Transformaciones Demográficas y Sociales en España (1950-1975)
Enviado por Chuletator online y clasificado en Geografía
Escrito el en
español con un tamaño de 4,37 KB
Crecimiento Demográfico y Movimientos Migratorios en España (1950-1975)
La población española experimentó un fuerte crecimiento demográfico, pasando de 23 millones de habitantes en 1950 a 34 millones en 1970. Este aumento se debió a un marcado descenso de la mortalidad, especialmente la mortalidad infantil. La natalidad se mantuvo alta debido a la política natalista del régimen, con una media de 2,8 hijos por mujer, y la esperanza de vida alcanzó los 73 años en 1975. La combinación del descenso de la mortalidad y el mantenimiento de una alta natalidad generó un elevado crecimiento natural de la población, conocido como baby boom.
Se produjo un intenso éxodo rural, que movilizó a aproximadamente 4 millones de habitantes. Este fenómeno estuvo motivado por la mecanización del campo y el simultáneo proceso de industrialización en España. La población se desplazó principalmente desde regiones agrarias como Extremadura, Andalucía, Galicia y las dos Castillas hacia las zonas más industrializadas, como el País Vasco, Cataluña y Madrid. Este desplazamiento masivo generó un aumento de los problemas sociales en los barrios periféricos de las ciudades, que surgieron sin planificación y carecían de servicios sociales básicos (sanitarios, educativos, parques), a menudo constituidos por viviendas precarias o chabolas.
Paralelamente, Europa (especialmente Francia, Alemania y Suiza) absorbió a 1,3 millones de emigrantes españoles. El sector primario experimentó una drástica reducción de su peso en la economía española, pasando de representar el 50% en 1950 a un 21% en 1971.
Transformaciones Sociales y Culturales
Estos cambios demográficos y de distribución poblacional, unidos al aumento del poder adquisitivo, produjeron profundas transformaciones sociales. Uno de los más destacados fue el desarrollo de una amplia clase media, que se integró en la incipiente sociedad de consumo, y el surgimiento de una burguesía urbana con un mayor nivel cultural. Las reformas educativas contribuyeron a erradicar el analfabetismo y a establecer la educación primaria obligatoria. En menos de una generación, los hogares españoles pudieron equiparse con electrodomésticos y se popularizó el automóvil, destacando el SEAT 600, de producción nacional.
La estructura familiar experimentó cambios significativos, transitando de la familia extensa (propia del ámbito rural) a la familia nuclear (formada exclusivamente por padres e hijos), característica del mundo urbano e industrial.
Otro cambio de gran calado fue la evolución de la condición femenina. Las mujeres comenzaron a incorporarse al mundo laboral. Muchas mujeres que alcanzaron la edad adulta en la década de 1970 lograron un nivel de estudios equiparable al masculino y se convirtieron en portadoras de una nueva mentalidad que defendía su libertad y realización personal. No obstante, la tasa de ocupación femenina en España se mantuvo muy por debajo de la media de Europa occidental.
Finalmente, la Iglesia Católica, tras el Concilio Vaticano II, adoptó posiciones renovadoras, distanciándose progresivamente del régimen franquista y alineándose con sectores que reclamaban su democratización. Estos cambios internos en la Iglesia se produjeron en un contexto de creciente secularización, lo que disminuyó su peso e influencia en la vida pública.
Conclusión
En conclusión, las profundas transformaciones sociales y demográficas descritas, lejos de fortalecer el régimen franquista, propiciaron un progresivo distanciamiento de las nuevas generaciones, que comenzaron a reclamar una sociedad más abierta y en consonancia con los movimientos culturales y políticos europeos de la época.