Transformación Agraria y Política en la España del Siglo XIX: Desamortización, Isabel II y Fernando VII
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Los Cambios en la Propiedad de la Tierra: Las Desamortizaciones
En la reforma agraria liberal se abolió el régimen señorial, se desvinculó la tierra, se llevaron a cabo las desamortizaciones y se liberó el mercado agrícola. Con estas reformas se logró consolidar la propiedad privada de la tierra y se situó la tierra en manos de propietarios más activos.
La liberación del mercado agrícola estimuló la mejora de la producción y de la comercialización agrícola. Las desamortizaciones, principalmente la de Mendizábal en 1836 y la de Madoz en 1855, permitieron que miles de propiedades salieran al mercado y comportaron una profunda modificación de la propiedad territorial. Como resultado, a finales del siglo XIX habían cambiado de dueño miles de edificios y parcelas agrarias.
Grupos Políticos y Constituciones en el Periodo de Isabel II
En el reinado de Isabel II estuvieron vigentes dos regencias: la de María Cristina (1833-1840), que tuvo dos partes: la transición y su época progresista, en la cual se promulgó la Constitución de 1837. La segunda regencia fue la del general Espartero (1840-1843), caracterizada por un gobierno dictatorial.
Posteriormente, comenzó el reinado de Isabel II, que se compone de tres partes:
- La Década Moderada (1844-1854), en la cual se promulgó la Constitución de 1845.
- El Bienio Progresista (1854-1856), en el cual se produjo otra constitución, la de 1856, que no fue aprobada.
- El II Periodo Moderado (1856-1868).
Etapas del Reinado de Fernando VII
El Trienio Liberal (1820-1823)
El Trienio Liberal se inició con el pronunciamiento de Riego, que rápidamente impulsó una importante obra legislativa y reformas liberales. Fernando VII se vio obligado a jurar la Constitución de 1812 debido a las circunstancias del momento, pero intentó por todos los medios conspirar contra el gobierno para recuperar sus poderes y volver a proclamar el absolutismo.
Los liberales se encontraron con dificultades, como el enfrentamiento con el rey, la iglesia, los nobles y los levantamientos de los campesinos, lo que dio lugar a la división de los liberales en moderados y exaltados.
La Década Ominosa (1823-1833)
El fin del régimen liberal fue debido a la actuación de la Santa Alianza y los Cien Mil Hijos de San Luis. Fernando VII llevó a cabo una restauración y se volvió al absolutismo, iniciándose una persecución contra los liberales. Además del problema con los liberales, se unió el grave problema económico y el problema dinástico (carlistas).
En 1833 murió Fernando VII, lo que dio inicio a la Primera Guerra Carlista.
El Conflicto Dinástico
Para que Isabel II pudiera reinar, Fernando VII, influido por su mujer María Cristina, abolió la Ley Sálica. Los carlistas se opusieron rotundamente a este hecho. En 1832 presionaron fuertemente al monarca, gravemente enfermo, para que repusiera la Ley Sálica, que beneficiaba como candidato al trono al hermano del rey, el príncipe Carlos María Isidro.
María Cristina, como regente durante la enfermedad del rey, decretó una amnistía que supuso la vuelta de 100.000 exiliados liberales y se preparó para enfrentarse a los carlistas. Tras la muerte del rey, dejó como heredera al trono a su hija Isabel. Don Carlos se proclamó rey, iniciándose un levantamiento absolutista en el norte de España y después en Cataluña. Comenzaba así la Primera Guerra Carlista.