti. Pues estos encadenados se encuentran en el nivel de conocimiento más básico, Eikasia como capacidad para captar imágenes, pues solo pueden ver las sombras reflejadas. Pero a su vez estas sombras para ellos no son sombras de nada. Como la imagen en Platón también son los sonidos, a través de la Eikasia también podrían captar el sonido de la gente que pasa por detrás del muro. Pero para ellos este sonido proviene de las sombras que están viendo reflejadas. Dentro de la caverna los encadenados tienen un conocimiento sensible. La vida dentro de la caverna y fuera de esta representan la vida del alma ignorante y la vida del alma educada.

Cabe destacar que la luz del fuego dentro de la caverna hace posible el conocimiento sensible y la vida.

FUERA DE LA CAVERNA:

El hecho de sacar al prisionero de la caverna es un paso muy doloroso para él. Pues está convencido de cuál es su mundo real, y es dentro de la caverna. El hecho de que no quiera salir obliga a forzarlo de alguna forma. Cuando el prisionero sale ve las cosas que producían las sombras, pero todavía sigue confiado en sus sentidos, pues considerará que lo real es lo que

había visto antes y tendrá que luchar contra su tendencia a lo sensible. La educación va a comenzar en el momento en el que se libera de la caverna y ver lo que producirá las sombras.

EL prisionero necesitaría acostumbrarse a este nuevo mundo. Pues a través de la dianoia, es decir, la capacidad para captar los conceptos matemáticos, el prisionero conoce las sombras de los seres naturales y los reflejos en el agua (esto es cuando dice en la alegoría, en primer lugar miraría las sombras, figuras de los hombres y de los otros objetos reflejados en el agua). Una vez que ha superado este grado ascendería a la noesis, o capacidad para contemplar los conceptos éticos y estéticos, es decir cuando contempla el cielo, los astros y por último el Sol.

Ante esta situación el prisionero se sentirá feliz por conocer lo real y ser consciente de que donde vivía anteriormente era un mundo ignorante. Además se sentirá triste de sus compañeros, pues su saber es de opinión y no ciencia.

Conclusión: la educación ha de empezar por lo más fácil para continuar con lo más difícil.