Ventajas y Desventajas de la Vida en la Ciudad: Un Panorama Completo
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Geografía
Escrito el en español con un tamaño de 8,45 KB
Beneficios de la Vida Urbana
El medio urbano proporciona, tanto al individuo como a la sociedad, posibilidades de desarrollo que no se lograrían jamás en el medio rural. En efecto, la ciudad ofrece una variada gama de empleos, posibilidades de realizar estudios, de disponer de centros recreativos y oportunidades de contar con mejores medios de atención médica, entre las principales ventajas. Estos beneficios que el hombre recibe al vivir en la ciudad han provocado en todas las latitudes una constante migración proveniente de las zonas rurales. Pero cabe destacar que, en la medida que la ciudad ha alcanzado un alto grado de desarrollo, esa migración ha ido disminuyendo y actualmente los centros urbanos aumentan su población fundamentalmente por crecimiento natural y no por migrantes.
La vida cultural de una nación tiene lugar principalmente en sus ciudades, pues en ellas existen instituciones que tienen como finalidad transmitir y crear cultura. Conferencias, encuentros de especialistas, museos, cines, teatros, exposiciones artísticas y científicas, etc., permiten que el habitante de la ciudad pueda evolucionar culturalmente y son oportunidades que muy rara vez se le brindan al habitante de la zona rural. La misma diferencia se puede destacar en relación con las posibilidades de recreación, abundantes en las ciudades y muy escasas fuera de ellas.
Como consecuencia de las distintas funciones que puede ejercer una ciudad, existen en ella mayores y más diversas oportunidades de empleo que en un ambiente rural: oficinista, empresario, sastre, profesor universitario, tornero, chofer, secretaria, locutor, por solo nombrar algunos ejemplos, inexistentes o muy escasos fuera de la ciudad. Los grandes centros hospitalarios se encuentran insertos en la ciudad y a ellos deben recurrir los habitantes de zonas rurales cuando requieren de atención médica.
En ocasiones se suele destacar, como otro de los beneficios de vivir en la ciudad, el mayor contacto social de que dispone el habitante de la urbe, el que sin lugar a dudas existe. Pero este es un aspecto bastante discutible hoy en día, por cuanto se ha observado que el hombre de la ciudad tiende a un aislamiento y a un anonimato dentro de la colectividad.
A los beneficios anotados, podemos agregar las mejores condiciones de vida material que proporcionan los numerosos servicios de bien público que presta la ciudad, tales como la electricidad, el agua potable, el aseo, el transporte, el abastecimiento, etc. Pero indudablemente que el vivir en la ciudad no solo significa recibir beneficios, también provoca múltiples y variados problemas al habitante urbano.
Deficiencias del Espacio Urbano
La saturación urbana se traduce en el hacinamiento de la población en una reducida superficie, situación perjudicial para la salud física y psíquica de los individuos. La falta de espacio urbano conduce fatalmente al sacrificio de las áreas verdes, necesarias para la vida normal del ser humano, y a la concentración de habitantes en reducidas viviendas, con la consiguiente pérdida de privacidad.
La Contaminación: Un Problema Urbano Creciente
La contaminación atmosférica, la acústica y la provocada por la expulsión de residuos sólidos y líquidos son, sin duda, uno de los problemas más agudos que se padecen en la áreas urbanas. La contaminación atmosférica viene agudizándose desde principios de siglo y es una costosa y peligrosa consecuencia de la industrialización y de la urbanización.
Tipos de Contaminación Atmosférica
El análisis del aire urbano indica que existen dos tipos principales de atmósfera contaminada:
- Contaminación de tipo Londres: Los contaminantes son principalmente compuestos sulfurosos procedentes de la quema de carbón.
- Atmósfera tipo Los Ángeles: Se hallan derivados del petróleo llamados hidrocarburos.
En las grandes ciudades, las fuentes de contaminación son, en este orden, los automóviles, las instalaciones industriales y las calefacciones. Todas ellas arrojan a la atmósfera aproximadamente el mismo volumen relativo de contaminantes.
Factores que Agravan la Contaminación
La contaminación atmosférica puede llegar a ser un problema según la densidad de población de la ciudad y la meteorología de la zona. Los movimientos de grandes masas de aire originan potentes brisas que limpian regularmente la atmósfera. Cuando no hay brisas, se producen movimientos ascendentes de aire que arrastran consigo el humo y los productos químicos vaporizados. Pero a menudo estos fenómenos de ventilación no se producen y entonces puede no haber movimientos de aire en una zona durante horas o incluso días.
Un fenómeno que detiene los movimientos de aire es la inversión térmica. Normalmente, el aire es más caliente a nivel del suelo que en las capas más altas de la atmósfera, fenómeno que produce los movimientos ascendentes del aire. Sin embargo, al producirse la inversión térmica, se forma una capa de aire caliente a cierta altura, la que encierra una capa de aire frío contra el suelo. Cuando ocurre este fenómeno sobre una ciudad contaminada, la capa de aire frío acumula una gran cantidad de agentes contaminantes. Este fenómeno constituye una situación crónica en la ciudad de Los Ángeles, Estados Unidos.
Contaminación Acústica
La acústica es otra forma de contaminación a la que el habitante urbano está expuesto. Los focos de ruidos y de vibraciones que pueden ser considerados como los más relevantes en la ciudad son el tráfico urbano, las obras públicas y privadas, y las industrias. Todo ruido no deseado es considerado contaminación acústica.
Contaminación por Residuos
La contaminación por residuos es aquel tipo de contaminación producida por el desecho de desperdicios urbanos que son arrojados a las aguas de los ríos. La ciudad absorbe gran cantidad de materia, pero al mismo tiempo transforma y arroja otro tanto, como materias orgánicas o desperdicios. Una gran parte de las aguas usadas, sobre todo las utilizadas por las industrias únicamente para enfriar y que, por lo tanto, no están sucias, escapan al destino común de la evacuación de líquidos contaminados. Algunas reanudan el ciclo y se reemplean varias veces, otras son inyectadas por bombeo a capas subterráneas, otras son devueltas al río del que fueron extraídas aguas arriba. Este caso corresponde a las centrales hidroeléctricas.
El problema se torna difícil y peligroso con las aguas que tienen impurezas químicas. A pesar de las severas reglamentaciones existentes en algunos países, a menudo son también expulsadas a ríos y mares, lo que origina trastornos ecológicos, por ejemplo, en la flora y fauna. Teóricamente, en las ciudades equipadas, las aguas servidas son conducidas por canalizaciones de grandes dimensiones (las cloacas) hasta cuencas de decantación o plantas de depuración. Pero, desgraciadamente, el alto costo de la infraestructura, la dificultad técnica y la amplitud de trabajos que se deben efectuar son tales que muchas ciudades en desarrollo no han podido dar una solución satisfactoria y de acuerdo a los tiempos a esta situación de contaminación.
Los residuos sólidos tienen un destino diferente. En los inmuebles modernos, las trituradoras permiten reducir el volumen de los desperdicios por las canalizaciones para que tales efectos poseen las ciudades. Pero aún en muchos países, ello constituye una novedad poco desarrollada. La gran mayoría utiliza los cubos de basura que periódicamente son retirados por camiones recolectores perfeccionados. En algunas ciudades existen plantas procesadoras que transforman los desperdicios en energía calórica o en abono para la tierra. Sin embargo, en este aspecto, el mayor problema de las ciudades modernas lo constituyen los envases plásticos, pues estos no se pueden transformar. Las principales fuentes de producción de desechos son la industria, la agricultura y los hogares domésticos. Como dato ilustrativo, se ha sostenido que cada persona arroja diariamente dos kilos de residuos sólidos en forma de restos de alimentos, papeles y envases de distintos tipos. Si consideramos esta cifra con la población que habita centros urbanos y pensamos que del total de la población mundial ella representa un 40%, podemos afirmar que diariamente los habitantes de las ciudades arrojan un total de 3 millones doscientas toneladas de desperdicios.