Transformaciones Demográficas y Estructura Económica en España

LA ESTRUCTURA DE 3

Entre 1960 y 1975

Durante este período, se produjo una reducción de la población ocupada en el sector primario debido al éxodo rural, impulsado por la mecanización del campo y la oferta de empleo en los otros dos sectores.

La ocupación en el sector secundario creció gracias al impulso de la industria, los planes de desarrollo y el aumento de la construcción en las ciudades.

Por otro lado, la ocupación en el sector terciario aumentó debido a la población trasladada y al crecimiento de los servicios impulsados por la industria, el turismo y el aumento del nivel de vida, como por ejemplo en los transportes, las finanzas, la hostelería, la educación y la sanidad.

Desde 1975 hasta la actualidad

• La ocupación en el sector primario se ha estancado debido a la detención del éxodo rural a raíz de la crisis.
• La ocupación en el sector secundario ha disminuido, ya que la industria se vio afectada por la crisis de 1975. Tras la crisis, la industria ha incorporado nuevas tecnologías que requieren menos mano de obra y demandan cada vez más servicios a la producción, un proceso conocido como terciarización de la industria.
• La ocupación en el sector terciario se ha visto favorecida por el aumento del nivel de vida, que exige servicios cada vez más numerosos y especializados. También ha contribuido la creación de la Administración autonómica y europea, la implantación del Estado del Bienestar y los cambios sociales que impulsan servicios relacionados con el envejecimiento, el ocio, la incorporación de la mujer al trabajo y la inmigración.

En cuanto a la distribución espacial, el sector primario tiene mayor peso en las comunidades del sur y del interior peninsular (Murcia, Extremadura, Andalucía). El sector secundario predomina en comunidades con tradición o diversificación industrial, como La Rioja, Navarra, País Vasco y Cataluña. Por último, el sector terciario se concentra en Madrid y en las comunidades más turísticas, como Ceuta y Melilla.

EL FUTURO DE LA POBLACIÓN ESPAÑOLA

España ha experimentado profundas transformaciones demográficas desde 1975. Ha pasado de ser un país con una alta tasa de natalidad, joven y emigratorio a convertirse en un país con una de las tasas de natalidad más bajas del mundo, envejecido e inmigratorio.

Estos cambios exigen la realización de proyectos demográficos de futuro para planificar asuntos como la necesidad de plazas escolares o residenciales para la tercera edad, los gastos sanitarios o en pensiones, y las ayudas sociales.

El futuro del movimiento natural

• La tasa de natalidad comenzó a decrecer desde 2009 debido a la crisis económica y seguirá esta tendencia hasta 2030. El motivo es la llegada a la edad fértil de la generación de las mujeres nacidas en esta época de mayor descenso de natalidad y el incremento de la edad media de la maternidad.
• La fecundidad dependerá de la adopción por las mujeres extranjeras de las pautas de fecundidad nacionales y de la evolución de las mujeres españolas, condicionada por el acceso al mundo laboral, la existencia de políticas efectivas de conciliación de la vida laboral y familiar, y la igualdad en el reparto de las tareas domésticas.
• La tasa de mortalidad es baja, pero crecerá por el envejecimiento de la población. La esperanza de vida continuará aumentando.

El futuro de los movimientos migratorios

• Las migraciones de la población española mantendrán el aumento de las migraciones interiores interurbanas y de centro de la propia provincia o comunidad, en detrimento de las migraciones entre comunidades autónomas.
• La emigración exterior volverá a reducirse en unos años. La inmigración extranjera es difícil de prever, ya que depende del número de retornos y del mantenimiento de España como destino inmigratorio.
• El saldo migratorio externo, que se volvió negativo en 2010 por la crisis económica y el aumento de la emigración española, será positivo en 2021. Sin embargo, la mayoría de los inmigrantes provendrán de la UE, Sudamérica y África.

El futuro del crecimiento y la estructura de la población

• Crecimiento de la población: Hubo un descenso en 2011 y se mantendrá esta tendencia, ya que el crecimiento natural es negativo y no se compensará con el saldo migratorio.
• Estructura por sexo: Seguirán predominando los varones entre los jóvenes y las mujeres entre los ancianos.
• Estructura por edad: Se acentuará el envejecimiento debido al descenso de la natalidad y al aumento de la esperanza de vida. En 2060, el porcentaje de ancianos será cuatro veces mayor que el de los jóvenes.
• Estructura económica: La tasa de actividad decrecerá por el envejecimiento demográfico. La tasa de actividad masculina decrecerá y la femenina crecerá hasta 2020, tendiendo a aproximarse. Por grupos de edad, seguirá disminuyendo la tasa de actividad de los jóvenes entre los 16 y 19 años y la de los mayores de 65. Por otra parte, el incremento de la terciarización de la actividad económica provocará que aumente el porcentaje de población empleada en el sector servicios.