Trastornos de Ansiedad y Estrés: Fobias, TOC y TEPT Explicados
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Psicología y Sociología
Escrito el en español con un tamaño de 4,8 KB
Fobias: Comprender los Miedos Irracionales y sus Manifestaciones
La fobia se distingue de los temores simples por varias características clave:
- El miedo es desproporcionado en relación con la situación que lo desencadena.
- No puede ser explicado o razonado lógicamente.
- Se encuentra fuera del control voluntario de la persona.
- Conduce a la evitación activa de la situación u objeto temido.
Dentro de las clasificaciones más aceptadas, se distinguen principalmente la fobia específica (anteriormente simple), la fobia social y la agorafobia.
Tipos Comunes de Fobias
Fobia Específica (Fobia Simple)
Se define por temores acusados, persistentes, excesivos o irracionales desencadenados por la presencia o anticipación de un objeto o situación concreta. Ejemplos comunes incluyen el temor a la sangre (hemofobia), a las serpientes (ofidiofobia) o a los perros (cinofobia).
Su origen suele ser infantojuvenil. Si la fobia no interfiere significativamente en la vida diaria de la persona, no siempre requiere tratamiento. Solo un pequeño porcentaje (aproximadamente el 2%) precisa intervención farmacológica y/o técnicas cognitivo-conductuales.
Agorafobia
Es el miedo irracional a lugares amplios o plazas públicas. Actualmente, su definición se ha expandido para incluir no solo espacios abiertos, sino también multitudes y situaciones de las que sería difícil escapar o encontrar ayuda, como cines, autobuses o grandes almacenes.
Fobia Social (Trastorno de Ansiedad Social)
Caracterizada por temores acusados y persistentes a una o más situaciones sociales o de actuación en público. La persona teme actuar de forma humillante o embarazosa, lo que puede manifestarse en actividades cotidianas como comer, beber, hablar o escribir en presencia de otros.
Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC): Obsesiones y Compulsiones
El Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) se caracteriza por la presencia de pensamientos obsesivos y actos compulsivos.
Pensamientos Obsesivos
Son ideas, imágenes o impulsos recurrentes que aparecen de forma repentina e intrusiva. Se perciben como irracionales e involuntarios, provocan un gran malestar y la persona no puede evitarlos. A menudo se describen como pensamientos insólitos y "parásitos" que invaden la mente.
Actos Compulsivos
Son comportamientos o actos mentales repetidos y estereotipados. Su propósito principal es reducir el malestar o la ansiedad generada por los pensamientos obsesivos, o prevenir algún evento temido.
Ejemplos de Obsesiones y Compulsiones
A continuación, se presentan ejemplos comunes que ilustran la diferencia entre obsesiones y compulsiones:
- Obsesiones:
- Temores de contaminación (por ejemplo, a gérmenes o suciedad).
- Dudas cotidianas excesivas (por ejemplo, si la puerta está cerrada).
- Necesidad de orden y simetría.
- Necesidad de acumular objetos.
- Compulsiones:
- Rituales de lavado y limpieza excesivos.
- Comprobación repetitiva (por ejemplo, de cerraduras o electrodomésticos).
- Ordenación y organización meticulosa.
- Conductas de acumulación (guardar objetos sin valor).
Trastorno por Estrés Postraumático (TEPT): Impacto y Recuperación
El Trastorno por Estrés Postraumático (TEPT) se desarrolla tras la exposición a un evento de estrés ambiental desbordante. Se caracteriza por:
- Reexperimentación recurrente del episodio traumático (por ejemplo, flashbacks, pesadillas).
- Embotamiento emocional y un estado de ánimo disfórico (que produce malestar significativo).
Este trastorno puede manifestarse en un alto porcentaje de supervivientes de eventos traumáticos, estimándose su aparición en aproximadamente el 85% de los casos.
El TEPT surge cuando una persona experimenta o es testigo de una situación que implica una amenaza real o percibida de muerte, lesión grave o violencia sexual. Ejemplos de situaciones desencadenantes incluyen:
- Violaciones y agresiones sexuales.
- Torturas.
- Experiencias en campos de concentración.
- Accidentes graves (caídas, incendios, accidentes de tráfico).
- Ataques terroristas.
- Haber vivido o presenciado guerras.
- Cualquier otra situación que signifique una amenaza inminente para la vida o la integridad física.
Las imágenes intrusivas y los recuerdos vívidos de la situación traumática son componentes centrales de este trastorno.